"Siempre hemos presentado las necesidades a través de proyectos"
Atraer inversión, acercar a las comunidades con el Estado y visibilizar la comuna han sido parte de sus tareas.
La milenaria historia de Alto Biobío estaba guardada entre senderos, bosques, aguas y cordillera, hasta la llegada de misioneros católicos y del reino español que develaron la fuerza viva del pueblo pehuenche.
La poca existencia de libros que documenten la vida más allá de donde se une la cordillera con el río Biobío, dio cuenta de un territorio rezagado, alejado y pujante. Uno que desde hace dos décadas tiene un ordenamiento político administrativo claro, liderado por un municipio: de esos años, más de la mitad ha sido encabezado por el técnico agrícola Nivaldo Piñaleo.
Electo en tres periodos, posicionado con un liderazgo que ha cruzado fronteras y a pocos meses de entregar su cargo, aborda junto a Diario EL SUR los avances y desafíos de un cargo que define como un verdadero honor.
"Estoy muy agradecido de la gente del territorio de Alto Biobío, porque aparte de yo pertenecer al territorio también me han dado la oportunidad de conocerlo más, y también a las autoridades que he conocido del Estado y Gobierno", explica, a pocos días de llegar de un viaje a Colombia, donde junto a la fundación Huella Local participó de charlas y reuniones con municipios alejados para compartir experiencias en la gestión.
En la conversación, destaca que "ha sido un aprendizaje importante para mí, y el trabajo que hemos enfrentado no ha sido fácil, porque somos una comuna pequeña con recursos limitados, con profesionales limitados y muchos programas que el Estado le exige a las municipalidades administrar".
-¿Qué tan relevante ha sido lograr aunar criterios entre los distintos actores que viven en la comuna, sobre todo pensando en la historia y las características del territorio?
-Ha sido un desafío preparar profesionales, preparar personas, y eso acompañado con los dirigentes tradicionales, los 'lonkos', las organizaciones, además de los representantes de organizaciones religiosas, y personas naturales a quienes escuchamos para generar una demanda de proyectos, que han ido bien, porque hemos atraido recursos públicos, convenios con empresas privadas.
En ese punto, ejemplifica con uno de los proyectos que se busca sacar adelante durante este año, relacionado con la construcción de un complejo habitacional de 374 viviendas con características especiales y pertinencia territorial.
"Yo crecí en una familia con mucho amor y valores, pero en una vivienda que entregaba condiciones muy precarias, y cuando pude trabajar en el territorio y luego llegar a la municipalidad, me motivó decir que trabajáramos un proyecto así, para cambiar la calidad de vida de quienes vienen", destaca.
"Así trabajamos otros proyectos, lo que también ha sido visibilizado a nivel internacional, con reconocimientos en países como Ecuador, y otros que trascienden a nivel nacional. Vengo de exponer lo que hemos desarrollado en Colombia, gracias al vínculo con las entidades privadas, para compartir con los municipios que están en la selva lo que hemos crecido y pese a las dificultades", suma.
Atraer inversión
Uno de los sellos que dejará la gestión de Nivaldo Piñaleo es la inversión atraida a la comuna: de hecho esta semana, el Consejo Regional aprobó recursos para la construcción de un terminal de buses y del centro comunitario Cauñicu.
Inversiones que se suman a otras como la electrificación de toda la comuna, el museo Pehuenche construido en Ralco o el nuevo puente Chichintahue, que se levantará tras las fuertes lluvias e inundaciones del año pasado.
Sobre esto, el jefe comunal no duda en decir que las cosas se han hecho bien. "Que Alto Biobío sea bien catalogado en esa materia dentro de las comunas de la Región es algo que me hace sentir bien, y espero cerrar el año diciendo que los recursos apalancados se gastaron para el beneficio de la comuna, no para el lucro del alcalde o los funcionarios. No me gusta la corrupción, porque uno tiene trabajo gracias a la gente, y los recursos que se apalancan para el territorio deben llegar al territorio", enfatiza.
-¿Qué tan relevante ha sido visibilizar a las autoridades de Gobierno las problemáticas que vive la comuna, pero también para el propio territorio tener claro que el camino es el diálogo, para lograr apalancar recursos?
-La fortaleza que hemos tenido es conversar mucho con las bases, con las comunidades, los dirigentes y a través de eso, tener la misma conversación con las autoridades. Con eso, entender las dificultades y que se dé respuesta a estas necesidades, siempre planteadas a través de proyectos, de programas, y no una solicitud que diga 'necesito puente, camino o viviendas'. Nosotros colaboramos para que los equipos técnicos vengan, realicen las mediciones y así podamos presentar el presupuesto de cada proyecto.
Eso hemos hecho, y ha permitido una credibilidad transversal en el trabajo que hacemos, independiente de la mirada política del gobierno de turno, siempre como territorio colaborando para ser mediador con las comunidades indígenas y no caer en violencia, para que toda empresa contratista tenga la seguridad de trabajar. Eso lo hicimos con cada gobierno de turno, siempre acompañado de los dirigentes y la gente del territorio, pudiendo dialogar.
Sobre la temática de tierras, plantea que "no es necesario cortar caminos o bloquear los servicios, sino llevarlo a una mesa de diálogo, y desde allí planificar el trabajo con cada entidad, sin dejar de lado las demandas de la comunidad. Eso nos da una credibilidad para apalancar recursos en el Gobierno Regional y distintos ministerios, para confiar en nosotros y traspasarnos los recursos".
-¿Considera usted que en estos años ha habido un cambio de mirada de parte de las autoridades al recibir las demandas y proyectos provenientes de Alto Biobío?
-Ese trabajo lo hemos hecho como alcalde, concejo y comunidades, planteando que mediante el diálogo podemos avanzar. En su momento, trabajamos en el proyecto de ley que fue la regularización de la tarifa eléctrica, donde fuimos promotores como Alto Biobío. Pero también cambios en el Código de Aguas, hablando con el Parlamento para que haya otra mirada; hemos hecho un trabajo con los parlamentarios para exponer nuestra realidad y poniéndonos a disposición para facilitar el trabajo a los estamentos públicos.
Eso ha sido siempre con una mirada de pertinencia, siempre dando el valor propio a cada una de las comunidades, respetando sus tiempos y espacios, lo que ha permitido que los organismos confíen y nos ayuden mucho.
El futuro
En el cierre, Nivaldo Piñaleo reconoce que "falta mucho por construir", pero plantea que "lo importante es que las redes estén instaladas, y espero que paso a paso el territorio llegue a ser una zona turística, con los caminos asfaltados, electrificados, pueda haber más hospedaje, servicios básicos para los turistas, mejor atención en salud y educación. Pero siempre conversar con la gente y no desconectarnos, mantenernos unidos, teniendo presente nuestra labor, algo que hasta ahora nos han agradecido mucho".
-¿Qué tareas siente que quedaron pendientes de cumplir en su rol como alcalde?
-En materia de gestión tenemos que dejar instalado el reconocimiento como territorio pehuenche, porque a nosotros hoy día nos reconocen como mapuches. Eso debería quedar iniciado para que la nueva autoridad lo continúe y se reconozca así ante la ley indígena, porque eso le daría una pertinencia, espacio y fuerza a la gente, además de más facilidades para las autoridades de turno para que sigan invirtiendo en Alto Biobío. Es el único territorio donde se habla de una cultura viva, todavía hablamos en chesungun y eso hay que fortalecerlo.
Además, dice que para el futuro espera que "la idea es continuar con eso, quien tenga que seguir en el territorio como autoridad comunal tiene que seguir con la gestión y los proyectos. Esos procesos no se logran en cuatro años, la gente me permitió estar tres periodos, donde hemos trabajado mucho".
¿Y su futuro? "Voy a seguir vinculado al servicio público porque hay mucho por hacer. Seguiré asesorando a la municipalidad, y donde se requieran mis capacidades estaré disponible: me gusta trabajar en el territorio, pero siempre con una mirada transversal, porque toda la zona necesita apoyo y creo que podemos replicar lo que se ha hecho", culmina.