Rubro gastronómico pedirá a Salud funcionar en la Fase 2
Los representantes del sector ya tuvieron una reunión con los senadores Alejandro Navarro y Jacqueline van Rysselberghe. Esperan esta semana poder reunirse vía remota con el ministro Enrique Paris para hacerle saber los planteamientos de reactivación del rubro.
La Asociación de Empresas (Asem) Biobío reúne a cerca de 120 firmas dedicadas al rubro gastronómico en la intercomuna, tanto pequeñas, medianas y grandes. A raíz de la crisis, el 5% de estos establecimientos ya debió cerrar sus puertas definitivamente y el resto mantiene un complejo escenario que se sustenta a duras penas gracias a la venta de productos por medio de servicios delivery o el uso de ahorros. Otros, en tanto, tienen la suerte de contar con una entrada distinta de recursos, aunque eso muchas veces ni siquiera alcanza para cubrir los gastos diarios.
De continuar esta emergencia y las actuales prohibiciones, desde el sector ven una agudización mucho más profunda y que podría terminar con la mitad de los locales cerrados de manera definitiva durante los próximos meses. Por lo mismo, piden a las autoridades levantar urgentemente algunas restricciones y permitir que los restaurantes y todos los emprendimientos relacionados al área puedan funcionar en Fase 2 del plan "Paso a Paso", es decir, adelantar un ciclo y dar mayores libertades. Hoy estos recintos están habilitados para funcionar en Fase 3, pero solo aquellos que tienen terrazas abiertas o mesas emplazadas en veredas, y con una capacidad máxima del 25% o con al menos dos metros de distancia entre las mesas.
Humberto Miguel, presidente de la instancia que aglutina a parte del brazo gastronómico de la Región del Biobío, comenta que ya ha habido avances en esta materia, en el sentido de sensibilizar a actores clave, como el alcalde de San Pedro de la Paz y presidente de la Asociación de Municipalidades Biobío, Audito Retamal, y los senadores Alejandro Navarro (PRO) y Jacqueline van Rysselberghe (UDI).
"El viernes nos reunimos con los senadores y ellos entendieron esta situación y nos están ayudando a conseguir una reunión con el ministro de Salud (Enrique Paris) y el subsecretario (Arturo Zúñiga). Aquí la única solución es que al rubro se le cambie de fase y abrir igual a como lo hacen las demás áreas económicas, pero con todo el reglamento y protocolos necesarios. De lo contrario, esto muere", recalca Miguel.
La idea, sostiene el represente gremial, es agendar una cita vía remota esta semana, a modo de acelerar alguna solución, porque "esta área tiene menos riesgo que cualquier otra actividad y están acostumbrados a trabajar con normas de higiene y seguridad".
A la fecha, Concepción, Talcahuano, Hualpén, Chiguayante, Tomé y Penco -y Hualqui, a partir de mañana- se mantienen en Fase 1 y con cuarentenas totales. Lota, Coronel y San Pedro de la Paz están en Fase 3.
DIFÍCIL ESCENARIO
"Todo esto es una pesadilla". Así grafica Paola Pezzani la compleja situación por la que atraviesa el sector gastronómico local. Ella es dueña del restaurante penquista Al Modo Mío y de una empresa de banquetería. A raíz de lo sucedido en los últimos cinco meses sus ventas mermaron considerablemente, al punto de que ya no sabe qué sucederá con los 50 trabajadores que tiene bajo su tutela.
"Tengo una situación compleja en este momento, porque hay trabajadores con suspensión laboral. De ellos, hay solo ocho trabajando. Espero que haya un alargue de esta medida, o si no, no los podría recibir. No soy capaz de pagarle a la gente y no tengo capacidad", reconoce Pezzani.
Agrega, incluso, que la semana pasada estuvieron a punto de cortar la luz en su negocio, justo en el momento en buscaba nuevas opciones a través de servicios delivery de platos al vacío. "Afortunadamente, me pude conseguir la plata prestada con un amigo (…) Pero aquí no hay ninguna iniciativa gubernamental de apoyo a la gastronomía, y eso es dolorosísimo", remarca.
A diferencia de Concepción, San Pedro de la Paz se encuentra en una fase de preparación, lo que permite a los restaurantes abrir, pero con condiciones especiales. Pese a ello, el propietario del restobar Amador, Marcelo Ortiz, dice que lograr la apertura bajo estos parámetros es algo complicado, ya que no todos los recintos sampedrinos cuentan con la infraestructura adecuada.
"Esto no entibia mucho. Aquí no hay tanto local con terraza al aire libre. Si bien puede ser una buena noticia, en este contexto es difícil que alguien haga una terraza en una semana. Además, no hay plata y son muy pocos lo que cuentan con este espacio", puntualiza.
Bajo este prisma, el empresario acusa que él y sus demás colegas del mundo gastronómico se quedaron debajo de la reactivación económica impulsada por el Ejecutivo, "y sin ningún motivo aparente".
OTRAS AYUDAS
El presidente de Asem Biobío advierte que, junto con avanzar en incluir al área gastronómica en la Fase 2 del Plan Paso a Paso, es importante alcanzar una segunda línea de objetivos, asociada a un proyecto de resolución que considera tres aspectos: un crédito libre de trabas para el sector, un subsidio de arriendo y una extensión del pago de patentes.
"Ese fue un proyecto de resolución presentado de forma transversal por los diputados de la zona hace más de un mes. Esto fue aprobado y está en el Ejecutivo, y existe el compromiso de los senadores Van Rysselberghe y Navarro para que el Gobierno le dé curso", explica el líder gremial.