Mineduc cifra en 29 los establecimientos con daños tras el último sistema frontal
Desde la Seremi de Educación informaron que el calendario escolar no sufrirá mayores modificaciones, debiendo realizar las clases suspendidas en septiembre o diciembre, y que los siete recintos que han funcionado como albergue con familias no deberán recuperar clases.
En un proceso de catastro y revisión de caso a caso se encuentra el Ministerio de Educación respecto a las escuelas y colegios que resultaron afectados producto del sistema frontal que afectó a la zona centro sur la última semana.
Pese a ello, en el caso de la Región del Biobío -y según datos entregados a este medio- son al menos 29 los establecimientos que resultaron con algún tipo de daño producto de las fuertes lluvias, a los que se suman 15 recintos dependientes del Servicio Local de Educación Andalién Sur con daños de diversa consideración.
Mientras los catastros se depuran, y se evalúa cada caso, desde la cartera confirmaron que la totalidad de los recintos deberán recuperar las clases suspendidas durante la semana en septiembre o diciembre, y que los únicos recintos educativos que quedan exentos de realizar actividades en aula postergadas son aquellos siete que funcionan hasta ahora como albergues para las personas damnificadas.
Revisión caso a caso
El seremi (s) Matías Aravena explicó que durante esta semana la labor se ha focalizado en revisar caso a caso la situación que los sostenedores han reportado en materia de afectación y daños, con dos catastros al día para ir dimensionando el volumen de daño.
"Estuvimos monitoreando hasta cinco veces al día en toda la Región, reportando las situaciones de suspensión de clases y daños en infraestructura. Tenemos un registro de las escuelas que suspendieron clases los últimos tres días hasta el miércoles, y los casos que no considerarán recuperación como son aquellas que funcionan como albergues y recibieron personas en Hualqui, Cabrero, Tucapel, Concepción, Antuco o Los Ángeles", planteó Aravena.
Además, hizo la distinción que los equipos técnicos realizan un análisis ante cada caso, con el fin de establecer el nivel de afectación en cada recinto: "Hay establecimientos que tienen problemas de infraestructura que arrastran por varios años, y que tienen líneas de financiamiento con proyectos postulados como ocurre con los Fondos de Conversación; hay otros casos donde producto de las lluvias sufrieron daños, voladuras de techumbres, desprendimiento de cubiertas u otras, donde nos comprometimos a revisar sus casos y la pertinencia para generar el financiamiento necesario para recomponer la infraestructura educativa".
Algunos de los recintos monitoreados hasta ahora corresponden a la escuela Konrad Adenauer de Lota y escuela Luis Martínez González de Tucapel, entre otros.
Recuperación de clases
Respecto a la recuperación de clases, explica que "hubo comunas que suspendieron sus clases con recuperación a fin de año, en comunas como Quilaco, Quilleco, Alto Biobío, Tomé, Tucapel, Arauco, con alta afectación en sus escuelas y liceos, o en el caso de Alto Biobío, el corte de caminos y otras inclemencias que impidieron llegar a los establecimientos".
"Los únicos establecimientos que suspendieron clases sin necesidad de recuperar son aquellos que recibieron personas en albergues, los demás deben recuperarlas; este es un proceso frecuente en los establecimientos, los directores lo saben y cada escuela y municipio deberán revisar la situación; algunos recurrirán a hacerlo en diciembre u otros en los espacios que tengan en el semestre", añadió.
Una de las situaciones más complejas que se vivió en materia educativa tuvo relación con los estudiantes y docentes de la Escuela Trapa Trapa Butalelbún en Alto Biobío, que debieron ser rescatados vía helicóptero este martes.
"Han resultado bien los operativos, sabíamos la angustia de los profesores y la comunidad. Alto Biobío es una de las comunas más afectadas de la provincia con el mayor número de personas aisladas, por lo que hemos actuado rápido para llegar a todos ellos", expuso tras el operativo la delegada provincial Paulina Purrán.