La compañía de danza contemporánea Escénica en Movimiento dará inicio a la primera temporada de su obra "…Y escaparon del peso de la oscuridad", desde el 20 de junio hasta el 6 de julio, en el Teatro Biobío.
Las funciones del montaje, dirigido por el coreógrafo danés Thomas Bentinse, se realizarán de jueves a sábado, a partir de las 20 horas, en la Sala de Cámara del espacio cultural.
En 60 minutos, el montaje dinámico de lenguaje contemporáneo, aborda desde los cuerpos en movimiento, el latido esencial de los seres humanos en busca de un sentido vital y la felicidad en una sociedad rígida, cada vez más hostil y definida por las lógicas del capital.
"Se trata de una obra reflexiva, cuyo componente temático y emotivo son únicos, pues nos invita a entrar en esos lugares misteriosos de la vida y a los que muchas veces no nos permitimos llegar", afirma Cristóbal Santa María, intérprete de la puesta en escena, junto a Bárbara Bañados, Darwin Elso y María José Bretti.
La iluminación y música (composiciones de Inglaterra, Japón, Islandia, Cuba y Estados Unidos), según cuentan, buscan generar en el ambiente una experiencia escénica lúdica, adecuada para distintas audiencias, y que permite iniciar procesos de formación de espectadores por los elementos que despliega.
"Es para todo público, desde personas que tienen mucha expertis en artes escénicas, hasta niños y personas que nunca han visto danza contemporánea. Parte muy abstracta y de a poco se va humanizando. Es una invitación a disfrutar para nuevas audiencias", apunta Bañados.
La pieza fue seleccionada en la convocatoria que abrió el recinto cultural, dirigido por Francisca Peró, para distintas agrupaciones de artes escénicas del Biobío.
"Es una bella oportunidad para poder compartir con la gente de nuestra ciudad, además, en un muy buen espacio. Ya tiene un tiempo de rodaje en distintos escenarios como este, donde el montaje puede desplegarse y llegar a transmitir cada una de las sutilezas artísticas presente", agrega la bailarina.
BUENA RECEPCIÓN
La obra, que fue estrenada el año 2016, destaca por la cercanía con el público. "Esta obra habla de la búsqueda de la felicidad. Es un viaje de trasformación que transita desde lo más animal hasta llegar a lo más humano. Es una obra que toca fibras muy profundas. Si bien es cierto es una evolución muy natural que se va dando, pero que finalmente plantea muchos cambios emocionales en la gente. Por eso es para todo espectador", agrega la bailarina.
Presentar esta obra siempre es significativo para el conjunto local nacido en 2010. "Es primera vez que tenemos una temporada como corresponde. Queremos que la gente nos acompañe y aproveche, porque es una obra llena de dinamismo, que nos habla de que la vida está llena de confluencias, tanto en la percepción como en la sensación, y ese es un lugar al que a veces no nos permitimos llegar. Entrar en espacios que tienen que ver con lo inexplicable. Creo que es una gran oportunidad para la gente que está cercana al Teatro Biobío y a la provincia de Concepción. Además, el componente temático y emotivo son únicos respectos a los formatos y a los modos de diseñar la danza el día de hoy", dice Santa María.
EXPERIENCIA DANESA
Trabajar con Thomas Bentinse siempre es un agrado para los cuatro bailarines. "Es un artista muy empático y de una calidad humana muy alta. Se preocupa mucho de cómo están los intérpretes, de que comprendan su propuesta para trabajar juntos en crear un producto escénico que sea de calidad. Él tiene una metodología de trabajo muy empática con los bailarines, porque propone un contexto súper confiable, basado en el relajo. Y en ese sentido, también es comprensivo con los tiempos y de los estados emocionales en que estamos", indica Darwin Elso.
Cabe señalar que el bailarín y actor danés ha trabajado durante los últimos 15 años en producciones artísticas en Europa, Latinoamérica y el Oriente en la dirección de compañías como KaoriIto Dance (JP/FR), Kristjan Ingimarrson Company (IS) y Mu-te Comp. Physical Theatre (DK) entre otros.
Los últimos seis años se ha focalizado en desarrollar su practica coreográfica y ha estado dirigiendo obras de danza contemporánea como "…Y escaparon del peso de la oscuridad". "Su metodología de movimiento es súper atractiva, porque él genera premisas de trabajo donde el bailarín va descubriendo su propio lenguaje. Y a través de eso, él va proponiendo más cosas y se va generando un trabajo evolutivo. Es una co-creación y en ese sentido uno se siente muy arraigado en el material que se está generando", detalla Elso.
Santa María comparte esta visión del coreógrafo. "Ha sido muy enriquecedor, porque tiene una mirada muy particular respecto a las posibilidades que tiene el cuerpo en el estado de movimiento. Es un estudioso. Te lleva por texturas y movilidades, cambiando el registro que tenemos tradicionalmente de la danza que se da en el país", apunta.
La compañía Escénica en Movimiento ha tenido un año muy intenso en cuanto a creación. "En abril estrenamos 'La Magnitud del Momento (Mw)' con la cual hemos circulado por distintas ciudades de Chile compartiendo sus procesos creativos, en el marco de la red Corredor Sur de Danza Contemporánea", agregan.
Pese a ello, la pieza artística que inicia temporada, se ha presentado poco en la Región, y en ello radica la importancia de compartir el montaje con las distintas comunidades locales.