En español, inglés, latín e italiano, el papa León XIV ofició su primera misa
En la ceremonia lamentó que "son muchos los contextos en los que la fe cristiana se considera un absurdo, algo para personas débiles y poco inteligentes".
Ante los cardenales que lo habían elegido 24 horas antes, el papa León XIV ofició ayer su primera misa en la mismísima Capilla Sixtina, en la cual se realizaron las oraciones en latín, pero las dos primeras lecturas fueron en inglés y español, los idiomas del nuevo pontífice, y el salmo en italiano.
Además, la instancia tuvo dos simbolismos más. Primero, se eligió a dos mujeres, dos religiosas, las únicas presentes, para leer las lecturas ante los miembros del colegio cardenalicio. Luego, Prevost decidió usar zapatos negros, al igual que los usó Francisco en su pontificado, abandonando así la tradición de los zapatos rojos de los anteriores pontífices.
Durante la ceremonia, el papa León XIV lamentó que en la actualidad "son muchos los contextos en los que la fe cristiana se considera un absurdo, algo para personas débiles y poco inteligentes". Ante ello, hizo un llamado a "anunciar el Evangelio donde se ridiculiza a quien cree, se le obstaculiza y desprecia o, a lo sumo, se le soporta y compadece", en una homilía enfocada en la misión de evangelizar de la Iglesia.
Pero también criticó la visión de algunos sobre un Jesús "reducido solamente a una especie de líder carismático o a un superhombre, y esto no sólo entre los no creyentes, sino incluso entre muchos bautizados", de los que dijo que, así también terminan viviendo "un ateísmo de hecho".
Por ello pidió a los miembros del colegio cardenalicio que, "como enseñó muchas veces el papa Francisco", den "testimonio de la fe gozosa en Jesús Salvador".
Para conseguir lo anterior, agregó, "es fundamental hacerlo antes de nada en nuestra relación personal con Él, en el compromiso con un camino de conversión cotidiano. Pero también, como Iglesia, viviendo juntos nuestra pertenencia al Señor y llevando a todos la Buena Noticia".
Ee.uu. y el nuevo papa
Mientras todo el mundo cristiano celebra al nuevo papa, la administración del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, tuvo que referirse a unas publicaciones que anteriormente había hecho el entonces cardenal Prevost, donde compartió artículos de prensa críticos con el Gobierno del republicano y específicamente contra el vicepresidente, JD Vance.
La vocera de la Casa Blanca, Karoline Leavitt, restó importancia a la polémica al recordar que Trump aseguró estar "muy orgulloso de tener un papa estadounidense". "La reacción del presidente al anuncio del papa León fue muy clara", señaló.
"Creo que fue una sorpresa para todos. Los medios de comunicación se sorprendieron al informar sobre eso ayer, pero es algo muy bueno para EE.UU. y para el mundo. Estamos orando por él", dijo Leavitt, católica practicante, durante una sesión con periodistas en la residencia ejecutiva.
Por su parte, el hermano mayor del papa y simpatizante del presidente Trump, Louis Prevost, también habló sobre el tema y expresó a Efe que espera que "no se politice" el nuevo papado, y confía en que el pontífice una a los liberales y conservadores de la Iglesia católica. Aunque ideológicamente se diferencia de su hermano y lo ha demostrado en sus redes sociales donde da su apoyo a la visión del mandatario.
"Para un ciudadano como yo hace sentido porque no puedes venir aquí y aprovecharte. Si quieres venir, adelante, pero ven legalmente. No vengas y seas una sanguijuela", comentó Louis Prevost.
Aun así, aseveró que tienen una relación cercana, se llamaban cada semana y él entiende al nuevo pontífice, quien adquirió la ciudadanía peruana y habló en español en su primer discurso, porque los "ojos de la Iglesia ven a los migrantes solo como personas pobres que buscan una mejor vida".
"Y puede ser, pero la manera en la que se está haciendo, a través de los carteles y el tráfico de personas, y ese tipo de cosas, es inaceptable", opinó.
Louis Prevost también recordó que desde niños molestaban a Robert con que algún día sería papa, corazonada que revivió cuando lo nombraron cardenal en 2023. "No puedo expresar completamente los sentimientos dentro de mí sobre cómo es saber que tu hermano es el papa. Es indescriptible".