Construcción de cortafuegos en la Región del Biobío
Las autoridades regionales han realizado una inspección de los más de 670 kilómetros de cortafuegos que se han construido en la Región del Biobío, como medida de prevención para evitar el avance de las llamas, en el caso de ocurrencia de incendios forestales.
Este trabajo de limpieza y desmalezado de esas fajas se realiza en forma coordinada entre la Corporación Nacional Forestal y la Dirección de Vialidad en sectores considerados como críticos, ya que las condiciones climáticas, con altas temperaturas, fuerte viento y baja húmedad, son favorables para el avance del fuego. Por ello, las autoridades han realizado un llamado a las personas a ser previsoras y no efectuar fogatas en sectores de bosques.
Desde fines del año pasado los expertos habían pronosticado una temporada de incendios con mayor riesgo en la zona centro-sur del país. Una de las primeras medidas que se adoptaron fue aumentar la cantidad de cortafuegos en los puntos críticos identificados en las comunas con más ocurrencia de siniestros en la zonas de interfaz o urbano-forestal. Las faenas comenzaron en la provincia de Biobío, para continuar en la de Concepción y finalmente en la de Arauco. Se trata de atacar los sectores de mayor riesgo de pasto y maleza seca, especialmente al lado de las carreteras y en cercanías de poblaciones, considerando las altas temperaturas reinantes.
En el pasado verano, ésta fue una de las zonas más afectadas por los incendios de bosques. Este año, operan en la Región 41 brigadas terrestres de Conaf.. De ellas, 17 están en la provincia de Concepción, 15 en la de Biobío y 9 en la de Arauco. También hay 11 aviones y helicópteros; vehículos especializados y equipamiento tecnológico, mientras las empresas privadas, como Arauco y Cmpc, también realizaron fuertes inversiones en brigadas y equipos para la prevención y combate del fuego.
Cabe recordar 99,7% de los incendios forestales son provocados por acción humana, ya sea por descuido o por acción intencional, por lo cual las autoridades han llamado a las personas a denunciar cualquier situación sospechosa al teléfono de emergencia 130 de Conaf.
El ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, ha señalado que, en conjunto, los sectores público y privado invierten unos 300 mil millones de pesos en prevención y combate del fuego durante la temporada. Asimismo, las provincias de Malleco y Arauco presentan una alta intencionalidad en el origen de incendios forestales. Por ello, se intensifican los patrullajes preventivos y comunitarios. Asimismo, un 8% de los focos se puede atribuir a negligencia en el tendido eléctrico.
La Región del Biobío tiene una gran masa forestal y también mucha interfaz urbano-rural, es decir, de poblaciones que se encuentran ubicadas casi al lado de los bosques, por lo que las llamas pueden generar mucho daño. De ahí que también los residentes de esas localidades que están cercanas a los bosques han sido capacitados en cómo despejar la maleza para evitar que las llamas avancen hacia sus casas. La alianza público-privada en los últimos años ha permitido aminorar el impacto del fuego y salvar vidas.
En la temporada 2023-2024 se registraron 1.407 incendios en la región, un 29% menos que en el período anterior, afectando una superficie de 5.334 mil hectáreas. Dos tercios de los afectados fueron pequeños productores agrícolas y campesinos usuarios del Instituto de Desarrollo Agropecuario, en muchos casos personas de escasos recursos a quienes les fue muy difícil o casi imposible reponerse por sí solos de las pérdidas totales que sufrieron. De ahí la importancia de realizar y mantener despejados los cortafuegos, para evitar que en caso de siniestro se propaguen las llamas, y que se trabaje con la comunidad de las zonas más riesgosas, para que tomen medidas preventivas.
Se han construido 670 kilómetros de cortafuegos en la Región del Biobío, como medida de prevención para evitar el avance de las llamas, en el caso de ocurrencia de incendios forestales.