Secciones

  • Portada
  • Portada
  • Actualidad
  • Nacional
  • Economía y empresas
  • Deportes
  • Página del lector
  • Espectáculos

Ciberseguridad en contextos de convulsión social

E-mail Compartir

En escenarios de alta incertidumbre y agitación social, la ciberseguridad se ve puesta a prueba y estresada a tal punto, que debemos replantearnos el rol del recurso humano en el establecimiento de una cultura organizacional que pueda evitar los incidentes y proponer las soluciones adecuadas.

A río revuelto, ganancia de pescadores. Así señala este simple y tradicional refrán que alude a lo siguiente: en escenarios de alta incertidumbre, siempre existirá alguien que se verá beneficiado, a costa de otro que será perjudicado.

Ahora, la mención a la actividad pesquera no es antojadiza, especialmente cuando se busca contextualizar el rol de la ciberseguridad en escenarios de convulsión, o efervescencia social. Es precisamente en estas circunstancias, como las que experimenta Chile, Ecuador, Bolivia, Brasil, Francia, o El Líbano, tan solo por nombrar algunos países, donde los riesgos de ser víctima del phishing se incrementan exponencialmente.

El exceso de información circulante, emitida por diversas fuentes y canales (muchas de ellas no verificables), entregando datos, ciertos o no, asociados al estallido social, genera el sustrato ideal para el incremento de fraudes informáticos que afectan a personas, empresas, e incluso al gobierno.

Gracias a los avances tecnológicos, como la interconexión de dispositivos y objetos a través de una red, y el resto de Babiv's (Inteligencia Artificial, Big Data, Internet of Things, Realidad Virtual y Aumentada), el phishing también se ha sofisticado, abriéndose paso a través de redes sociales, correos corporativos y plataformas transaccionales que soportan ingentes cantidades de información.

Por lo mismo, entender la ciberseguridad como un conjunto de herramientas y procedimientos que implican la política, cultura e identidad de una organización, hoy ha adquirido un carácter crítico, y por lo mismo, entenderla desde una perspectiva multifactorial es fundamental si lo que se busca es disminuir las probabilidades de riesgo.

Un error que se suele cometer es considerar los alcances del phishing solo en la dimensión de lo personal, en la que un individuo ve vulnerada solamente su información privada.

Sin embargo, este análisis no considera a la víctima de un fraude informático en su rol de representante de una organización, con acceso a información sensible, e incluso clave para el negocio. Solo imaginen que el gerente de Finanzas de una compañía sea afectado por el robo de información almacenada en su correo corporativo.

Las consecuencias podrían ser catastróficas para la continuidad operacional.

En este caso, que resulta ser más frecuente de lo esperable, especialmente en contextos de efervescencia social, los resguardos deben provenir desde dos vertientes: el elemento humano, y el elemento tecnológico.

Finalmente, los escenarios que actualmente ponen en juego la ciberseguridad de las instituciones, han ubicado a la persona como el elemento crítico de la ecuación y, por lo tanto, si tuviésemos que determinar cuál es el eslabón más relevante para dar el salto a una nueva dimensión de seguridad en entornos informáticos y tecnológicos, este sería el factor humano.

Gerente de

Productos de

Seguridad,

CenturyLink para América Latina

Servicio de comida rápida tuvo fuerte caída en cuarto trimestre

E-mail Compartir

Las ventas reales de comida de servicio rápido a nivel nacional registraron el 2019 un negativo cuarto trimestre con una caída real anual de 9,1% según el indicador que elabora el Departamento de Estudios de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CNC). Por su parte, las ventas reales medidas en términos de locales equivalentes (concepto de same sale store), evidenciaron una baja real anual de 9,7%.

De esta manera el año pasado las ventas totales del sector acumulan un alza de 3,0% real, mientras que en términos de locales equivalentes promedian un crecimiento de 0,4% real.

Con respecto a los meses del cuarto trimestre, el estallido del 18 de octubre pegó fuerte en el sector registrándose una caída de 16,5% real anual en octubre y una baja de 11,5% en noviembre. Por su parte diciembre experimentó una baja de 1,0% real anual.

A nivel de locales equivalentes también se evidenciaron negativos resultados con caídas reales anuales de 17,9% y 11,3% en octubre y noviembre, mientras que en diciembre se alcanzó una baja de 1,8%.

Las ventas reales de comida de servicio rápido en regiones marcaron en el cuarto trimestre de 2019 una caída real anual de 6,6% tras crecer un 13,7% real anual en el tercer cuarto del año y acumulando entre enero y diciembre un alza de 4,4% real.

Al analizar el comportamiento mensual, se aprecian bajas de dos dígitos en noviembre y diciembre de 12,6% y 11,7% real cada uno, en diciembre el sector se recupera con un crecimiento de 2,3% real.

En términos de locales equivalentes las ventas en regiones tuvieron una caída real anual de 11,5% en el último cuarto del año pasado, cerrando así el año con un alza de 1,2% real anual, en línea con el resultado de 2018 (1,3%).

En cuanto al comportamiento mensual sobre base equivalente octubre y noviembre evidenciaron bajas de 16,3% y 18,3% real anual, mientras que diciembre cayó un 2,4% real anual.

El consumo promedio por boleta (expresado en pesos de diciembre 2019) alcanzó un valor de $4.990 en el cuarto trimestre de 2019, lo que significa un alza real de 2,7% respecto a igual período de 2018 y una baja real de 2,5% respecto al trimestre anterior.

Bernardita Silva, gerente de Estudios de la CNC, afirmó que tras el estallido social el sector ha sido uno de los más afectados dado el cierre de mucho de sus locales ubicados dentro de centros comerciales en las semanas posteriores al estallido, sumado a los ubicados en zonas de alta violencia que aún no pueden abrir, mientras que otros fueron totalmente destruidos.

Otro factor que ha afectado fuertemente al sector es el cambio en el horario de los centros comerciales que se mantienen hasta ahora cerrando más temprano.