Una obra frontal, simbólica y que, desde el plano de la ficción se acerca a la realidad, "Prometeo nacional", de la compañía La Obra Teatro, es la que sube este 2019 el telón de la temporada teatral anual en Artistas del Acero.
La entidad acerera, además, apunta a un título emotivo desde el dolor, la pérdida y los vacíos. Todos temas que expone el texto de la dramaturga local Giselle Sparza, también directora del montaje inspirado en el caso de Sebastián Acevedo Becerra, quien murió luego de inmolarse en 1983, frente a la Catedral penquista, a raíz del desconocimiento del paradero de sus hijos en plena dictadura.
La puesta en escena que, además, tiene el atractivo de cruzar lenguajes como el teatro, las artes visuales y la música, se presentará este viernes y sábado, a las 19.30 horas, en la Sala de Espectáculos de la entidad ubicada en O'Higgins 1255 (mayores de 12 años, las entradas parten en $ 2.000).
Desde la compañía explicaron que la apuesta tiene cupos limitados, por lo que sugirieron adquirir las entradas con anticipación.
"El iniciar este año con funciones en Artistas del Acero en nuestro año numero 20 de existencia es un símbolo que nos indica que estamos en casa, que seguimos trazando la ruta de manera coherente con nuestra búsqueda artística, las temáticas que nos interesan y nuestra pertenencia territorial", comenta la directora de la compañía nacida en 1998.
UNA OBRA "VIVA"
Gisell Sparza aludió a que presentar la obra en el espacio de calle O'Higgins les permite montarla sobre condiciones especificas que favorecen el encuentro cercano.
"Es lo que deseamos tener con los/as espectadores/as en nuestro Prometeo Nacional", acota, señalando que inaugurar la temporada 2019 con su obra es un acto que "puede simbolizar la necesidad de pasar por la memoria, reivindicar las luchas, aprender de la historia y exigir justicia hasta que esta de verdad se haga carne. No importa si es 1990 ó 2019, la memoria frente a hechos como lo sucedido con don Sebastián y su familia, serán siempre necesarios y vigentes".
La compañía estuvo el año pasado con una mini temporada. "Fue durante mayo con funciones tres días de 'Prometeo' que tantas gratificaciones nos ha traído en estos años", destaca.
- La obra está cada vez más habitada por los intérpretes, las palabras se han ido haciendo propias y orgánicas en la práctica, lo cual nos acerca más aún a los espectadores, propiciando el acto de empatía que nos proponemos potenciar, frente a lo realizado por don Sebastián que es, por sobretodo, un acto de amor.
- Sí, el montaje ha sufrido algunos cambios, propios de una obra que ha viajado y se ha retroalimentado de las comunidades que la han visto. Como compañía acostumbramos abrir espacios de diálogo al final de cada función y eso ha sido gravitante a la hora de darle nuevas miradas al texto y la interpretación. Hemos trabajado, además, en ir mejorando el dispositivo escénico y la exposición de los documentos de archivo que forman parte de ella. Hoy pueden ver una obra mucho más pensada y fuerte en su performance.