La necesaria protección a los menores
En los últimos años se ha registrado un aumento de las noticias referidas a la pedofilia, la pornografía infantil, el grooming (acoso sexual a menores vía Internet) o el homicidio de niños, como podría ser el caso del pequeño Tomás. Lamentablemente, los ataques a menores parecieran ser prácticas mucho más extendidas de lo que se cree. Ello explica que de forma permanente se desmantelen redes de pedofilia o de pornografía infantil.
El reciente informe de la Fundación Amparo y Justicia revela que el año 2023 se registraron 40.361 denuncias por delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes, versus las 41.999 reportadas en 2022, el cual fue considerado como el máximo histórico. Esta baja, indican desde la Fundación, refleja una estabilización en el número de casos ingresados, luego que en 2022 se observara un considerable incremento de denuncias: un 42% más que las registradas antes de la pandemia, cuando las instituciones volvieron a operar con normalidad y las escuelas regresaron a la presencialidad. Durante el período 2006-2023, han ingresado 431.445 denuncias de los delitos sexuales.
Sin embargo, a pesar de esta caída el año pasado, las denuncias por delitos de este tipo se mantienen sobre las 40 mil, un número alarmante si se considera que estudios a nivel mundial han estimado que más de un 80% de las violaciones y agresiones sexuales a menores no son denunciadas. De acuerdo con el estudio, las niñas y adolescentes siguen siendo las más afectadas, con un 84,3% de las denuncias ingresadas, versus el 15,7% que corresponde a víctimas de sexo masculino. En el caso de nuestra Región del Biobío, el año pasado se recibieron 4.298 casos, que representaron el 10,9% del total nacional.
En los últimos años ha sido necesario ir adecuando las leyes a las nuevas exigencias, pero a la vez es necesario prevenir estas situaciones, lo que obliga a replantearnos qué actitud debemos tener e inculcar respecto de la sexualidad. A mediados de 2019, se aprobó una indicación presentada por el Gobierno a un proyecto de ley para que los delitos sexuales contra menores no prescriban. Con la legislación anterior, había un plazo de cinco años para investigar estos delitos y diez años cuando se trataba de crímenes. Hay que considerar que cuando las víctimas son niños, sienten un comprensible temor de denunciar y en muchas ocasiones sólo se atreven a hacerlo cuando han pasado años y el delito había prescrito.
El abuso de menores es una forma de maltrato que incluye un amplio espectro de acciones entre un niño y un adulto. Es un delito deleznable y en aumento, si se considera que significa robar la inocencia y marcar la vida de un menor. En estos casos, se corta su línea de desarrollo sicológico y ese daño se observa en su etapa adulta.
El abuso de menores, la pedofilia y sus actividades anexas han resultado ser prácticas mucho más extendidas de lo que se creía, y hay que considerar que la mayoría de los casos no son denunciados. Tal vez uno de los más bullados fue el caso Spiniak, que salió a la luz pública en 2003. En 2012 se puso en marcha un paquete de medidas para combatir los abusos contra adolescentes y niños, por lo que se puede solicitar de forma gratuita información acerca de personas que hayan estado involucradas en este tipo de delitos, a través de la página web del Registro Civil. La legislación incluso inhabilita de por vida a los condenados por esos delitos para ejercer cualquier empleo directamente relacionado con niños.
Estos son delitos tienen una alta tasa de reincidencia, de manera que la sociedad no puede permanecer indiferente y debe proteger a sus menores. También los padres deben redoblar sus esfuerzos por protegerlos. Los abusos sexuales de menores no son errores o pecados que se pueden perdonar, sino que son graves delitos que deben ser perseguidos por la justicia y cuyos autores y encubridores merecen ser castigados duramente.
Un informe de la Fundación Amparo y Justicia dice que en 2023 se registraron 40.361 denuncias por delitos sexuales contra niños, niñas y adolescentes. De ellos, 4.298 fueron en nuestra Región.