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¿Existen los celos normales? Trastorno Delirante Celotípico

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Los celos son una respuesta de malestar innata que surge ante la amenaza de la pérdida de una relación valiosa como consecuencia de la existencia de una tercera persona. En este contexto podemos hablar de celos comprensibles, neuróticos y delirantes.

En cuanto a los celos comprensibles nacen de una infidelidad real. Se definen como universales, presentes en casi todas las culturas e incluso en relaciones no románticas. Se componen de reacciones proporcionales a la dimensión de la situación catastrófica y sus manifestaciones son socialmente aceptadas.

El uso masivo de redes sociales ha generado un aumento de los celos en las relaciones de pareja. A lo menos tres estudios han demostrado que las mujeres presentan más celos por esta causa y les molestan los mensajes de contenido variable hacia otras personas. Los varones, se molestan al ver "emoticones" entre su pareja y un tercero, ya que lo interpretan como coquetería.

En los celos neuróticos, la reacción no habría surgido sin un evento que lo suscitase. El contenido está en relación comprensible con el acontecimiento. Sin embargo, existe desborde emocional, reacción exagerada ante una infidelidad, la idea puede ser sobrevalorada y se puede actuar peligrosamente. Se observan frecuentemente en personas con trastorno de personalidad.

Los celos delirantes pueden ser de tres tipos: los que se presentan como parte del desarrollo de la personalidad, a lo que se llama un Trastorno Delirante Celotípico. Los celos delirantes como una alteración procesal de la personalidad, como síntoma en una psicosis esquizofrénica. Y, por último, como sintomatología de alteraciones orgánicas como demencia, alcoholismo o consumo de sustancias.

El Trastorno Delirante Celotípico o Síndrome de Otelo (abordado en la tragedia de Shakespeare), se caracteriza por la creencia fija de ser engañado por la pareja, que no puede superarse, aunque exista la presencia de argumentos razonados o evidencia en contra. La experiencia de los celos es delirante cuando la convicción del sujeto es irracional e incontrovertible. La prevalencia del trastorno delirante en Chile es de 1,8%, y el subtipo celotípico llega a ser un 11% del total. El comienzo de la celotipia está marcado por la aparición de la idea fija de celos, la cual nace desde la duda, pero esta duda tiene por punto de partida, un motivo fútil, que puede ser un evento que pase desapercibido en primera instancia y luego se le den interpretaciones equívocas e irrefutables. Luego de la creencia de infidelidad, se llevan a cabo conductas acordes como medidas de control y coacción, dando paso al delirio sistematizado e indiscutible. El principal problema con el manejo de esta patología es persuadir al paciente de que necesita ayuda.

Es importante mencionar que los celos no justifican la agresión de género o machista y que la gran mayoría de los "crímenes pasionales" no se deben a la celotipia, sino a violencia de género.

Dra. Valeria Chávez Martínez

Residente Programa Especialidad Psiquiatría AdultosFacultad de Medicina Universidad

de Concepción