Buscan instalar dos turbinas eólicas en la Isla Santa María
La idea es disminuir el uso de diésel y aprovechar los fuertes vientos del sector Puerto Norte. Se espera que la medida entre en régimen a partir del primer semestre de 2021, aunque aún hay nudos que impiden su avance.
"Yo vivo lejos de los generadores, pero el ruido del motor es como si estuviera fuera de mi casa. Incluso, hay vecinos que han puesto demandas por esto mismo", relata Marcela Riquelme, presidenta de la Junta de Vecinos Ancla del Sur de Isla Santa María, al ser consultada por el actual sistema que alimenta con electricidad al sector coronelino.
Según el seremi de Energía Mauricio Henríquez, la mayoría de las islas del país producen su electricidad por medio de hidrocarburos líquidos, lo que incrementa los niveles de contaminación y los costos. Actualmente, la isla ubicada frente al Golfo de Arauco y que supera los 2.200 habitantes cuenta con un servicio eléctrico de grupos diésel administrados por la empresa Frontel. Las cuentas mensuales son del orden de los $52.700, pese a que existe un subsidio estatal.
Para enfrentar dicho escenario, desde la Seremi abogan por ejecutar una idea originada en 2017 que busca aprovechar el viento de Puerto Norte e instalar dos turbinas eólicas de 100 kW cada una y un banco de batería tipo buffer de 100 kWh, a modo de que toda la comunidad solo dependa en un 40% del diésel y en un 60% de la energía renovable no convencional. Las razones, dice Henríquez, tienen que ver con el aumento de la demanda y el suministro que no es aprovechado.
LA INICIATIVA
En concreto, se trata de una iniciativa de la Municipalidad de Coronel que cuenta con el apoyo de la Subsecretaría de Energía y la coordinación de Frontel. El objetivo es aminorar el precio de los subsidios entregados por el Gobierno Regional y permitir el acceso a la energía a valores menores para actividades domiciliarias, comerciales y productivas.
Así, con la configuración indicada y la alta penetración eólica en Puerto Norte, se estima que el proyecto logre una reducción del 60% del costo de la energía y alcance un ahorro anual de $250 millones respecto a los dineros subsidiados.
"Este proyecto cuesta cerca de $1.749 millones, con IVA incluido, y el Ministerio ya puso a disposición de la Municipalidad más de $740 millones. Este es un plan bastante avanzado, pues se han hecho todos los desarrollos técnicos con la compañía que hoy trabaja ahí, y eso en un semestre debería estar absolutamente listo, pero depende de que Coronel quiera ejecutarlo con los recursos que ya se le han entregado", sostiene el seremi.
Agrega que la iniciativa tiene la admisibilidad de la Unidad de Pre-inversiones del Gobierno Regional, pero resta que se vaya al Ministerio de Desarrollo Social para la evaluación técnica-económica y así obtener la recomendación favorable (RS). Una vez listo lo anterior, tendrá que ser priorizada por el intendente, de tal manera que el Consejo Regional apruebe los fondos de ejecución.
Actualmente, se hacen gestiones para que el alcalde Boris Chamorro envíe un oficio al jefe regional y el plan avance a la fase de evaluación social, según explican desde la Seremi.
NUDOS
A juicio del alcalde, la puesta en marcha de estas dos turbinas beneficiará de manera importante a la localidad, sobre todo de acuerdo a tres áreas. La primera, enfatiza, dice relación a la cantidad de habitantes favorecidos, mientras que la segunda y la tercera al impacto medioambiental y a los efectos en las cuentas mensuales, respectivamente. "Esto posibilitará registrar mermas en el pago de la energía eléctrica que hoy tienen los isleños. Sería una disminución sumamente considerable", remarca.
Consultado por la responsabilidad atribuida al municipio, el jefe comunal explica que quien envía las iniciativas al Ministerio de Desarrollo Social es la Unidad de Proyectos del Gobierno Regional, "por lo tanto, depende del Gobierno Regional poder enviarlo para que obtengo su RS. Nuestro interés es que esto se ejecute".
Más allá de las discrepancias generadas entre el Gobierno y la Municipalidad de Coronel, los habitantes del sector ven con esperanza la oportunidad de cambiar su fuente energética. Así, al menos, da cuenta la dirigenta Marcela Riquelme.
"Para nosotros sería un avance bueno, porque siempre nos ha llamado la atención y hemos querido llegar a esto. Por un lado, si se realiza, el pago de la luz será mucho más económico. Yo, por ejemplo, cancelo $30 mil mensuales, y eso que tengo lo básico en mi casa, pero imaginemos los negocios. Y, por otro, nos ayudaría a descontaminar y terminar con los ruidos molestos", dice Riquelme.
En tanto, el gerente zonal Frontel Biobío-Ñuble, Fernando Caire, argumenta que el trabajo a efectuar en Isla Santa María mediante esta central híbrida se transformará "en un referente para los demás sistemas aislados que existen en el país y abrirá las puertas para que familias de otras localidades de estas características puedan tener acceso a la energía".