"Manifiesto femichista": una obra teatral que no pierde su vigencia
El 25 de enero está anunciada la función de un título arriesgado y que, desde la comedia negra, propone una mirada sobre la mujer.
Un elenco y una propuesta que desde su partida tomó riesgos con el fin de exponer lo femenino y la violencia contra la mujer, en días que corren agitados, y donde "Manifiesto femichista", pareciera adquirir más vigencia que nunca. Esto, considerando lo lamentable de la situación, en este caso, descrita en este montaje desarrollado por las cuatro integrantes de la compañía La Diagonal Penquista (LDP).
Nacida en marzo de 2017, las fundadoras cuentan que sintieron la necesidad de reunirse por "la colisión existente". Es decir, frente a la ausencia de un teatro más rupturista, siempre bajo el alero de "la acción de denuncia y educación lúdica", como definen sus integrantes, Karen Aguilera, Viviana Flores, Javiera Parra y Romina Vidal.
"Nos reunimos y dijimos encontremos un nombre simple sin darle mayor complejidad a la búsqueda y, sobretodo, que tenga relación con la ciudad y reconocible", explica la actriz Viviana Flores, productora, sobre el nombre La Diagonal Penquista.
En concreto, acota Vidal, el fundamento de LDP fue crear un colectivo de mujeres. "Así nuestra directora -Javiera Parra- nos reunió para formar una compañía de solo mujeres, para demostrar diversas realidades que afectan hasta hoy a nuestro género", señala
- Cuentan que se reunieron por la colisión, ¿a qué se refiere desde el punto de vista de ustedes?
- (V. Flores) Eso hace referencia a una necesidad de trabajar otras temáticas más relacionadas con la revolución femenina, que ya estaba existiendo (fines del 2016) y que se relacionaba con la idea de trabajar algo rupturista, con mezcla de géneros, propuestas muy personales desde lo sensorial y desde las vivencias propias.
APUESTA CLARA
Desde este marco de referencia, a partir "de un texto creado por y para la compañía", nace "Manifiesto femichista", estrenada en julio de 2017, a la fecha con más de 30 funciones en el país. El próximo pase, luego de casi dos años de encierro, está agendado para el 25 de enero, en Teatro Bandera Negra.
Sostenido en la comedia de tintes negros, el argumento podría ser parte de un tiempo distópicas. En pabellón quirúrgico del pueblo de Sexo, cuatro médicos -Cabecilla, Doctor Candidiasis, Doctor Pólipo y Flujo- tienen la última reunión, para despertar a la XX perfecta.
"No sin antes pasar por conflictos, bromas y sueños, que nos dimensionan en un pabellón poco común, con unos personajes bastantes particulares", señalan, sobre la pieza de 50 minutos, que suma a María José Peña, iluminación.
Argumentan que, más allá de la denuncia, quieren transmitir sensaciones desde lo corporal y el contenido de la temática femenina. "También en la forma, trabajando la no existencia de un género concreto en el personaje, por ejemplo (asexuado)", dice Flores, allí donde aparece la ironía, ya desde la caracterización.
"También en el montaje, la no realidad, lo atemporal y, por supuesto, esta sensación de que en cualquier momento nos caemos al precipicio: eso es fantástico, nunca estar en escena, en nuestra zona de confort", indica la actriz.
- Hay alguna intención de denuncia en esto?
- Más que eso, buscamos transmitir nuestras sensaciones respecto al simple hecho de ser mujeres, nuestros miedos, las situaciones a las cuales nos enfrentamos día a día. Esto, desde una propuesta más irreverente e irónica. También desde la sinceridad, esto sucede, pasa, sentimos esto, no lo queremos (…) Trabajando el simbolismo y proponiendo esta denuncia con un trabajo estético.
- Lo que está muy en sintonía con este Chile presente, en 2022.
- (R. Vidal y V. Flores) Totalmente, cuando comenzamos la obra nuestra intención era mostrar la igualdad entre las personas, que se debe parar la teoría de que la mujer debe cocinar, hacer aseo o todo lo que conlleva roles domésticos. Después comenzaron las manifestaciones feministas (2018) y nos dimos cuenta que "Manifiesto..." calzaba con la realidad de muchas mujeres que son abusadas y que hasta la fecha siguen, la cantidad de femicidios no baja, algo muy preocupante. Está en sintonía, no pierde valor y queremos seguir mostrándola al mayor público posible. En nuestra última función presencial, hace unas semanas en Penco, nos dimos cuenta que el tema de la cosificación de la mujer está muy presente todavía, lo que es triste y decepcionante. Nos falta mucho.