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Alertas alimentarias

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En el último tiempo, en distintos momentos, una serie de noticias ha impactado a los consumidores de alimentos envasados.

El llamado al retiro de productos alimentarios por parte del Ministerio de Salud, provoca desconfianza y alerta en la población, sobre todo cuando estos productos están destinados a niños con condiciones de salud especiales, como es el caso de una alerta sanitaria que afectó a los recién nacidos prematuros.

Las alertas alimentarias consisten en un procedimiento donde se establece el retiro de algún producto alimentario del mercado, que luego de una evaluación se determina si es un riesgo para el consumo humano. Se trata de una estrategia implementada en función del creciente mercado de alimentos envasados donde los consumidores tienen la oportunidad, a través de la información en la etiqueta de alimentos, de conocer las condiciones y periodos de tiempo en que éstos fueron procesados. De esta manera es posible saber si los productos adquiridos forman parte de esta alerta.

Con esta misma información, la autoridad sanitaria correspondiente puede, a través de un proceso de investigación, realizar la trazabilidad o seguimiento al producto.

Ante la eventualidad de haber adquirido un producto sujeto a retiro por una alerta sanitaria, los consumidores en primera instancia deben abstenerse de la ingesta del alimento como medida preventiva y luego se debe entregar a la empresa productora o distribuidora, donde se debe reembolsar al consumidor el valor del producto.

Finalmente, en caso de sospecha de consumo, se recomienda asistir al centro de salud más cercano para una evaluación y tratamiento en caso de ser necesario.

académica

Nutrición y

Dietética,

U. Inacap

Concep.-Thno.

Antiinflamatorios podrían poner en riesgo a pacientes cardiacos

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Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), 60% de las población en el mundo tiende a automedicarse frecuentemente.

La experiencia de Paula Miranda, químico farmacéutico de Farmacias Ahumada, da cuenta que la cifra del organismo internacional se replica en la realidad chilena y son los analgésicos como el ácido acetil salicílico (aspirina) o antiiflamatorios, parte de los fármacos pedidos y usados con mayor frecuencia. De hecho, personas de todas las edades, desde adolescentes a ancianos, cotidianamente están en el mesón de una farmacia solicitando antiinflamatorios ante cualquier dolencia. Sobre esto, la profesional es clara al decir que pocos saben que en pacientes con alguna afección al corazón el comportamiento irresponsable de consumir fármacos sin prescripción médica y de manera desmedida puede incluso traer consecuencias fatales. "Estos provocan diferentes síntomas y reacciones secundarias en pacientes con dolencias al corazón causando arritmias, polipnea e, incluso, infartos al miocardio", afirma. Así también, y no menos importante, la profesional menciona que "otro de los riesgos potenciales es la adicción o dependencia que se puede generar".

Además, afirma que el uso indiscriminado de antiiflamatorios puede desencadenar graves problemas al corazón, pero también dolencias musculares, hemorragias digestivas e insuficiencias renales. "Consecuencias gravísimas si pensamos que sólo en 2016 se vendieron más de 6 millones de unidades de este medicamento", alerta Miranda.

EDUCAR

Es por lo mismo que enfatiza en lo necesario que es entregar los lineamientos para que este grupo de pacientes no ignoren los efectos secundarios que pueden acarrear medicamentos considerados, generalmente, como inocuos, como lo es una aspirina o los antiinflamatorios. "Por esta razón es fundamental ser responsables, desde la vereda del consumidor como desde la nuestra. En este sentido, debemos educar y concientizar a nuestros usuarios y llamar, incansablemente, a que frente a algún tipo de dolencia inusual siempre visiten a un médico. Más vale prevenir que curar", finaliza.

Los adultos mayores

La OMS dice que están en más riesgo al automedicarse: por su edad sufren deterioro natural de ciertos órganos y sus funciones, y requieren fármacos y dosis especiales.