"Quisimos traer a las familias y ayudar a cerrar un ciclo que es doloroso"
Más de 70 seres queridos de la tripulación maulina lanzaron flores al mar en el punto que concentró la búsqueda de los restos de la lancha.
Lanzando bengalas al cielo, haciendo sonar sus sirenas y gritando un último adiós, pescadores artesanales de distintas caletas cercanas rindieron honor y acompañaron a los familiares de la tripulación de "Bruma", quienes se despidieron definitivamente de sus seres queridos en alta mar, dando fin a una búsqueda que se extendió por 18 días desde la madrugada del 30 de marzo en las cercanías de la Isla Santa María.
Los familiares de Jonathan Torres, Carlos Escárate, Julio Gallardo, José Carrasco, Juan Muñoz, José Medel González y su hijo José Medel Sepúlveda, se subieron a bordo del remolcador Janequeo de la Armada, y tras tres horas de viaje llegaron hasta la última ubicación conocida de la lancha oriunda de Constitución, a 15 millas náuticas al noroeste de la Isla Santa María.
"La salvaguarda de la vida humana en el mar es permanente para la Armada de Chile y la autoridad marítima nacional. Colocamos todos los esfuerzos posibles y hoy también es un día triste para nosotros y es por eso que quisimos en esta rebusca simbólica, traer a las familias y ayudarlos a cerrar un ciclo que es doloroso", explicó el contraalmirante Arturo Oxley, Jefe de la II Zona Naval, al finalizar una ceremonia religiosa en alta mar, que también buscaba dar homenaje a las víctimas del siniestro.
Una larga búsqueda
Desde que la lancha tuvo su último contacto con tierra la madrugada del 31 de marzo, se inició una búsqueda para dar con los 7 tripulantes con vida, no obstante las esperanzas que aún tenían sus familiares se apagaron al encontrar la balsa de emergencia sin activar el 4 de abril. Desde entonces, el despliegue de la Armada junto a pescadores artesanales del Maule y Biobío, así como de empresas privadas se centraron en buscar los restos náufragos de la embarcación.
"A medida que pasaron los días y no teníamos resultados positivos y otras evidencias pasamos a una fase de búsqueda submarina, donde pudimos encontrar algunos restos -con apoyo importantísimo de empresas privadas- que la verdad dan cuenta de un nivel de fragmentación muy grande y que evidentemente hace muy complejo haber continuado (la búsqueda)", explicó el contraalmirante sobre la decisión de finalizar el despliegue este miércoles.
Oxley reiteró que los esfuerzos navales se concentran en la búsqueda de sobrevivientes en el mar y que las rebusquedas son un valor agregado muy importante por lo demás, pero que no es una obligación.
"Entendiendo lo sensible de la situación, hicimos todo lo posible y fuimos mucho más allá y este es el resultado de ese trabajo coordinado, pero lo más importante, informando primero a la familia para que estuvieran en conocimiento de nuestras acciones, de nuestros aciertos, a veces no fuimos tan efectivos, nos pasaron cosas, perdimos cosas en este proceso, pero al final del día creo que fuimos muy afortunados en ir a buscar y encontrar lo que ya encontramos, porque hacer trabajos en 300 metros de profundidad y más es realmente complejo. No quiero decir que estamos felices, porque obviamente esta es una tragedia, pero estamos satisfechos profesionalmente del esfuerzo que desarrollamos", explicó el contraalmirante.
Presente también en esta ceremonia, el delegado regional, Eduardo Pacheco apuntó a que ahora "viene el proceso legal, hay todavía un tema en materia judicial que es muy importante, el Gobierno se ha hecho parte con una querella en este caso (...), pero vamos a seguir junto a las familias, los seguiremos acompañando. Vienen semanas donde van a tener mucha incertidumbre respecto a su futuro y el Gobierno ha transmitido una señal clara el estado sigue acompañando a nuestros compatriotas pescadores y las familias de la pesca del Maule".
18 días se extendió la búsqueda en el mar de los 7 pescadores desaparecidos el 30 de marzo en Coronel