La "ciudad de los 15 minutos" es un concepto que viene desarrollando la alcaldesa de París, Anne Hidalgo, para esta ciudad en conjunto con su asesor urbano, Carlos Moreno. Consiste en una ciudad que establece múltiples subcentros que abastecen las principales necesidades cotidianas de los habitantes, en este caso, a no más de 15 minutos.

La aproximación por parte de Hidalgo a este concepto surge fundamentalmente por la búsqueda de un desarrollo sostenible de la ciudad, entre otras cosas por el cambio climático. Este plan de desarrollo se basa en reactivar potenciales subcentros urbanos, avanzar en movilidad sostenible, peatonalizar calles vehiculares, incentivar el uso de bicicletas, potenciar el uso del espacio público y la vegetación, entre otras cosas.

Ciertamente, la realidad de París y de las ciudades europeas en general se distancia de la realidad de las ciudades latinoamericanas. Sin embargo, es interesante reflexionar sobre los conceptos propuestos y desde ahí definir nuestras propias medidas, componentes y tiempos de evolución.

No es lo mismo París -que se ha estructurado y desarrollado con condiciones que permiten avanzar de una manera más directa hacia "los 15 minutos"- que ciudades que han sectorizado de manera mucho más clara los centros económicos de las zonas habitacionales, o con mayor segregación socioeconómica y socioespacial.

Sin embargo, nuestra ciudad, Concepción, tiene otra "ciudad de los 15 minutos" interesante de valorar.

Desde su geografía, sus cerros, su relación con el agua, la ciudad de Concepción tiene condiciones muy particulares vinculado a lo natural.

Si bien la geografía por sus cerros y ríos muchas veces segregan las comunas, también generan una medida de contacto con la naturaleza interesante, y que, al hacerla explícita, nos permite protegerla y potenciarla desde el desarrollo urbano de la ciudad.

Seguramente, desde distintos puntos del Gran Concepción, no estamos a más de 15 minutos de la naturaleza. Un humedal, una laguna, un parque, un cerro, un río, el mar, se relacionan con distintos lugares y de distinta manera con el desarrollo urbano; pasan a ser componentes identitarios de la ciudad de fácil y rápido acceso.

Quizás, al ser una realidad tan cotidiana, no dimensionamos el "lujo" que este hecho representa en nuestro habitar. Según la OMS, el estar en contacto con espacios naturales al interior de las ciudades influye directamente en tener una mejor salud desde el ámbito físico y psicológico.

A diferencia de París, u otras ciudades, en donde se plantean estrategias de reconversión en miras de tener acceso a equipamientos, Concepción tiene "equipamientos" naturales a no más de 15 minutos, que no requiere cambios estructurales, sino, reconocerlos y potenciarlos como espacios públicos, naturales, que aportan a una ciudad más equitativa desde el ámbito físico y psicológico.

Los 15 minutos, más que una medida de tiempo específica, representa un concepto asociado a una ciudad caminable y más justa. Para algunos serán ocho minutos, para otros 20. Sin embargo, el reconocer dentro de nuestra estructura urbana estos componentes naturales como elementos fundamentales debiese ser ineludible en los distintos instrumentos de planificación.

Concepción, a 15 minutos y cotidianamente, cuenta con lo que muchas ciudades tienen a no menos de 90 minutos. He ahí uno de nuestros mayores potenciales para seguir avanzando.