Una de las sensibles bajas del viernes fue la del piloto capitalino Emilio Fernández y el navegante yumbelino Joaquín Riquelme (equipo Susaron), tras sufrir un grave accidente en El Puma, la segunda prueba especial del día.

El Skoda Fabia R5 de Fernández se volcó, por lo que debieron abandonar la jornada, sin la posibilidad de reenganchar. El auto quedó todo el día fuera de la pista, por lo que el capitalino tuvo que pasar toda la noche junto al vehículo, el que fue retirado recién la mañana de ayer.

Fernández acusa que literalmente quedó botado en la ruta. "Fue un infierno para mí pasar toda la noche allá, por suerte pude coordinar con mi equipo para que fuera allá. Dormí unas horas en la camioneta, esperando a una grúa pluma para sacar el auto", indicó.

"El tipo encargado de la grúa me cortó el teléfono, fue atroz. Esto es problema de organización. Yo pago por correr y que me retiren de la competencia cuando pasa algo así", añadió.

El que sacó la peor parte fue el yumbelino, quien resultó con lesiones que lo obligaron a ser retirado en helicóptero de la zona, con dirección al Hospital Clínico del Sur, donde fue internado. Eso sí, Fernández señaló que el copiloto se encuentra en buenas condiciones.