Guitarrista de la banda FrioLento presenta su primer EP en solitario
Respondiendo a una línea que traza lo conceptual y personal, el músico construye un relato de sensaciones y texturas sonoras en seis canciones.
Una introspección compartida, un sincretismo musical artístico y un espacio para abstraerse, pero no para quedarse. Así define Esteban Nualart su primer EP "Canciones para no estar".
Liberado recién el 8 de julio, este álbum es el resultado de un largo tiempo de reflexión -más de dos años- del alter ego de Nualart, "DPSE" (Debería Poder ser Escrito), proyecto en solitario fundado en 2019 por el también guitarrista de FrioLento.
En seis canciones, el artista, también conocido como "Dido", revela una especie de catarsis ocurrida entre 2017 y 2018. "En esa época estuve sumergido en muchos pensamientos intrusivos (de desgano)", declara el músico sobre la situación que lo llevó a escribir y compilar temas que comenzaron a materializarse en 2019.
"Aquel año retomé lo que había producido en el tiempo de tanta oscuridad, pero en el cual ya no me encontraba. Fue como volver a reversionarme", indica el estudiante de segundo año de Antropología (UdeC). A esta disciplina le confiere la inclinación por transformar sus ideas en algo concreto, pese a que "también puede resultar bien abstracta mi propuesta", según advierte.
- Algo un poco contradictorio, ¿no crees?
- Inevitablemente, el artista hace su música para él. A mí me pasó, me apoyé en mis escritos como un acto de concientizarme sobre mi realidad, de darme tiempo y cariño, y hacer algo por y para mí. Sin embargo, pese a estar en un plano bien filosófico, quería bajar esos pensamientos y transformarlos en un mensaje que le sirviera a la gente. Finalmente, nosotros somos el canal para que el público deposite sus emociones.
- ¿Cuál es tu mensaje?
- Mi disco es como un ensayo, no hay una verdad absoluta. Me gusta ver la música como una expresión que reúne muchas cosas. En mi caso, me siento como un satélite de un mundo hiperglobalizado que nos conecta a todos. "Canciones para no estar" no pretende ser nada más que un espacio para reunirse y crear identidad. La idea es que mi música se utilice de manera simple que, desde la ternura, apele a esos lugares abstractos de la mente (...) Que nos lleve a la raíz y que nos reinicie, como un tipo de compañía en un mundo que cambia a diario.
Con letras que hablan de soledad, resistencia y esperanza, con tintes de pop ambiental, sonidos acústicos y un poco de jazz y soul, se compone este viaje al mundo de su autor, quien afirma que las piezas fueron compuestas para ser escuchadas de corrido y en orden.
"Llegó un momento en el que vi que tenía tantos relatos sobre mi pasado, que dije ya, tengo un disco. Tenía una idea tan clara, que no quería discutirla con nadie", explica.
Trabajo colaborativo
Si bien, desde su génesis, el material fue grabado en solitario, el cantante destaca y agradece el trabajo de Daniel Lagos, "Niñopolar". Este nombre emergente de Concepción, participó en las mezclas, junto con Williams Martínez de Estudio Cerro, también a cargo de la masterización.
Asimismo, la cineasta, Kaira Amara, se unió aportando en el diseño de la portada del disco, sesiones de fotos y en la grabación del videoclip "Dentro, fuera", a estrenarse dentro de tres semanas.
- Hay mucho misterio en la tapa.
- Las cinco fotos que están presentes fueron parte de las actividades que realicé en ese momento de abstracción. Vemos dos colores, el amarillo y morado, tonalidades opuestas y complementarias, dentro de rectángulos intercomunicados en un ambiente gris. Es un reflejo de cómo percibo la vida, que la tensión y el relajo siempre se comunican, y que las cosas fluyen.
- ¿A qué apela el nombre "Debería poder ser escrito"?
- Es una frase que se me ocurrió mirando la Desembocadura. Quería escribir sobre lo que veía, pero no podía. Ocurrió esto de lo inefable. Rechazo la idea de no poder definir algo, prefiero abrir la posibilidad e intentar entender.
Todo este tránsito lo llevó el año pasado a sumarse banda local, FrioLento, experiencia que percibe como enriquecedora.
"Conocer el profesionalismo con el que trabajan me ha hecho aprender y actualizarme. Ellos tienen muy claro que la música tiene que ser para quien la escuche, y a eso quiero apuntar", dijo.