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Público se comportó, mientras que WRC quedó sin líder anual

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"Espero que valga la pena estar nueve horas acá..." es el pensamiento, en voz alta, de un espectador en Pelún, a las 10 de la mañana.

A su costado, un cooler con cervezas y bebidas, una carpa y una tetera calentándose en una cocina a gas. Otros, en tanto, ya preparaban el asado, en un parrilla, para el almuerzo.

El ambiente era así. Y había justificación, ya que a las 1 de la madrugada se cerraron los caminos para llegar a cada especial. Familias y amigos se prepararon especialmente para disfrutar de la segunda jornada del WRC Chile.

Mil aficionados del deporte tuerca recalaron a distintos puntos de la ruta, que tuvo tramos en Río Lía (Santa Juana), María Las Cruces (Arauco) y Pelún (Santa Juana), con un total de 121,16 kilómetros.

RESPONSABILIDAD

A diferencia del viernes, había otra mentalidad en los espectadores. Estaban más conscientes. Y es que luego de las numerosas suspensiones en la primera fecha por la presencia de público en zonas restringidas, ayer cambió el comportamiento.

Es más, el mismo público se encargó de que aquello no pasara. Y cuando sucedía, los espectadores repudiaban la acción y gritaban en contra de quienes lo hacían. Nadie se salvaba, ni siquiera los reporteros gráficos acreditados.

"VALIÓ LA PENA"

Con el paso de los minutos, y con refresco en mano, comenzaron a llegar los primeros pilotos del WRC que pasaron por el tramo de Pelún. El italiano Lorenzo Bertelli (M-Sport Ford WRT) fue el primero en recorrer la ruta. La reacción de los espectadores fue inmediata. Se levantaron de sus puestos, prendieron sus celulares y comenzaron a disfrutar. Se escucharon gritos de euforia y aplausos. Un ceacheí de vez en cuando.

Media hora después, y luego que hayan pasado seis deportistas, el mismo asistente que esperaba que valiera la pena su esfuerzo reconoció su felicidad y le dijo a su acompañante: "¡Valió la pena, amigo! Tomémonos unas cervecitas"".

NEUVILLE DICE ADIÓS

Al mismo tiempo que los espectadores en Pelún esperaban a los binomios, en María Las Cruces sucedió algo impensado. El líder de la clasificación general de la temporada, Thierry Neuville (Hyundai Shell Mobis WRT), se volcó en el octavo tramo y abandonó la carrera.

Minutos después, el Hyundai i20 Coupe WRC se incendió y, debido al impacto del choque, el belga fue llevado en helicóptero al Hospital Regional de Concepción.

"En el lugar se confirmó que no sufrió fracturas u otra lesión", aseguró en un comunicado Hyundai que informó, además, que volverá a competir en el Rally de Portugal.