La "U" y Colo Colo acuerdan un empate que los deja con muchas dudas
En un clásico con más sombras que luces, los albos alargaron su invicto de siete años con los azules tras el 1-1.
Si alguien que no vio el partido se queda a rajatabla con las declaraciones del entrenador de Universidad de Chile, Hernán Caputto, y las de su colega en Colo Colo, Gualberto Jara, bien podría pensar que el de ayer fue uno de los Superclásicos más electrizantes de los últimos años. Nada más alejado de la realidad, porque en el empate 1-1 de albos y azules en el Estadio Nacional, pudo más el timorato esquema de sus técnicos, quienes muy pocas veces soltaron a sus pupilos para ir a un choque de ida y vuelta, en un partido que tenía a la "U" y al Cacique con la obligación de aportar algo más en cancha.
El cuadro universitario, que las oficiaba de local, con la obligación perentoria de acabar con una negativa racha de siete años sin vencer a su clásico rival en torneos oficiales -deberá esperar otro más para obrar el milagro- y el cuadro popular, con la necesidad de escaparle a los últimos puestos del campeonato -cosa que no sucedió, porque con sus 8 puntos aventaja por sólo tres a los colistas, Coquimbo, O'Higgins, La Serena y Universidad de Concepción-, para empezar a respirar tranquilos.
"Creo que dominamos todo el partido. Tenemos que ser certeros para definir. Nos falta algo para ganar los clásicos", fueron algunos de los argumentos de Caputto, que poco dicen con la realidad de los primeros minutos del encuentro, quizás el único momento en que Colo Colo se mostró mejor que los universitarios, y donde el 1-0 anotado por Esteban Paredes, a los 11 minutos, estaba más que justificado.
"Nos cuesta mantener un mismo nivel durante más tiempo y en la parte futbolística las distracciones nos cuestan un gol en contra. El tanto de la 'U' cambia el rumbo del partido. Nos costó volver a agarrar el trámite del partido. Tanto la 'U' como nosotros comenzamos a perder precisión y terminamos con el empate", fue por su parte la reflexión esbozada por Jara, quien no tuvo palabras para el bajo rendimiento mostrado por su sector defensivo, donde sus laterales -Opazo y Suazo- poco o nada aportaron en labores ofensivas y sus centrales dieron muchas ventajas en el juego aéreo. Precisamente, la fórmula que encontró la "U" para empatar el partido recién iniciado el segundo tiempo, cuando una serie de pivoteos cabeceados por los jugadores albos, terminaron a la salida del área grande en los pies de Gonzalo Espinoza, quien con un zurdazo sin mucho veneno derrotó la débil resistencia de Brayan Cortés.
"Los clásicos, hace tiempo que decimos que los queremos ganar, pero no se da. En el segundo tiempo fuimos superiores y ahí debimos concretar las ocasiones que tuvimos. Estoy contento por el gol (el segundo que anota de forma consecutiva en dos Superclásicos), pero me voy con un trago amargo por no conseguir el triunfo ante ellos hace tanto tiempo", fue la celebración a medias del volante azul, quien entró en la segunda parte para darle una mayor presencia a la "U" en el medioampo, perdido en los primeros 45 minutos ante la correcta marca de Fuentes y Carmona a los universitarios Montillo y Aránguiz.
"Fue un tiempo para cada uno, con chances para ambos. Consiguieron el gol y tomaron el control y el partido cayó en un pozo. Queríamos ganar, sin duda, pero en lo anímico también nos sirve no perder", fue el sentir de Julio Barroso, quizá el de todos quienes ayer jugaron un pálido Superclásico.