"Queremos posicionar este sitio histórico en el lugar que se merece"
Máxima directiva de la entidad que está a cargo del Circuito Patrimonial de Lota, explica los logros y desafíos a un año de asumir administración.
Ésta es la historia con un pie forzado, la de Fundación Cepas, entidad que cumple un año a cargo de la administración del Circuito Patrimonial de Lota, que comprende la Mina Chiflón del Diablo, el Pueblito Minero, el Museo Histórico y el Parque Isidora Cousiño. Claramente, pilares del patrimonio de la comuna, como también referentes del legado industrial y cultural de la región.
Y anotábamos el pie forzado en este relato en el entendido que la nueva entidad administradora asumió el 1 de diciembre de 2023, en cierta forma, sin buscarlo.
Lo anterior, a partir de la invitación extendida por Corfo, una vez que bajan a Fundación Procultura en este rol; en base a la trayectoria de más de 34 años de Cepas dedicados al desarrollo cultural y preservación patrimonial
"Con entusiasmo y responsabilidad, aceptamos este contrato de administración provisoria, el cual ya hemos gestionado durante 12 meses y que se ha extendido hasta octubre de 2025", explica Pamela Uriarte, directora ejecutiva de Cepas, proceso que una vez haya finalizado, se llevará a cabo el proceso de licitación para indicar la administración definitiva.
Patrimonio humano
Sobre logros de este primer año, la representante de la fundación a cargo, ilustra que entre los avances significativos se encuentra la preservación y puesta en valor de algunos de estos hitos emblemáticos de la comuna, fortaleciendo así el turismo, cuidar el patrimonio con miras a consolidar la identidad cultural de Lota, posicionándola como comuna, para la postulación a Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
- ¿Cuál fue su primer objetivo al asumir la administración?
- Desde el inicio, el principal enfoque fue garantizar la estabilidad laboral de los trabajadores y trabajadoras del circuito, muchos de ellos exmineros y habitantes de la comuna, además de superar desafíos climáticos y estructurales que afectan a los espacios patrimoniales.
- De los sitios del circuito bajo su administración, ¿cuál sienten debe seguir afinando su función?
- Estamos convencidos de que un sitio patrimonial como el Circuito Lota, con su gran trayectoria histórica, merece grandes proyectos que fortalezcan su infraestructura y equipamiento en toda su magnitud. Es fundamental recordar que todos estos espacios cuentan con más de un siglo y medio desde su creación, lo que exige un enfoque especial para su conservación y desarrollo. Entre los distintos lugares que conforman este circuito, creemos firmemente que la mina requiere la mayor atención. Su intervención debe considerar tanto el interior como sus áreas exteriores, incluyendo accesos, vías de salida y el entorno inmediato.
- ¿Cuál es la ruta en ese caso?
- Es imprescindible diseñar y ejecutar un plan integral que permita, en conjunto con el Estado, elevar el estándar de este icónico polo turístico, asegurando su sostenibilidad y proyección futura.
- ¿En qué estado recibieron estos espacios?
- Cuando llegamos, el Circuito Lota presentaba un panorama desafiante: solo el Parque estaba operativo, mientras que el Museo Minero llevaba cerrado más de cinco años y la mina Chiflón del Diablo mostraba serios problemas de mantenimiento.
- ¿En qué sentido?
- Siendo tan emblemático y como uno de los mayores puntos de interés de Lota, no había recibido labores de conservación durante más de un año, a pesar de su alta afluencia de visitantes. Por ello, asumimos implementar un trabajo sistemático de conservación bajo la supervisión de nuestros profesionales en prevención de riesgos. Desde entonces, el equipo a cargo se ha enfocado en diversas áreas claves, incluyendo el sector Pueblito Minero, los pabellones, la pulpería, así como en mejoras en los pasamanos, la fachada, pintura, higienización, jardinería y la habilitación del sector de picnic, recientemente inaugurado. También, se llevó a cabo un trabajo técnico esencial en la mina, enfocado en su fortificación para garantizar una experiencia más segura y tranquila, incluso en caso de cortes de energía.
Reabre el chiflón
Considerando los frentes climáticos de junio pasado, que provocaron graves repercusiones en la comuna, trajo severos daños en el acceso del Chiflón del Diablo: desprendimientos de tierra y barro obstruyeron el acceso principal, mientras que un gran socavón en las inmediaciones de la mina, representó un riesgo para la seguridad de los visitantes.
En estos casi seis meses de cierre de la mina, Corfo invirtió $50 millones en la mejoras.
"Estas acciones se realizaron como parte de un periodo de marcha blanca, por lo mismo ahora nos complace anunciar que, a partir de mañana (hoy), el Monumento Nacional Mina Chiflón del Diablo estará accesible al público", destacó Uriarte.
- ¿Planes para 2025?
- Uno de nuestros principales objetivos es asegurar la adjudicación de la administración del Circuito Patrimonial, al menos por un periodo de 20 años. Este paso nos permitirá continuar con la consolidación de nuestro trabajo y garantizar una gestión sostenida y a largo plazo. Tenemos preparado un ambicioso plan de desarrollo que tiene como meta internacionalizar el Circuito Patrimonial de Lota.
- ¿Cómo?
- Queremos posicionar este sitio en el lugar que merece, no sólo por su importancia histórica, también por el papel que jugó en el desarrollo económico de nuestra nación. Lota, con su rica herencia minera, fue un motor clave para la industrialización de Chile, y creemos que, hoy más que nunca, es el momento de revivir y poner en valor ese legado.