Instalaciones de vidrios polarizados han bajado a la mitad tras nueva ley
En caso de superar el rango permitido, las plantas de revisión técnica rechazarán la documentación del vehículo. Seremi señaló que sólo se fiscalizará a los automóviles.
Desde el pasado 11 de agosto comenzó a regir oficialmente la nueva norma para vidrios polarizados en los vehículos, una indicación que busca asegurar el correcto traslado de los conductores y también agilizar la fiscalización de carabineros en procedimientos.
Esta normativa consiste en que los vehículos polarizados deberán cumplir con los rangos del Factor de Transmisión Regular de la Luz (FTRL) que indica un 70% de transparencia en los vidrios laterales delanteros y 28% en los vidrios laterales traseros y luneta, en ambos casos con un margen de 5%.
Sin embargo, la puesta en marcha de esta nueva normativa ha significado un gran problema tanto para los talleres que ofrecían la instalación de este servicio como para los usuarios, ya que muchos han decidido dejar de utilizarlos por las restricciones.
Rubro afectado
Oscar Parra, dueño de Polarizados y Blindados Concepción, contó que los clientes han disminuido casi en un 50% desde que fue anunciada la normativa, ya que muchos preferían las tonalidades oscuras para evitar el sol.
"Antes nosotros realizábamos entre 10 a 12 polarizados diarios, pero ahora con la norma nuestros clientes han bajado y hacemos entre 4 a 5 trabajos por día y trabajando de lunes a sábado", compartió Parra.
Esto conllevó a una subida en el costo del servicio de 55 mil en 2021 a 70 mil pesos este años por la instalación de las cuatro ventanas y luneta trasera.
"Este aumento corresponde a que con el certificado el cliente puede tener seguridad de que no será multado por carabineros y que también pasará la revisión técnica", detalló.
"Además, realizamos la certificación con un papel americano que mínimo le asegura una durabilidad de siete años o más si luego lo plastifican", agregó.
El documento que se entrega registra los datos del instalador, los datos del propietario del vehículo, los datos del vehículo mismo y finalmente todo lo referente al polarizado y sus características.
Parra contó que de igual forma han llegado clientes a su local pidiéndoles la instalación de polarizados fuera de normas y exigiendo el certificado, pero se han negado ya que se arriesgan a ser multados.
"Por lo general la gente lo que hace es ponerle a todo el vehículo el tono 28% y después, cuando les toca la revisión técnica, prefieren sacarlo en vez de colocarle el tono casi transparente del piloto y copiloto que es de un 70%", comentó.
Fiscalizaciones
La seremi de Transporte y Telecomunicaciones del Biobío, Claudia García, informó que las fiscalizaciones serán realizadas tanto por las Plantas de Revisión Técnica (PRT) como por los mismos fiscalizadores que se encargarán de evaluar la presencia de los certificados que van impresos en las láminas de los polarizados.
"Es muy importante que los usuarios, cuando vayan a realizar la instalación de este servicio, estén muy atentos a que se cumplan las normativas, ya que en caso contrario tendrán sus revisiones técnicas rechazadas", indicó la autoridad.
Respecto a la fiscalización de los propios instaladores, la seremi aclaró que "nuestros fiscalizadores revisarán los vehículos. No fiscalizarán las instalaciones a los privados que ofrecen estas láminas, es por esto que es súper importante que las personas se certifiquen y que el proveedor cuente con las láminas adecuadas".
García también destacó que están prohibidas las láminas reflectantes, metálicas o espejadas; las láminas color ámbar, amarillo, rojo o azul, en cualquiera de sus matices; las láminas sobre vidrios oscurecidos o tinteados en vidrios que de fábrica están permitidos, las láminas con imperfecciones, las láminas adheridas en la superficie externa de los vidrios o no instaladas en un sólo paño.
En el caso de los vehículos que ya vienen con sus vidrios tinteados de fábrica no debiese ocurrir nada, ya que pasan por un proceso previo de homologación donde la marca cumple con ciertos estándares de calidad antes de poder comercializar el auto en Chile.