Restan dramatismo a informe de Ocde sobre fatiga del modelo económico
La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (Ocde) advirtió que "el modelo económico chileno, basado en los recursos naturales está llegando a su límite". Sin embargo, este es un escenario que todavía está lejos de hacerse realidad de acuerdo a la visión de representantes de algunos de los sectores aludidos.
Según se desprende de la "Segunda Evaluación del Desempeño Ambiental", que fue presentada este jueves en Santiago en la sede de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) y que contó con la participación del ministro de Medio Ambiente, Pablo Badenier, Chile es una potencia económica de América Latina, pero la pregunta de los próximos 25 años es si podrá mantener ese crecimiento protegiendo al mismo tiempo su base de activos ambientales.
Así lo planteó Simon Upton, máximo responsable de la Dirección de Medio Ambiente de la Ocde, organismo intergubernamental que reúne a las 34 economías más desarrolladas del mundo.
producción versus
contaminación
En el ojo de la entidad están sectores como la minería del cobre, la pesca, la agricultura y la silvicultura, recursos naturales que Chile explota en gran medida, según el informe.
Esta situación, detalla el estudio de la Ocde, genera contaminación atmosférica en zonas urbanas, escasez y contaminación de agua, pérdida de agua y una gran vulnerabilidad al cambio climático. Y a pesar de que un tercio de la necesidad energética total de Chile se cubre con fuentes de energías renovables, sin embargo, las emisiones de gases de efecto invernadero y leña aumentaron un 23% entre el 2000 y el 2010.
Asimismo se describe que en 2015, Chile se comprometió a reducir en quince años la intensidad de sus emisiones en un 30% respecto de 2007, y en un 45% como máximo si dispone de financiación internacional.
Pero para alcanzar estos objetivos, "tendrá que ir más allá del enfoque fragmentado que ha caracterizado hasta ahora su política climática y esclarecer las responsabilidades institucionales en materia de mitigación del cambio climático y adaptación a él", precisa el informe.
recursos renovables
Como un vocero relevante del sector forestal chileno, el gerente Comercial y Asuntos Corporativos de Arauco, Charles Kimber, aclaró que el sector forestal chileno basado en plantaciones, tiene la gran ventaja de ser un recurso natural renovable.
"Plantamos más de lo que cosechamos, especies de rápido crecimiento, los árboles capturan carbono y sus productos son fabricados con bajísimas emisiones al hacer uso integral del árbol disminuyendo desechos usándolos para generación eléctrica limpia y renovable", señaló.
Chile, dijo Kimber, goza de una ventaja competitiva respecto de muchos otros países, "ya que cuenta con una industria sustentable que contribuye de manera positiva a la sociedad".
El desafío es avanzar más hacia productos con mayor valor agregado e incentivar aún más la construcción en madera. "La participación de Chile en eventos como la Expo Milan o la Bienalle de Venecia que están mostrando que hay un mundo en la arquitectura, construcción y diseño por desarrollar a partir de la madera de Chile", destacó Kimber.
La visión de la Ocde está lejos de un escenario catastrófico para el director de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) y presidente del Consorcio Agrícola del Sur (CAS), José Miguel Stegmeier, quien al contrario, prevé un gran potencial para su sector a futuro.
Estimó que probablemente es una conclusión que tiene más que ver con la minería y en parte con el sector forestal y la pesca que con la agricultura, particularmente con la fruticultura y vitivinicultura, dice.
En este sentido, Stegmeier destaca el gran desarrollo que ha experimentado el sector frutícola en los últimos años. Sostiene que poder llegar con fruta fresca de calidad a los diversos mercados del mundo es la prueba de mayor valor y reconocimiento para la fruta chilena. Por eso también, es que fruta que se procesa para jugos, deshidratados, mermeladas, conservas, es aquella de menor calidad, menor tamaño o fuera de norma.
En relación a la vitivinicultura, el dirigente gremial, afirma que también nuestros vinos, incluso los despachados a granel, involucran un sofisticado proceso que parte con la selección del suelo, clima, latitud, variedad, entre otros factores que permiten que Chile esté hoy entre los cinco países más importantes en producción y calidad en todo el mundo.
Y, en el ámbito ganadero, Stegmeier declara que ya sean cerdos, pavos, pollos, vacunos y corderos, Chile puede, especialmente por sus condiciones sanitarias, llegar con carne en diversos cortes que, al igual que la fruta, representan el mayor valor agregado posible para nuestras condiciones.
"Quiero decir que vale más un lomo entero exportado a un buen mercado que ese mismo lomo molido y hecho hamburguesas por más que también sean exportables y que involucren más procesos. Y la agricultura, precisa, está en ese proceso de incorporar valor".
Admite que "sí es necesario hacer mayores esfuerzos en darle componentes de valor agregado a aquellos factores que rodean al producto, como son la trazabilidad, el relato o historia del producto, su funcionalidad saludable, es decir, su identidad e identificación con el excelente ambiente del que nuestro país dispone para producir alimentos", concluye José Miguel Stegmeier.