Prevención por llamados telefónicos fraudulentos
Constantes son las advertencias respecto de nuevos métodos de estafa que se han detectado en el país, las que siempre están actualizándose, en especial por el gran uso de los dispositivos móviles y de aplicaciones de mensajería para realizar diversos trámites y que abre la puerta a que estafadores recurran a nuevos métodos para engañar a las personas.
Las estafas telefónicas no son un fenómeno nuevo, en especial el llamado "cuento del tío", que se relaciona con una historia que refiere a un conocido a un familiar que necesita dinero o un depósito urgente, así como también las llamadas "estafas por voz", que son un problema creciente que ha llevado a las autoridades a tomar medidas para proteger a los usuarios. Estas estafas se caracterizan por la suplantación de identidad y la solicitud de información personal o dinero a través de engaños, pero que pese a lo reiterado sigue teniendo víctimas que responden a las instrucciones que se dan.
En marzo pasado, el Ministerio de Transportes y Telecomunicaciones, en colaboración con la Subsecretaría de Prevención del Delito, lanzó una numeración especial para las empresas, con el fin de ayudar a las personas a identificar las llamadas comerciales deseadas y no deseadas, y así prevenir posibles fraudes o estafas. La normativa emitida por la Subsecretaría de Telecomunicaciones establece dos prefijos especiales para identificar las comunicaciones masivas o automatizadas, tanto solicitadas como no solicitadas.
Además, la nueva medida designa el bloque de numeración "600" para las llamadas comerciales solicitadas, es decir, aquellas provenientes de empresas con las que un usuario realmente tiene relación, como podría ser una cita con un centro médico o una llamada de cobranza de deudas. En cambio, se asignó el prefijo "809" para identificar las llamadas que no son solicitadas, donde se incluyen a aquellas que corresponden a ofertas comerciales o televentas masivas.
Las llamadas con una intención comercial suelen ser las que provocan mayor desconfianza, en especial porque pueden reiterarse una y otra vez durante una sola jornada, sin que pueda ser identificado un número en especial, ya que van cambiando constantemente, por lo que son consideradas spam. Esto se debe a que en nuestro país es común que las empresas realicen llamadas automatizadas o de operadores para ofrecer productos o servicios de empresas y, de hecho, el mismo ministerio informó que algunos estudios internacionales señalan que del total de contactos que recibe un usuario mediante el teléfono, más del 70% corresponden a spam y de ellas un 25% son llamadas fraudulentas.
Por eso, es importante que esta nueva numeración entre en vigencia plenamente, que según lo establecido será en seis meses contados a partir de la publicación de la resolución en el Diario Oficial, luego de lo que quedará estrictamente prohibido realizar este tipo de contactos utilizando numeraciones distintas a las establecidas.
Por ahora, es importante mantener las medidas de prevención correspondientes, para evitar caer en alguna estafa telefónica, ya que no es fácil distinguir a quien llama de manera legítima y quien lo hace para buscar nuevas víctimas. Una de las más reiteradas es, por ejemplo, aquella en que una voz solicita que su número sea agregado a la aplicación Whatsapp con la excusa de no poder hacer llamados u otras en que se asegura que fue recibido un currículum vitae.
Compartir los datos respecto de este tipo de llamados fraudulentos es clave para mantener la alerta a nivel familiar y de los grupos cercanos, sobre todo si hay menores de edad que cuentan con celulares o adultos mayores, que pudieran estar más expuestos a estos engaños. Si bien las denuncias y medidas para frenar los delitos deben ser parte del actuar de las autoridades, la comunidad también puede aportar con la autoprotección necesaria.
Compartir los datos respecto de este tipo de llamados fraudulentos es clave para mantener la alerta a nivel familiar y de los grupos cercanos, sobre todo si hay menores de edad que cuentan con celulares o adultos mayores, que pudieran estar más expuestos a estos engaños