Centro Artístico Cultural conmemora 36 años de carrera en medio de la pandemia
Toda la oferta cultural del espacio ha tenido que adaptarse a los desafíos de la crisis sanitaria. La música no ha sido excepción en este aniversario.
En 1984, con el objetivo de otorgar educación artística a los estudiantes de los establecimientos municipalizados de Concepción, nació el Centro Artístico Cultural de Concepción (CAC).
Han pasado 36 años y unas cuantas generaciones de alumnos, consolidado ya como uno de los espacios culturales y de formación más importantes de la zona.
En 1996 recibió el reconocimiento como Escuela Artística, por parte del ministerio de Educación. Y desde este año, con el fin del sistema de educación municipal, abrió sus puertas para los jóvenes, que son parte del Servicio Local de Educación Andalién Sur, es decir, de las comunas de Florida, Hualqui y Chiguayante.
"Desde abril hemos estado funcionado online con una gran acogida por parte de los y las estudiantes y sus familias (suman unos 350). Muy contentos de trabajar bajo esta modalidad y haber podido adaptarnos. Obviamente, le deseamos al Centro Artístico larga vida, porque le queda mucho por entregar y trabajar por esta ciudad", dijo Guadalupe Lloves, encargada del espacio desde este año.
NUEVO CONTEXTO
Este año, la oferta educacional del CAC debió adecuarse al formato online, debido a la pandemia. La música no es la excepción.
Para el director de la Orquesta de Cámara Ciudadana, Leandro Botto, esto ha resultado extraño y novedoso. "Todo es online. Ahí hacemos ensayos y reuniones técnicas -donde no se toca, pero se ven los aspectos técnicos musicales de la obra que vamos a grabar- lo que estamos haciendo es una temporada online", agregó.
Lo mismo que iban a tocar en una temporada normal, se transforma en una grabación grupal con un proceso que toma entre una y dos semanas de trabajo.
Manteniendo la agenda de una temporada presencial, la Orquesta de Cámara Ciudadana publica dichas grabaciones cada dos meses en el fanpage Concepción Cultural de Facebook.
Al mando de la entidad musical desde 2015 y con 18 alumnos a su cargo, para Botto el CAC es un aporte a la comunidad. "Conozco muchas ganas y talento para estudiar algún instrumento, pero las otras instancias académicas están fuera de su alcance académico. Entonces, ésta siempre ha sido una opción válida y de buena calidad para los niños y para quienes vienen de fuera", contó.
Con más de 20 años de trabajo en el espacio, Daniel Muñoz, director de la Orquesta Juvenil, es otro de los profesionales que ha visto modificada su labor.
"En nuestro caso es súper importante una relación cercana con los alumnos, a todos los profesores nos ha pasado. Pero esto ha sido beneficioso, en el sentido que hemos logrado el objetivo de seguir trabajando con ellos", comentó el también profesor de contrabajo.