Espacios de pintura locales exploran nuevas opciones en medio de la crisis
El cierre obligado de espacios, a raíz del coronavirus, ha hecho que artistas enfocados en la expresión pictórica deban detener proyectos y buscar nuevas alternativas. Tres de las principales galerías del Gran Concepción cuentan los pro y los contra de esta emergencia sanitaria que, igualmente, les ha abierto una ventana a través de la venta remota.
La crisis por el covid-19 que vive Chile y el mundo, con los problemas sanitarios y económicos que trae consigo, han golpeado al rubro de la cultura y las artes, hace ya cinco meses.
Con el cierre de teatros, galerías, academias y espacios dedicados a estas expresiones, además de la imposición de medidas de confinamiento obligatorio o voluntario, han llevado a que el entorno artístico-cultural haya debido buscar otras opciones para seguir trabajando.
En la zona, el mundo de la pintura ha explorado -en mayor o menor medida- alternativas como la venta online. Sin embargo, reconocen que han sido tiempos complejos.
NUEVA REALIDAD
Con más de 35 años de vida, El Caballo Verde, es un símbolo del arte pictórico penquista.
Ubicada en la galería del edificio "Los Arrayanes", el espacio que reúne actualmente a más de 30 artistas permanece cerrado al público, debido al covid-19.
Para paliar la situación se ha mantenido atendiendo en línea a través de su página web, elcaballoverde.cl.
De acuerdo a la hija de la directora del espacio, Carmen Morales, la atención en línea ha sido lenta, pero ha ido creciendo. "Todas las galerías se han visto obligadas a vender en línea. Será la nueva forma de funcionar".
Respecto al futuro inmediato de la galería, Morales es cauta. "Hasta que no exista una vacuna segura, imagino que esta situación será más larga de lo deseado".
El Caballo Verde, igualmente, no descarta una especie de "apertura controlada", donde cada cliente pueda acudir al lugar, tomando todos los resguardos sanitarios y, además, con cita previa. "Si esto se materializa o no, solo la evolución de la pandemia en el tiempo lo dirá", argumenta la galerista.
IMPACTO DIRECTO
Ad portas de celebrar su aniversario número 15, en poco más de una semana, la Galería de los Ocho es otro de los puntos más tradicionales de la pintura local.
Reuniendo a 11 artistas, ha sido impactada directamente por la crisis sanitaria. De acuerdo a su director, Rodrigo Burgos, como Galería de los Ocho son parte de un espacio mayor, que corresponde a la Galería UdeC. "Por situaciones propias de esta crisis ha ido tomando medidas desde un cierre total, hasta la apertura gradual de algunos locales", cuenta el arquitecto.
Acota que tomaron la determinación de no abrir todavía. Principalmente por dos motivos, el primero tiene relación con la salud de nuestra galerista Patricia Riquelme y la nuestra, y la segunda, con la cantidad de público que efectivamente puede acceder a visitarnos", señala Burgos.
Más allá de esto, el impacto en el espacio, de acuerdo a Burgos, ha sido directo. Desde lo económico, la baja en las ventas se ha traducido en una rebaja ostensible de los ingresos para los artistas.
Sin embargo, la crisis que se vive ha llevado a explorar el mundo online. "Hemos trabajado de manera virtual en forma esporádica, principalmente, en Instagram, WhatsApp y Facebook, plataformas en las cuales pensamos en invertir más tiempo y dedicación a partir de septiembre, con un énfasis más comercial", apunta.
TRABAJO PREVIO
Fuera del centro penquista, la galería de la pintora Gina Intveen es otro de los puntos reconocidos de la disciplina en la zona.
Ubicada en San Pedro de la Paz, la galería que lleva su nombre (ex Galería Sala Blanco) funciona desde fines de 2007. De acuerdo a la artista, ha vivido momentos complejos desde el estallido social.
De hecho iba a unirse con parte del equipo de Galería Juana de Arco, Marcia Clark y Alejandra Cigarroa. Un proyecto que actualmente se encuentra en pausa.
Atravesando un problema de salud complejo y con la galería cerrada, pero con su vitrina expuesta, Intveen aprovecha de trabajar en su taller. "Más que nunca, porque no puedo salir de la casa. Me he cuidado mucho, como soy paciente de alto riesgo de contraer covid, eso te hace pensar diferente", señala.
Para la licenciada en Artes Plásticas, si bien el espacio físico de la galería no deja de ser importante, más lo es internet y, por lo mismo está preparando su sitio web.
"La vida viene diferente, hace mucho creo que es online. Mi fuente de trabajo es por la red, la galería es algo romántico, la verdadera galería es la web", ilustra.