Las olvidadas preocupaciones de las comunas rurales
Si bien la Provincia de Concepción cuenta con doce comunas, en la última semana ha quedado en evidencia que no todas ellas cuentan con las mismas oportunidades, en especial si se comparan sus realidades en torno a servicios como el transporte público o los suministros básicos con aquellas que forman parte del área más cercana a la capital regional.
Si bien se trata de la provincia con menor superficie de territorio dentro de la Región del Biobío, la concentración de población, en especial en la zona metropolitana denominada Gran Concepción, implica una forma distinta de abordar las necesidades de sus habitantes, así como también la gran cantidad de instituciones que están instaladas en la zona urbana impulsa una constante preocupación por sus condiciones de infraestructura, servicios y obras en general.
Las docena de comunas que conforman la provincia son Talcahuano, Penco, Tomé, Florida, Hualqui, Santa Juana, Lota, Coronel, San Pedro de la Paz, Chiguayante, Hualpén y Concepción, todas con distintas dinámicas considerando sus condiciones geográficas, de paisaje, áreas productivas, barrios definidos y desarrollo en general. Las diferencias entre cada una son entendibles y lógicas en el sentido de que no existen territorios exactamente iguales, así como también sus historias, autoridades y ubicación son también distintas
Sin embargo, es importante tener presente que las diferencias entre las comunas de una misma provincia no pueden ser tan marcadas solo por la condición urbana o rural que las defina, ni tampoco por la distancia en la calidad de vida de sus habitantes.
En las páginas de nuestro diario se han abordado diferentes problemáticas que están afectando especialmente a las comunas rurales de la provincia, entre las que se cuentan Santa Juana, Hualqui y Florida. Esta última enfrenta una serie de dificultades en el transporte público, las que se hicieron visibles con la peor de las situaciones, como es el crimen de una joven que fue asesinada tras aceptar el traslado hacia Concepción por parte de un conductor particular de la comuna.
El caso remeció a la comunidad floridana y se encuentra en investigación por parte del Ministerio Público, que ya formalizó a un único imputado. Sin embargo, más allá de la tragedia, las precarias condiciones en que se cumple el transporte público entre la comuna y la capital regional generó una fuerte reacción de sus habitantes, que aseguran que se ven expuestos a situaciones de inseguridad en especial los fines de semana y festivos por la irregularidad de los horarios y disponibilidad de buses.
Vecinos y autoridades de la comuna aseguraron que los ofrecimientos de traslado por parte de particulares son frecuentes, que hay quienes caminan hasta dos kilómetros en busca de transporte y que esperan que en algún momento se pueda regular la operación de las líneas de buses que operan en la zona. Hay que considerar que, en una situación distinta, pero también relevante, hace casi dos semanas también comenzó a operar un nuevo servicio de buses subsidiados hacia y desde Santa Juana, los mismos que días después se confirmó que tenían varias falencias que deberán ser subsanadas para su uso.
Otro tema relevante y que afecta a las mismas comunas rurales de la provincia es el robo de cables de cobre, lo que incide directamente en el suministro de electricidad. El Ministerio Público confirmó que este año el delito ha crecido en un 50% respecto del año pasado y que desde marzo trabaja un equipo especial en la detección de los autores del ilícito, que estiman serían bandas de crimen organizado.
El robo no sólo complica a las empresas distribuidoras eléctricas, sino que también deja a sectores habitados completos sin el servicio, ocasionando complicaciones y pérdidas entre las familias afectadas. El difícil acceso a algunos puntos de las zonas rurales y también la falta de una alerta más ágil que permita detectar el punto afectado con mayor rapidez hace que estas situaciones puedan durar horas e, incluso, más de un día para lograr su reparación.
Por último, un tema no menor se relaciona con un área distinta, como es la actividad cultural en las comunas rurales, un ámbito que no siempre puede ser impulsado por la falta de espacios donde desarrollarlo y, según admiten en los propios municipios, tampoco cuentan con personal suficiente para poder optar a fondos concursables que les permitan tener eventos propios.
Se trata de temas muy distintos unos de otros, pero que pueden hacer la diferencia entre una buena calidad de vida y una menor, que no debe ser afectada por el lugar donde un habitante de la Región vive, si no que debe ser parte de los estándares básicos que se pueda ofrecer a la ciudadanía en general.
Es importante tener presente que las diferencias entre las comunas de una misma provincia no pueden ser tan marcadas solo por la condición urbana o rural que las defina, ni tampoco por la distancia en la calidad de vida de sus habitantes.