Anillos de Saturno podrían ser más jóvenes que los dinosaurios
Cuando de reconocer los ocho planetas que habitan en nuestro Sistema Solar se trata probablemente el más fácil -después de la Tierra- es Saturno por sus característicos anillos.
Sin embargo, una nueva investigación habría determinado que esta característica del cuerpo celeste no sería tan antigua como se podría creer. Aparentemente, la formación de los anillos sería sólo de hace 10 millones de años, mucho después de la desaparición de los dinosaurios en la Tierra, evento que ocurrió hace aproximadamente 66 millones de años.
Esto se dedujo a partir de los últimos datos enviados por la sonda Cassini -que se estrelló en planeta en 2017- en su trayectoria final, que permitieron a científicos de Universidad de California, Berkeley, determinar el momento de formación.
Esa estimación, alrededor del 40% de la masa de la luna de Saturno Mimas, que en sí misma es 2 mil veces más pequeña que la luna de la Tierra, les dice que los anillos son relativamente recientes, que se originaron hace menos de 100 millones de años y quizás tan solo tan recientemente como hace 10 millones de años. Su corta edad aplaca una larga discusión entre los científicos planetarios.
Algunos pensaron que los anillos se formaron junto con el planeta hace 4,5 mil millones de años a partir de restos de hielo que permanecen en órbita después de la formación del Sistema Solar. Otros pensaron que los anillos eran muy jóvenes y que Saturno, en algún momento, capturó un objeto del cinturón de Kuiper o un cometa y lo redujo gradualmente a escombros en órbita. Lo interesante de estos datos es que no son posibles de obtener desde el espacio, por lo que fue el momento en que la nave de la NASA viajaba por la atmósfera del planeta lo que realmente les permitió conocer esta información.
De acuerdo a los investigadores, sólo cuando el equipo tuvo en cuenta los vientos muy profundos en la atmósfera de Saturno tuvieron sentido las mediciones, permitiéndoles calcular la masa de los anillos.
Cómo se calculó
Los cálculos de edad se construyeron sobre una conexión que los científicos habían hecho previamente entre la masa de los anillos y su edad.