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Fueron afectados por los incendios forestales de este año

Productores de berries de Santa Juana ya cuentan con sistemas de riego operativos gracias al programa Agroceler

Este proyecto, ejecutado por Unab y financiado por el Gobierno Regional del Biobío, colaboró con 17 personas dedicadas al cultivo de fruta en esa comuna. Se enfatizó que no solo se entregaron los implementos, también quedaron funcionando los dispositivos.
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Menos de cuatro meses después de perder de forma parcial o completa sus sistemas de riego, a causa de los incendios del reciente verano, 17 productores de berries de Santa Juana ya cuentan nuevamente con la implementación necesaria para trabajar sus cultivos, gracias a la colaboración prestada por el proyecto Agroceler, instancia que ejecuta la Universidad Andrés Bello (Unab) gracias a recursos del Fondo para la Innovación y Competitividad (FIC) del Gobierno Regional del Biobío.

Como contexto, hay que señalar que "Agroceler: Fruticultura 4.0 para la Región del Biobío", tiene como finalidad promover el desarrollo de la producción de berries y cherries en pequeños y medianos productores en siete comunas de nuestra zona, impulsando mejoras en sus procesos, en su trazabilidad y aumentando sus oportunidades de negocio.

El programa se encuentra en una segunda etapa, centrada en la transferencia e implementación tecnológica, la cual consideraba la mejora del equipamiento para regar. Ante las dificultades provocadas por los siniestros registrados durante la época estival, y que afectaron de manera muy fuerte a Santa Juana, se decidió adelantar la habilitación de los sistemas de riego, una de las pérdidas más importantes, según señalaron los afectados de esa comuna.

En abril se formalizó el compromiso de los responsables de la instancia y del Gobierno Regional para la colaboración en la recuperación de los implementos para distribuir agua en los cultivos. El siguiente paso fue habilitar, según las necesidades de cada uno de los favorecidos, los sistemas de riego, en base a los kits donados.

Alejandro San Martín, ingeniero civil y encargado del proyecto Agroceler, comentó que entre los equipos que fueron entregados se cuentan mangueras, planzas, bombas y motores. También se dejó funcionando los sistemas eléctricos que permitirán asegurar el riego.

"Esto fue un trabajo hecho a la medida de cada uno de los beneficiados, se consideraron sus necesidades, algunos requerían el sistema completo, desde la bomba hasta la línea de riego. Otros necesitaban un estanque o la cañería", detalló San Martín.

Agregó que primero se hizo un levantamiento de información en terreno, posteriormente se entregaron y habilitaron los elementos requeridos, una labor, insistió, que necesitó mucho trabajo, porque la finalidad fue dejar todo operativo. "Muchos perdieron lo que era tendido eléctrico o quedaron con la reposición de la compañía, pero eso solo llegaba hasta los postes de entrada de sus campos, entonces, en el punto de captación de agua no había electricidad o estaba el tablero quemado o cosas por el estilo, lo que se solucionó", explicó.

Iván Valenzuela, jefe de División de Fomento e Industria del Gobierno Regional del Biobío, comentó que el financiamiento y apoyo proporcionados a este proyecto obedecen a una trayectoria marcada por el éxito en su gestión y en el respaldo concreto y real a sus beneficiarios. "Su foco está en la entrega de herramientas para mejorar y modernizar su producción, pero considerando la tragedia de los incendios de febrero, tuvo la flexibilidad de entregar ayuda, rápida y oportuna, a quienes resultaron afectados, para salir adelante, reactivarse y retomar sus actividades, lo cual es muy destacable", señaló.

Recuperándose

Orlando Pezo es una de las personas favorecidas con los kits de riego entregados por el programa Agroceler. Vive en el sector Colico Centro de Santa Juana y, según comentó, el fuego devoró la mayoría de las plantas de frutillas de su producción, además de un galpón, una casa habitación y una cabaña nueva que no alcanzó a ser ocupada, todo obtenido con esfuerzo gracias a su trabajo, sin la ayuda de ningún organismo o recursos públicos, aseguró.

"El 2 de febrero, como a las 10.30 de la noche llegó el fuego y se quemó todo, perdí 12.000 plantas de frutillas. Como soy presidente de la junta de vecinos me preocupé de la gente y no vine a ver lo que me faltaba hasta después. Perdí lo que reuní en 20 años de trabajo", recordó Pezo, quien agradeció la cooperación entregada por los responsables de Agroceler, ya que con las mangueras y equipamiento cedido podrá retomar el cultivo de frutillas.

A Verónica Riquelme, del sector Huedilhue de Santa Juana, no se le quemaron las plantas de frutilla que produce, pero todo el equipamiento para llevarles agua fue destruido por las llamas, lo que causó que la fruta se secara y se perdiera.

Gracias al proyecto que lleva adelante Unab y el Gobierno Regional del Biobío, ahora ya tiene habilitadas la manguera y estanque de agua necesarios para su huerto. Dentro de la labor efectuada por Agroceler, Riquelme destacó las capacitaciones, "a mí siempre me ha interesado capacitarme para poder cultivar mejor mi huerto, porque tengo de todo, y para ofrecer un buen producto final al consumidor tengo que saber. Agroceler ha hecho capacitaciones muy interesantes para nosotros", observó Verónica Riquelme, quien en la actualidad está en proceso de agrandar su huerto.

Laboratorio

Alejandro San Martín, encargado del proyecto, reiteró que uno de los objetivos centrales de la iniciativa es darle valor agregado a los productos de los participantes. En ese contexto, en la actualidad se está habilitando un laboratorio de proceso para la fruta, con el cual se podrán elaborar bebidas en base a los berries y cherries.

"La idea es tener mayor valor agregado, este laboratorio se está adquiriendo y se va a contratar una persona especialista en la línea nutricional. Hay que aclarar que se trata de una primera etapa, en escala piloto, para demostrar que es factible y rentable producir esto. Vamos a trabajar con algunos de los beneficiarios y de ser posible, se pasará a una fase de escalamiento", explicó el profesional.

Esto fue un trabajo hecho a la medida de cada uno de los beneficiados, se consideraron sus necesidades, algunos requerían el sistema completo, desde la bomba hasta la línea de riego. Otros necesitaban un estanque o la cañería".

Alejandro San Martín, encargado del proyecto Agroceler

"Agroceler: Fruticultura 4.0 para la Región del Biobío", tiene como finalidad promover el desarrollo de la producción de berries y cherries en pequeños y medianos productores en siete comunas de nuestra zona, impulsando mejoras en sus procesos, en su trazabilidad y aumentando sus oportunidades de negocio.

Productores del siglo XXI

La primera fase del proyecto, denominada "Aceleradora para la valorización de la industria agroalimentaria en un mercado global", también fue ejecutada gracias a un FIC del Gobierno Regional del Biobío en 2021, a través de la cual se levantó una línea de base de productores de berries y cherries de nuestra región.

En esa etapa se concretó transferencia tecnológica a los beneficiarios directos e indirectos, por medio de seminarios, workshop y una gira tecnológica, entre otros adelantos. También se implementó un laboratorio de Robótica en la Universidad Andrés Bello.

El programa abarca siete comunas de la Región: Santa Juana, Hualqui y Florida, en la Provincia de Concepción, y Nacimiento, Los Ángeles, Negrete y Laja, en la Provincia de Biobío, siendo en total 200 productores de berries los que participan.