Centro de Sangre aumenta las donaciones pese a la pandemia
El trabajo que iniciaron hace cuatro años para fidelizar aportes permanentes les ha permitido contar con stock para siete días. A la fecha llevan más de 12 mil donaciones, cifra superior a la del año pasado.
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Daniela Ceballos (27) es una de las defensa del equipo femenino de la Universidad de Concepción. Pero antes de dedicarse al fútbol, se tituló de enfermera. A inicios de 2016 egresó de la Universidad Autónoma en Temuco.
Durante su formación aprendió sobre la importancia de contar con reservas de sangre para diversos procedimientos, como la atención de personas que tuvieron algún accidente, quemados, operaciones o quienes están en tratamiento de quimioterapia. Se convirtió, entonces, en donante altruista, como se define a quienes regularmente entregan parte de su sangre.
Partió en 2011 y desde este año, cuando llegó a Concepción justamente para jugar fútbol, se hizo amiga del Centro de Sangre de Concepción. Este año ya donó dos veces, en marzo y hace un par de semanas.
La Casa del Donante está en pleno barrio universitario de Concepción, en calle Enrique Molina. Es uno de los recintos que capta donaciones para atender los requerimientos de 40 recintos de salud, entre públicos y privados, desde el Maule hasta la provincia de Malleco en La Araucanía.
Gracias a Daniela y los miles de donantes altruistas de la zona el Centro pudo mantener su stock este año, durante la pandemia, en medio de restricciones de movilidades y cuando en otras regiones las reservas bajaron a niveles críticos.
Cristina Martínez, directora del Centro de Sangre, dice que la clave fue el trabajo con la fidelización de donantes, trabajo que iniciaron con fuerza hace unos cuatro años.
Con buen stock
La donación de sangre es tan esencial que uno de los 17 permisos que actualmente se pueden obtener en comisariavirtual.cl para salir durante la cuarentena es justamente, para concurrir a estos recintos.
Cristina Martínez, directora del Centro de Sangre, menciona que el momento más crítico fue en marzo, cuando se decretó estado de excepción constitucional y partieron las restricciones.
En la Macrored Sur (de Curicó a Temuco), zona que centraliza el procesamiento de la sangre en Concepción, la donación ha disminuido en un 40%, explica, lográndose diariamente el 60% de lo que se obtenía en períodos normales.
"Como nosotros tenemos un convenio con el Establecimiento Francés de Sangre, nuestros colegas nos transmitieron el impacto de la pandemia y cómo trabajar, así que nos preparamos para afrontar la situación y que no disminuyeran los donantes", detalla.
Una de las medidas que adoptaron fue que cuatro funcionarios (de los 68 que trabajan en el centro) se transformaran en una especie de callcenter. Ellos estaban a cargo de llamar a las personas que ya estaban inscritas e invitarlas a donar, asignar horas y confirmarlas.
Aquí surtió efecto la estrategia que iniciaron hace cuatro años para fidelizar donantes altruistas. Esto les ha permitido mantener stock para siete días del grupo O+ (el más común). Aunque el idea es contar con sobre 11 días, la cantidad es aceptable, considerando que hubo lugares en el país que tuvieron caídas drásticas, expone.
"Este año, incluso con pandemia, hemos tenido más de 12 mil donaciones, que son más de las que tuvimos el año pasado, que fueron 9 mil 458 donaciones. Tenemos procedimientos estrictos, así que no hemos tenido ningún contagio", celebra la directora del Centro de Sangre.
Martínez cuenta que a la fecha tienen más de 20 mil personas inscritas en sus registros, aunque la cifra de quienes aportan sangre regularmente es menor, reconoce. El 80% de las donaciones proviene de los altruistas.
Protocolos
Diego Padilla es uno de los donantes más emblemáticos del Centro de Sangre. Partió en 2006, cuando estudiaba Sociología en la Universidad de Concepción, aunque en esa época donaba durante los operativos que se realizaban en la casa de estudios y en la Cruz Roja. En 2006, cuando ya había egresado, descubrió la Casa del Donante. Desde entonces a la fecha va tres o cuatro veces al año. Ya lleva 94 donaciones.
"En pandemia la situación fue algo compleja. Tenía fecha para marzo, pero tuve que trasladarla para abril porque con las cuarentenas no se podía salir, pero logré sacar el permiso y fui", explica.
Diego menciona que desde el primer momento se adoptaron protocolos para prevenir los contagios: "Nos toman la temperatura, se cuida la distancia física, hay que llenar una encuesta, después está la entrevista que sigue con el médico o la enfermera y luego la donación".
En septiembre volvió. Como vive en Hualpén, se trasladó en bicicleta, para evitar el transporte público. Las medidas de protección se habían robustecido, indica, pues se incorporaron micas de separación.
Cristina Martínez señala que otra medida que implementaron fue prohibir el uso del celular durante el procedimiento, ya que el aparato puede transportar el virus.
Desde marzo, además, es obligatorio agendar hora. Esto les permite recibir diariamente a unos 80 donantes. A ellos se suman quienes acuden al espacio habilitado en el Hospital Regional. Ocasionalmente han abierto también las dependencias que tienen en el centro, en Barros Arana con Orompello. La idea es poder ampliar esos horarios, reconoce la directora del Centro.
Procedimientos
Quienes van a donar sangre tienen que considerar una hora de su tiempo, aunque la extracción de sangre en sí no toma más de 10 minutos. El resto del tiempo incluye el llenado del cuestionario, la entrevista, la sanitización y los tiempos de reposo necesarios después de haber extraído medio litro de sangre.
Hay un procedimiento que dura un poco más, dice Martínez, y que es el de aféresis de plaquetas. Esto puede tomar dos horas. Como este producto tiene una duración de siete días, la cantidad de donantes es menor.
En cuanto a la sangre, refrigerada puede durar 45 días. La directora del Centro de Sangre detalla que para optimizar las reservas de la bodega monitorean los niveles de los grupos más escasos. Cuando detectan que hay poco plasma, llaman a los donantes para que acudan al recinto.
Diego Padilla es uno de esos casos. Su grupo de sangre es B-. Por eso se preocupa de ir al menos tres veces al año al centro. "Siempre trato de donar en fechas determinadas, en septiembre o fin de año, fines de semana largo que siempre se necesita sangre".
Para la futbolista Daniela Ceballos, donar sangre es muy relevante: "Antes existía desconocimiento sobre el procedimiento, pero esto es para ayudar a la gente que lo necesite y no tiene mucho perjuicio para quien es donante".
Centro de sangre y donantes
El Centro de Sangre de Concepción es el primer establecimiento especializado en Medicina Transfusional creado en Chile, como parte de un proyecto Fondef para la modernización de los bancos de sangre del país. Inició su funcionamiento el año 2000.
Actualmente cuenta con 68 funcionarios que ejecutan labores de promoción, marketing, atención de donantes, procesamiento, calificación biológica, almacenamiento y distribución de componentes sanguíneos (glóbulos rojos, plasma, plaquetas y crioprecipitados).
Cristina Martínez, directora del Centro, cuenta que para ser donante hay que tener entre 18 y 60 años y pesar más de 50 kilos. Eso es lo básico. También debe haber sido declarada apta en la entrevista médica. Los hombres pueden donar hasta cuatro veces en el año y las mujeres, hasta tres. Su aporte será de 450 ml. de sangre, un 10% del total de la que circula en su organismo.
No pueden donar quienes tengan enfermedades que afecten su corazón, pulmones, algún tipo de cáncer u otras patologías complejas, si están en tratamiento dental o con medicamentos como antibióticos, insulina, o se han hecho un tatuaje en los últimos seis meses. Tampoco puede hacerlo personas con epilepsia, embarazadas, portadores de VIH o hepatitis.