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Dino Gordillo llega al Festival de Viña para hacer reír con sus clásicos chistes

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"Soy el mismo, no cambio. Me encanta reírme y disfruto. Me considero una persona franca. Tengo 10 mil errores como cualquiera. Pero soy feliz como soy (...) Creo que no me he equivocado en la vida, porque he formado a buenos hijos y una buena familia".

Los más cercanos a Dino Gordillo, quienes comparten el ámbito íntimo con él, estarán de acuerdo con la descripción y análisis que hace el propio humorista nacido en Lota de una vida, la suya, que actualmente transita hacia los 59 años.

Los cumple el 26 de febrero, un día después de estar confirmado por séptima vez en el escenario del Festival de Viña, en la Quinta Vergara. Allí, aunque desde las sombras, estará acompañado de sus más cercanos y su amigo Katto Senoceaín, quien fuera representante del humorista entre 1996 y 2000.

Aunque reconoce que pudo elegir una buena noche en términos de público -el mismo de Raphael y Yuri-, igualmente siente las expectativas que genera un escenario que conoció de manera ininterrumpida entre los años 1996 y 2000, para regresar luego en 2011. Todas pasadas exitosas.

- Yo creo que es el mismo, porque no he cambiado. Lógicamente, uno está más maduro, tiene hijos y otras responsabilidades. Ahora ya no vivo con 400 lucas, porque el sistema te lleva y te envuelve. En la vida uno sueña con tener y eso significa más responsabilidades y gastos. Todo aumenta. Y si aumentan tus ingresos, también tus gastos y estás igual de acogotado. Entonces, por qué cambiar. Soy el mismo desde que empecé mi carrera (1986), soy un ser humano como cualquiera.

- Todos estos años, me preguntaban (la gente) por qué no iba a Viña, que faltaba el humor de un Coco o de un Dino. Yo les decía que no se había dado (negociación). La gente de mi generación lo lamentaba, porque es a ellos a quienes dirijo mi humor y estoy enmarcado en eso. Me pregunto, ahora ¿qué compadre se sube al escenario con terno?, porque yo tengo que brindar un buen show y el público paga su entrada para ver a un artista. Yo lo veo así, con el respeto a los demás, que no lo hacen. Si saliera con jeans y zapatillas ya no sería el mismo al que la gente se acostumbró a ver. Ahora, las nuevas generaciones que hacen stand up comedy, actúan normal y como andan en la calle se suben al escenario. Hacen una cosa más cotidiana. Suben a divertirse y está bien, pero a mí me gusta como soy y no lo cambio.

EL HUMORISTA ACTUAL

- Desde mi forma, si digo algo puedo ganar enemigos. En esta sociedad estamos muy sensibles. Puedo decir algo de alguien y mañana le van a preguntar al otro qué le parecen mis dichos y, finalmente, terminamos peleando. Pero yo no soy así. Creo que humor hay mucho y creo que todo el chileno es humoristas, porque no hay nadie que no haya contado un chiste en su vida. Creo que hay buenos cabros haciendo stand up. Me gusta Felipe Avello, tiene un ángel muy lindo ese cabro. Me encanta. También me gusta Fabrizio Copano. Con el respeto de los demás, creo que ellos no pasan el tejo de la rayuela, para lograr algo, no se exceden.

- Aunque no me creas, nunca las he visto. En una oportunidad vi una repetición de humor y creo que hay muchas formas, pero pasar el tejo en una mujer (...) Posiblemente, fui criado a la antigua y, quizás, por eso peleo con mis hijas, porque son sueltas de lengua y hablan cada cosa que uno piensa que ya pasaste de moda. Por eso, prefiero mantenerme piola. Hay público para mí, para el Coco, para Álvaro (Salas) y para los stands up. Los millennials prefieren una forma más agresiva de humor, más grotesca y grosera, por lo que les gustan los stand up que hacen eso. El humor no tiene límite. Mientras yo haga reír a alguien soy feliz.

DE VIÑA A CHIGUAYANTE

La séptima aparición de Dino Gordillo en el escenario de la Ciudad Jardín será en el marco de una jornada con la que el humorista se encontrará, piensa, con un público que conoce y con el cual trata en empresas u otros eventos privados de esa naturaleza.

Por lo mismo, los 45 minutos de rutina, que vino a preparar durante toda esta semana en el Hotel Sonesta, están planteados para un público adulto y familiar. "Voy a hacer lo que hago siempre. Los cambios, las generaciones, cuentos que se hicieron hace mucho tiempo y quedaron en un baúl, los hemos sacado con Katto, con quien he trabajado toda esta semana en Concepción.

- A Chiguayante lo hice conocido yo. No estoy siendo ególatra, pero antes no lo era. Y yo doy, voy cuando se necesita, es mi pueblo y, sin embargo, nunca me han traído a Chiguayante a actuar. Para las tragedias soy el primero en estar ahí. Para el terremoto traje tres toneladas de alimentos, que las compré con mi familia y yo mismo las vine a entregar en un camión (...) Esto lo digo como chiguayantino nada más.

- Sí, de piel. Yo no estoy pidiendo ser Hijo Ilustre, estoy hablando como chiguayantino normal. Pero nombran a otras personas como tal, y uno se pregunta qué han hecho por la comuna, y nada. En mi casa me dicen que no espere nada, sólo que no te olvides de tu gente y efectivamente, no me olvido de ellos.

SOBRE ESTAR VIGENTE

- Sí, lo que pasa es que somos de una generación que sembró bien, me refiero a Álvaro Salas, Coco Legrand y Bombo Fica. La generación de ahora no tuvo lo nuestro. No somos de internet, ni de redes sociales, donde insultan de una manera! además con identidades falsas. Vivimos en una sociedad cínica y fantasmal en el sentido de que cualquier tipo publica lo que se le ocurre. Bueno, lo que yo digo es que si a una persona no le gusta lo que ve, que cambie o haga otra cosa, pero que no se quede viendo para luego insultar.

- No me interesan las redes sociales, son fantasmas hirientes, groseros e irrespetuosos. Yo fui criado respetando al otro. Nosotros lo más cerca que estuvimos de un psicólogo fue una patada.

Es hora del retiro

Dino Gordillo debutó en Viña del Mar en 1996. En esta ocasión, su séptima vez en el festival, dice que será la última. "Ahora hay que darle espacio a la nueva generación".

"Mozart el niño monstruo" abre las puertas del Teatro UdeC

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Si éste fuera algo así como "El ciclo de febrero", la primera fecha de la instancia organizada por la Corcudec se realizará mañana, a las 19 horas, en el Teatro U. de Concepción, escenario que por primera vez abre sus puertas en el segundo mes del año, tiempo de vacaciones de la casa de estudios superiores.

"Mozart el niño monstruo", una educativa obra de teatro que se cruza con música, y pensada para toda la familia, es la apuesta programada para marcar la partida de la iniciativa, que considera tres apuestas.

En este primer montaje, es el actor y director Miguel Ángel Bravo y la compañía teatral La Apasionada, los que interpretan parte de la historia de Mozart. La que se inicia en su etapa niño, precisamente, en tiempos en que se enfrenta a la admiración, amistad y envidia de Antonio Salieri.

TODA UNA AVENTURA

Con el señalado marco de referencia, los actores de la puesta en escena narran la historia y peripecias de un joven Wolfgang Amadeus Mozart desde su infancia hasta su adultez.

"Se acentúa su genio y prodigio con instrumentos como el clavecín y el piano", resume el director del montaje.

De esta forma, señala, la obra está estructurada como un pequeño concierto didáctico para toda la familia. "También puede verse como un paseo histórico a través de la música clásica, revelando costumbres y modas del siglo XVIII y enseñando a apreciar al genio a través de la interacción con los asistentes", explica el encargado de la apuesta con un desarrollo aproximado de 60 minutos.

Junto a Miguel Ángel Bravo, se presentarán la actriz Carolina Spencer, más los actores Christian Montenegro y Mauricio Quezada. A ellos se sumarán el baterista Rodrigo Homer, el pianista Daniel Baeza y el contratenor Alex Santander.

MÁS MÚSICA

Luego de este espectáculo, para el próximo fin de semana se anuncian las dos funciones del esperado montaje "Queen sinfónico", bajo la dirección del argentino Leandro Botto.

Dado que la primera función se agotó en corto plazo, la Corcudec programó un segundo pase, el domingo 17 de febrero, a las 20 horas, para la cual aún quedan entradas disponibles.

En tanto, en el ciclo "Pop&Rock" se darán cita los sonidos ancestrales de nuestra tierra, el jueves 28 de febrero, siempre a las 20 horas.

En esta ocasión, se presentarán tres agrupaciones que rescatan el sonido mapuche y lo entrecruzan con el rock, como parte de una propuesta original.

Se escucharán los acordes de la cantautora Angélica Llancamil, quien se presentará junto a su agrupación; además de las bandas Inche y Pillán.

Valores

Los precios para la obra son $ 10 mil platea baja, $ 7.000 platea alta, mientras acceder a balcón tiene un valor de $ 5.000. Entradas en boletería o en www.corcudec.cl