Un escenario base de crecimiento proyectado para el 2019 que iría entre 2,75% a 3,5% es lo que ayer reiteró en Concepción el presidente del Banco Central (BC), Mario Marcel, quien dio a conocer los detalles del Informe de Política Monetaria (Ipom), ejercicio que hizo ante la comisión de Hacienda del Senado hace unos días.
El personero, que entregó el Ipom durante un encuentro que tuvo lugar en la Universidad del Desarrollo, remarcó que ese crecimiento tiene como escenario condiciones externas menos favorables, con un tipo de cambio real fluctuante, con una política fiscal que se ajuste a la trayectoria comprometida con la autoridad la tasa de política monetaria, que el emisor redujo a 2,50%, por lo que es probable que para el año venidero se vaya hacia una convergencia neutral.
Comentó que esta medida se adoptó dada la evaluación que hizo en consejo del BC sobre el escenario macroeconómico y sus perspectivas, que incluyen la actualización de los parámetros estructurales y la evolución reciente de la economía.
Marcel, una vez terminada su exposición, comentó a este medio su visión de la economía, sobre cómo se viene el PIB para el Biobío y la meta para la inflación para el país.
- Hemos tenido ajustes en las proyecciones de crecimiento, pero están relativamente en el margen dentro de lo que es una situación que es positiva para el entorno en el cual nos estamos moviendo, en el que hay muchos factores de incertidumbre.
- Contamos con un marco de política macroeconómica que nos ayuda a enfrentar escenarios externos más adversos. Eso nos ha servido en oportunidades anteriores y se ha ido reforzando en el tiempo. En lo que se refiere a la política monetaria, hoy tenemos una de corte expansivo, que posee espacio para ajustarse en caso de un shock externo más desfavorable. Eso ayuda, al igual que contar con un tipo de cambio flotante, que absorbe parte de estos golpes externos y un mercado capital doméstico que nos da algo más de independencia respecto a los internacionales.
- Lo que hemos visto es que el ciclo que ha seguido la economía chilena ha sido más marcado en las regiones del norte, por el ciclo más profundo que ha mantenido la minería, y en el caso de la Región del Biobío afortunadamente ha mostrado un dinamismo mayor que el conjunto del país. Esperamos que eso siga siendo así. No tengo una proyección o cifra específica que aportar, pero hay una diversidad productiva en la Región que la ayuda a poder mantener una capacidad de crecimiento importante.
- Lo que pasa es que los volúmenes de comercio mundial se han ido debilitando y eso afecta a la economía chilena en su conjunto. Ahora, en industrias o regiones específicas depende la capacidad de diversificación de los mercados, aprovechar oportunidades que se presenten e ir rebalanceando el destino de las exportaciones. Eso es algo que hemos visto en algunos sectores que han hecho esos análisis y esperamos que eso ayude a esta Región a mantener su dinamismo.
- Claro, pero sí es importante hacer notar que en China el ajuste ha sido mucho más significativo en la inversión y el comercio, donde las exportaciones son mucho mayores al consumo doméstico. Por ende, los envíos orientados a los bienes de consumo aún podría mantener un dinamismo importante.
- La meta del Central es de un 3% en un horizonte de 24 meses, por lo que miramos más hacia adelante que cifras pasadas y si en esos números hubo alguna aparente manipulación, sería de un orden de magnitud relativamente pequeño, que se revirtió en los meses siguientes, por lo que en el acumulado no hay un efecto sistemático, lo cual nos da tranquilidad respecto a la política monetaria, pero mantenemos la preocupación respecto al riesgo que hay este tipo de manipulaciones. Entendemos que el INE, además de haber hecho las denuncias, inició las investigaciones y está en un proceso de revisión de sus procesos internos a fin de prevenir que estas cosas se repitan en el futuro.