Enfermedades pulmonares: el papel de la contaminación y el tabaquismo en Chile
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), la Enfermedad Pulmonar Obstructiva Crónica (EPOC) afecta a cerca de 384 millones de personas y estima que, en 2030, será la tercera causa de muerte seguida sólo por el cáncer de pulmón y la diabetes. Así las cosas, se trata de una de las patologías más discapacitantes.
La EPOC se manifiesta como una bronquitis crónica o un enfisema pulmonar, es progresiva y puede agravarse al punto de llegar a ser mortal. La principal causa que la genera es la exposición al humo del tabaco, en casi el 90% de los casos, según la OMS, aunque también se puede generar por la aspiración del humo de la leña, por la combustión de químicos, polvo y otros contaminantes recibidos en forma pasiva o activa.
Quienes sufren de EPOC están propensos a sufrir enfermedades cardíacas y del sistema nervioso central, así como a desarrollar diabetes, osteoporosis e incluso depresión.
EPOC EN EL MUNDO
En entrevista con este medio, Peter Calverley, profesor británico de Medicina Respiratoria en la Universidad de Liverpool, ex Presidente de la British Thoracic Society y miembro del Comité Ejecutivo del tratamiento para las patologías EPOC, explica cómo se genera la enfermedad, los avances de la medicina moderna para su tratamiento y las maneras de prevenirla. Caverley estuvo recientemente en Chile, invitado por el laboratorio Boehringer Ingelheim para dar una charla titulada "¿Qué tratamos cuando tratamos a un paciente con EPOC?".
- Generalmente es la presencia de disnea o ahogos, motivo que provoca que los pacientes comiencen a cansarse más con las actividades de su vida diaria como caminar, por ejemplo, para luego desarrollar una tos crónica acompañada de flemas (expectoración con mucosidad) a lo largo del día. En muchos pacientes se asocia con síntomas de bronquitis, donde hay más producción de esputo (secreción procedente de la nariz que se escupe), lo que representa un mecanismo de defensa para tratar de proteger a las vías respiratorias contra el daño pulmonar.
- Sí, muy frecuentemente. Sabemos de personas que desarrollan asma la primera vez cuando son adultos, pero a veces se confunde con patologías cardíacas y es porque mucha gente tiene ambas enfermedades. Ahí, como especialista, hay que considerar qué es lo más importante, si la afección de los pulmones o el corazón, y qué se puede hacer al respecto para tratarlas en conjunto.
- Esta es una enfermedad que existe desde la Edad Media. Estimaciones indican que la prevalencia en los adultos es entre los 35 y 40 años y también durante la vejez. Cerca del 9% de las personas, en promedio, va a tener alguna evidencia de EPOC en sus vidas. En Sudamérica tenemos buenos datos, los que sugieren que, en grandes ciudades, la frecuencia puede oscilar de un 8% hasta casi un 20%. En Chile, las cifras de prevalencia alcanzan entre un 10% a un 13% en las ciudades donde hay más contaminación. En el caso de las ciudades más al sur del país, a pesar del uso de leña como método de calefacción, sugieren que un 9% de los adultos desarrollará la patología.
AIRE Y TABAQUISMO
El doctor Calverley indica que la inhalación frecuente de humo, ya sea de leña o de cigarrillo, va destruyendo los pulmones gradualmente, lo que dificulta que las personas trabajen, ya que se cansan mucho, experimentan dificultades para respirar y mientras sigan expuestos las condiciones de salud empeorarán.
- Eso dependerá de cuán ventilado se encuentre el espacio en el que se esté quemando la leña. Si, por ejemplo, las habitaciones están en un piso superior y el lugar físico de la quema en la planta baja, probablemente no sea muy dañino, aunque puede haber algunas circunstancias en las que el humo se filtre en otros espacios sellados de una vivienda. La inhalación permanente de humo sí puede afectar los pulmones a largo plazo en niños y adultos.
- Ambos factores sí pueden contribuir a la EPOC y a las enfermedades pulmonares en sí, ya que la polución exacerba los síntomas de las patologías cardiorespiratorias. Respecto al tabaquismo, la evidencia, que se ha confirmado una y otra vez es que si una persona comienza a fumar desde la adolescencia, sus pulmones van a dejar de crecer más temprano que tarde y se van a estancar antes de finalizar su crecimiento. Sobre los fumadores pasivos, muchos están expuestos a los combustibles presentes en el humo y su salud también se puede deteriorar paulatinamente.
- Los avances más útiles han sido el desarrollo de tratamientos con inhaladores que contengan dos medicamentos broncodilatadores en el mismo dispositivo. Ese tipo de fármacos deben ser drogas de acción prolongada, para que funcionen en relación a mejorar el bienestar del paciente tras su falta de aire y cansancio en la realización de actividades cotidianas. Ahora bien, las personas que manifiestan episodios asmáticos deberían añadir esteroides a su medicación para un mejor pronóstico.