En noviembre cuentas de la luz verán reflejada nueva alza
No queda otra opción que asumir. En la cuenta de la luz de noviembre vendrá el reajuste promedio de 7,8% para la Región del Biobío, luego de que la Contraloría General de la República tomó razón del decreto de precio de nudo promedio (PNP).
Cada seis meses la Comisión Nacional de Energía realiza en abril y octubr,e de acuerdo a un polinomio, un cálculo al alza o la baja en las cuentas. En este caso, el incremento del dólar es el elemento que más influyó.
Al respecto, el secretario regional ministerial de Energía, Mauricio Henríquez, comentó a este medio que "si bien el polinomio tiene otras variables, como las inversiones, infraestructura, la transacción de la energía y los servicios de calidad que entregan las compañías, es el alza del dólar el que influyó y en Chile aún se está recibiendo energía de contratos que vienen del 2014, de la cual más del 50% es en base al diésel, carbón y gas, productos que no están en el país y que por ende se transan en esa divisa".
Por ende, afirmó que cuando entre energía proveniente de los parques eólicos o las instalaciones solares, los precios deberían ir a la baja.
Remarcó que gran parte de los parques eólicos que existen hoy en la Región están entregando suministro a clientes libres, no a los regulados, que no forman parte del proceso de licitación.
El seremi recordó que en marzo del próximo año se hará un nuevo concurso, que si se suma al del 2016, deberían apuntar a renovables, que son más económicas y limpias.
Con este escenario y tomando en cuenta que en el primer semestre ya se produjo la primera alza del año y que en Biobío fluctuó entre el 11% y el 13%, las cuentas durante 2019 en la zona oscilarán entre el 18% y el 20% de alza.
AHORRO
Por ende, Henríquez pidió aplicar eficiencia energética, en cuanto a ocupar de buena forma los aparatos electrónicos y a evitar la fuga de calor.
"Hoy día en la Región, por hacer un mal uso, perdemos entre el 30% y el 35% de la energía que tenemos en la casa, considerando el combustible, calefacción y la electricidad", detalló.
Lo otro es que la autoridad llamó la atención es que en verano se viene un alto uso del aire acondicionado y las centrales hidroeléctricas empiezan a reservar, por lo que se pierde una parte de hidroelecticidad y entran otros sistemas, como la de los parques eólicos y las solares. Es decir, se podría presentar una estabilidad, pero también un peak de consumo.
Aparte de eso, advirtió que se presenta un consumo mayor de energía por la cadena de frío por parte de la industria alimenticia, algo que en el sur de Chile se nota la diferencia.
Sumó que sin duda ayuda, además, el cambio de hora, porque comenzará a oscurecer más tarde y en la medida, algo que ya se comenzó a aplicar en los edificios públicos, que los aires acondicionados se apaguen una hora antes que termine la jornada laboral, ayuda, porque eso implica un ahorro de 10%.
Pero eso no es todo, porque reiteró que el gobierno está trabajando en una ley corta que apunta a rebajar la rentabilidad de las distribuidoras de 10% a 6%, lo que traerá una disminución el próximo año. Después está la ley larga, que tenderá a estabilizar los precios.
De todas formas, advirtió que el 2020 vienen otros dos proceso de tarificación, que se podría traducir en un reajuste a la baja o al alza, dependiendo del polinomio.
EFECTOS
Carlos Smith, economista del Centro de Estudios en Economía y Negocios de la Facultad de Economía y Negocios de la Universidad del Desarrollo, dijo que esta alza de todas maneras va a tener un efecto sobre la inflación o el IPC.
"Para hacerse una idea, energía está compuesta por electricidad, leña, gas, gasolina, petróleo o los aceites, y pesa en el IPC un 7,54%. Esa variación promedio va a pegar en ese porcentaje en ese indicador", explicó.
En todo caso, remarcó que no hay que preocuparse mucho por este índice, pues en septiembre el IPC fue de 0% y los alimentos tienden a bajar, generando una paridad que mantendrá el rango meta menor al 3%.
Por ende, afirmó que sin duda golpeará a los bolsillos de las personas, porque la demanda por electricidad tiende a ser inelástica, es decir, cuando se sabe que le energía va a ser más cara, la gente es más cuidadosa, pero eso al final es muy marginal.
Por ende, sostuvo que los ingresos de las personas disminuirá al pagar más por la cuenta, mermando el poder adquisitivo.