Algunos consejos para renunciar al trabajo sin provocar conflictos
A sí como es de sentido común la necesidad de dar una buena impresión durante una entrevista de trabajo, igualmente es una buena idea dejar en alto la posición actual cuando se renuncia. A menudo no se trata solamente de lo que se dice en esa frase, también importa todo lo que se haga.
Las emociones que se experimenta durante el proceso de renuncia pueden variar - desde el alivio hasta temer sentirse arrepentido - sin embargo, existen procedimientos estándares a seguir cuando se decide cómo renunciar a un trabajo.
Cuando se trata de llevar un mensaje, no permita que nadie se interponga entre usted y su jefe. Debe tener el control sobre cómo se presentará la noticia de su decisión. Hacer que la información llegue de otra manera - a través del departamento de rumores o políticas de oficina, por ejemplo - es poco profesional y ofensivo.
El primer punto importante a saber acerca de cómo renunciar al trabajo es plantear la renuncia en persona, de ser posible. Si no es una opción reunirse en persona, se debe coordinar una llamada a través alguna plataforma de video conferencia, o llamar al jefe directamente a su teléfono. Enviar un e-mail es la última opción, pero puede ser utilizada en caso de que las circunstancias lo requieran.
Asegúrese de saber lo que va a decir en relación a su renuncia antes de acercarte a su jefe. Aún si está yéndose en buenos términos, es probable que la conversación sea extraña y difícil. No querrá trabarse en las palabras.
Al mismo tiempo quiere ser firme en su decisión y debe estar preparado para cualquier pregunta y objeción que pueda traer el jefe a la conversación. ¿Cómo va a responder a una contraoferta? ¿Qué tal si su jefe pide que reconsidere su decisión y que retomen la conversación en unos días? ¿Qué tal si se torna emocional? (Podría suceder, especialmente si es un miembro del equipo o tiene una relación muy cercana con él.)
Mantenga la reunión con su jefe en un ambiente profesional y, sobre todo, no caiga en la necesidad de ventilar sobre su trabajo. Si le parece divertido imaginar una salida dramática, ponerse creativo cuando decide renunciar a su trabajo no es recomendable.
Aún después de haber hablado con su jefe sobre la renuncia, no es una mala idea enviarle la información por escrito también. Una carta de renuncia asegura que no habrá confusiones en relación a la fecha que dio a conocer la noticia y el tiempo de su salida. Muchas compañías incluyen una copia de la carta de renuncia en la carpeta de Recursos Humanos como documento final.
La carta de renuncia debería ser breve e incluir la fecha del último día de trabajo - El tiempo estándar de aviso no es menor a dos semanas. Si está en un puesto senior o en circunstancias especiales - tales como una fecha próxima a un proyecto grande - debería quedarse un poco más. Sin embargo, algunas organizaciones, como las que manejan información delicada, acompañarán al empleado hasta la puerta desde el momento en que plantearon la renuncia, en lugar de permitirles que continúen trabajando.
Una breve explicación sobre el por qué está renunciando - No diga únicamente "renuncio" cuando esté explicando por qué lo hace. Está bien mantener las cosas en general y decir algo como "debo irme porque estoy aceptando un empleo en otra compañía". No tiene que profundizar en más detalles de lo necesario, incluso si su jefe le presiona para que le dé más información.