Cuarto encuentro de orquestas juveniles reúne pasión musical
Ensayos y clases magistrales se van a realizar hasta hoy, en lo que será la segunda jornada de un encuentro que se hace presencial, luego de dos años de pandemia, lejanía y esfuerzo para la ejecución de sus instrumentos.
Con mucha alegría y entusiasmo vivió ayer el inicio del IV Encuentro de Orquestas Juveniles e Infantiles, tras la llegada de los más de 300 integrantes de distintas agrupaciones musicales de la región. Primer destino, las instalaciones del Colegio Concepción ubicado en Pedro de Valdivia.
Las salas del recinto educacional se convirtieron en su lugar de ensayo, lo que se replicará hoy, previo al concierto final del evento programado para mañana.
Los jóvenes -entre 8 y 22 años- continuarán durante esta jornada con las prácticas -mañana y tarde-, contando con encuentros y clases guiadas por los 22 profesores y cuatro directores participantes este año.
La última versión de esta iniciativa se remonta a 2019, y su regreso presencial permitirá a músicos de las 18 comunas de la región retomar el trabajo realizado en esta materia y que se vio perjudicado por la emergencia sanitaria durante los últimos dos años.
"Es muy histórico este encuentro, porque tenemos a los niños que han sobrevivido con rigor y disciplina (a los dos últimos años pandémicos). La característica que es transversal a todos los niños es la voluntad que tienen. Las dificultades técnicas son insalvables, porque yo no puedo tomar su mano para acomodarla o hacer esas cosas que tan cotidianamente uno hace como profesor. Entonces, es entrar a su cabeza para que entienda qué es lo que esta haciendo mal y pueda corregirlo solo. Es muy complejo y estos niños lo han hecho, porque han progresado", apunta Carmen María Burmeister, profesora e intérprete de viola.
La también integrante de la Orquesta Sinfónica aclara que en esta versión hay niños que "iniciaron sus estudios de violín en pandemia" y compartirán por primera vez con otros jóvenes músicos.
"Muchas de las orquestas -que son municipales- están aquí porque han podido mantener el proyecto vivo, ya que muchas han perdido estudiantes o han cerrado. Son elementos que hacen este encuentro más especial de lo que ya es", apuntó.
Encuentro con pares
Burmeister comentó que ella tiene una trayectoria de años, sin embargo, se sorprendió de encontrarse con una colega de la misma edad. "Fuimos juntas a encuentros infantiles. Entonces, imagina lo importante que es hacer estos lazos ahora para que, en 40 años más, puedas decir 'te acuerdas cuando compartimos en este encuentro'. Aquí se generan vínculos, lazos y se crea sociedad.
- A través de la música...
- Son niños que van a ser un aporte al país: ciudadanos conscientes y sensibles. Una orquesta es una alineación donde todos importan. Ese concepto, que se genera e impulsa acá, ellos lo llevan al día a día.
- Ahora en forma presencial, luego de dos años remotos.
- Es importante resaltar la formación online, porque fueron dos años de pandemia en que dejamos de hacer estos encuentros. Entonces, lo que tenemos hoy aquí son más de 300 niños que han sobrevivido a través de las clases online con dificultades, porque este aprendizaje siempre se hace profesor-alumno presente. Es un desafío para el profesor, la familia y para el alumno. Hoy tenemos un encuentro con un número muy saludable de alumnos con buen nivel, que han trabajado y sobrevivido, también. Es una generación heroica, creo yo, porque no es fácil.
Parte de los logros podrán apreciarse mañana en el Teatro Biobío. La Sala Prinipal será la encargada de dar cierre al encuentro, luego de dos días de ensayos presenciales (los telemáticos se extendieron durante los últimos meses).
El concierto iniciará a las 19 horas, con un repertorio ejecutado por dos orquestas divididas por nivel: básico e intermedio-avanzado.
"Nerviosa!!!", exclama su sentir Amanda Cerda (9), quien desde este año toca el violín en la Orquesta Clásica de Cabrero.
"Me dolía el estómago y todo. Ahora me sigue doliendo (...) Me motiva que el otro año ya voy a estar un año tocando", indica lúdicamente la alumna de la Escuela Enrique Zañartu Prieto de la comuna cabrerina, quien desde pequeña sintió atracción por varios instrumentos. "Pero el que más me gustaba era el violín", dijo, esperanzada de ser parte de próximos encuentros.