Proyecto posicionará a recicladores de base como gestores de residuos de la Ley REP
Fundación El Árbol se encuentra buscando empresas que quieran potenciar el rol y las condiciones laborales de los recicladores, y que puedan financiar el programa en las distintas comunas.
Por Estefany Cisternas Bastias
La Ley de Responsabilidad Extendida del Productor (Ley REP) comenzará a regir en septiembre a nivel nacional, obligando a los productores de envases y embalajes a organizar y financiar la gestión de los residuos que dejan sus productos en el país.
A partir de esta medida, que favorecerá el reciclaje y protegerá el medio ambiente, es que la Fundación El Árbol se encuentra trabajando en un proyecto que potenciará la labor de uno de los principales actores involucrados en la gestión de residuos del Biobío: los recicladores y recicladoras de base.
Estos fueron considerados dentro de la ley como actores que pueden participar en el cumplimiento de las metas de reciclaje, siempre y cuando cuenten con previa certificación y registro. Sin embargo, aún quedan desafíos para asegurar definitivamente el rol de las y los recicladores de base como gestores de residuos, lo que los deja en desventaja frente a las empresas de este sector.
Recicladores en acción
La iniciativa en la que trabaja la fundación penquista lleva por nombre "Recicladores en acción" y considera cinco componentes de trabajo: primero, un catastro y diagnóstico comunal de recicladores, a fin de conocer la realidad de cada localidad; segundo, la vinculación y fortalecimiento, para lograr cohesión grupal, generar intercambios de experiencias y vincularlos con entidades, así como la Asociación Nacional Recicladores Chile, (Anarch); tercero, la formación de capacidades y formalización, donde se entregará apoyo técnico y acompañamiento a recicladores; cuarto, la visibilización y promoción del trabajo que realizan los recicladores a través de diversas instancias; y finalmente, la entrega de equipamiento, para mejorar las condiciones materiales con que los recicladores trabajan.
La coordinadora del programa, Paulina Romero, explicó que cada comuna tiene distintas realidades, por lo tanto, no todos los componentes se van a aplicar a todas, además el programa contempla un máximo de 2 años para concretarse, y un mínimo de 8 meses, dependiendo de la realidad de las agrupaciones.
"Para implementar el programa necesitamos financiamiento, que una empresa se interese por apoyar a los recicladores y financiar el programa en las comunas para mejorar sus condiciones laborales y posicionarlos como gestores de residuos", señaló Romero.
El proyecto está pensado para su aplicación en las 33 comunas del Biobío, así como también en Ñuble y La Araucanía. Se espera beneficiar a 250 recicladores de manera directa.
Los desafíos
La directora de la fundación, Daniela Concha, precisó que "las brechas que hoy enfrentan los recicladores de base dependen de su nivel de organización, aún hay varios que trabajan de manera individual y no han podido acceder a la certificación de sus competencias". Esto complica la labor de los recicladores, ya que el Ministerio de Medio Ambiente como requisito mínimo para ser partícipes de la Ley pide para estén certificados.
En cambio, para los que se encuentran formalizados el desafío es entregarles lugares de trabajo con más centros de acopio y medios de transporte para lograr la recolección selectiva de materiales, así obtener las autorizaciones sanitarias correspondientes.
Una de las integrantes de la Cooperativa de Recicladores Biobío, Iris Mardones, relató que los recicladores se asustan cuando se trata de formalizarse y por ello prefieren ser independientes, pero "si se les explicara bien cómo es la certificación, yo creo que todos querrían certificarse para llegar al gremio de recicladores".
En la actualidad, un gran porcentaje de los recicladores de base trabajan en condiciones de informalidad y precariedad por falta de capital de trabajo, lugares de acopio, medios de transporte, herramientas, entre otros, lo que ha dificultado su formalización. Ante esta realidad, El Árbol busca reconocer el rol de los recicladores y entregarles herramientas que favorezcan su formalización.
250 recicladores de base serán beneficiados de manera directa con este proyecto, en todo el Biobío, así como Ñuble y Araucanía.