Un nuevo capítulo se suma a los acontecimientos cuyo eje central es la reciente aprobación de la llamada Ley de Jibia por parte del Congreso y, que al fijar la potera como único arte de pesca, dejó prácticamente fuera de esta actividad al sector pesquero industrial, con el consiguiente impacto en los empleos formales, tal como ya se ha anunciado.

La arremetida de ayer vino sin embargo de dirigentes de trabajadores que no enfrentarán ese riesgo a contar de agosto próximo, cuando empiece a regir la polémica ley.

Se trata de una denuncia que la Federación de Trabajadores Pesqueros (Fetrapes)- que lidera Juan Montenegro, quien aseguró representar a ocho organizaciones de la industrias, flota, planta y servicios, entre ellos a trabajadores del Instituto de Fomento Pesquero (Ifop)- interpuso ante la Inspección del Trabajo y la Seremi de Salud por "psicoterrorismo laboral", debido a los anticipados anuncios de despido de las pesqueras Landes, PacificBlu y Alimar. El libelo indica que estas empresas "estarían incumpliendo sus deberes como empleadores, vulnerando derechos estipulados en el Código del Trabajo y la Constitución Política de Chile".

aumento de riesgos

A ojos de esta organización, que suman unos 500 suscritos en Biobío, se vulneran derechos fundamentales de los trabajadores, generando una "psicosis colectiva" y poniendo en riesgo la salud mental de los mismos, con el consiguiente aumento de riesgos de accidentes laborales. Por ello, en la denuncia solicitan además, instruir a las mutualidades para "programar evaluaciones y terapias de apoyo a todos y cada uno de los trabajadores" de las empresas involucradas en estos anuncios de despidos.

Luego llaman al Gobierno y al Congreso a acelerar la nulidad de la Ley de Pesca y la generación de una nueva legislación que de protección a los trabajadores pesqueros de forma autónoma a los intereses particulares de la industria pesquera.

Para Sergio Vera, presidente de la Federación de Tripulantes de Chile, esta es una denuncia "netamente al estilo de Fetrapes". Dijo que para el "Movimiento Nacional de Trabajadores Pesqueros", la mejor Plataforma Social siempre serán nuestros puestos de trabajo y si hoy por una mala Ley como es la de la Jibia los trabajadores no van a poder seguir teniéndolos. Eso es una realidad.

"Nadie desea que haya despidos, pero como dirigentes del personal embarcado y de plantas de procesos y todos sus responsables de la Región del Biobío, estamos trabajando con el Gobierno, para buscar la mejor compensación y mitigación para nuestros compañeros que serán desvinculados, como también, para todos los trabajadores que a futuro sean desvinculados del sector por cualquier motivo", precisó Vera.

Si existiere un problema psicológico, agrega este dirigente, sería en agosto cuando los compañeros se encuentren sin trabajo y sin el sustento familiar. "Si quieren denunciar a alguien que denuncien a los Parlamentarios de esta Región y del país que votaron a favor de esta Ley y al Gobierno por no reaccionar y no cumplir en llevar esta Ley al Tribunal Constitucional", sentenció.

A su juicio, "si alguien tiene que ir al psicólogo serían ellos, por cuanto están pidiendo la nulidad de la actual Ley de Pesca, sabiendo que esto conllevaría eliminar los Comités Científicos y volver a la llamada 'carrera olímpica´, entre otras cosas. Y si la gente sale a la calle es porque ve que así como Fetrapes pide anular la Ley de Pesca, el Parlamento irresponsablemente está en lo mismo y por esas acciones, ven llegar muy pronto los despidos de todos. Eso Fetrapes no lo entiende, porque es un organismo mercenario, donde estas personas hoy gozan de trabajo y sueldo asegurado en Lota Protein".

reunión con Valente

En otro sentido, Vera informó que este lunes a las 10:30 horas, dirigentes agrupados en la Federación de Sindicatos de Trabajadores de las Plantas de Consumo Humano de la Industria Pesquera (Festrach) se reunieron con el Ministro de Economía, Fomento y Turismo, José Ramón Valente, en Santiago por 45 minutos.

En la ocasión, los representantes de los trabajadores le hicieron presente su descontento respecto al rol que ha jugado el Gobierno en la tramitación de distintas leyes que afectan al sector pesquero industrial siendo el caso de la Ley de la Jibia el más emblemático y está teniendo serias consecuencias con el cierre de plantas procesadoras en la Región del Biobío afectaría a unas 900 personas.

Una de las empresas damnificadas con la nueva regulación es PacificBlu y el secretario de su sindicato de trabajadores, Iván Morales quien estuvo en la cita con Valente, precisó que "el Gobierno ha perdido toda credibilidad y eso se lo hicimos saber al Ministro. El caso de la jibia quizás es el mejor ejemplo en donde primero se anunció la ida al Tribunal Constitucional y después un veto presidencial… ideas que nunca se concretaron", aseguró.

la otra amenaza

En tanto, el vicepresidente de Festrach, Alfonso Arévalo, afirmó que "en la actualidad se está discutiendo una Ley Corta de Pesca que tendrá serias consecuencias en el sector laboral y vemos al Subsecretario de Pesca en una actitud totalmente pasiva y displicente con los trabajadores del sector pesquero industrial, lo que consideramos lamentable. Tenemos el temor que al igual como está ocurriendo con la ley de la jibia, la Ley Corta tenga graves consecuencias para el mundo laboral industrial y el Subsecretario no reacciona".

En tanto, el presidente de Festrach, Raúl Morales, afirmó que "la única plataforma social válida para nosotros es la defensa de nuestros puestos de trabajo y le pedimos al Gobierno que se involucre en la discusión legislativa pesquera y que evite que le sigan pasando goles".