Emociones fuertes pueden generar el "Síndrome del Corazón Roto"
Los seres humanos sí podemos morir por amor. El Síndrome del Corazón Roto, más conocido con el nombre japonés Tako-tsubo, es una cardiopatía que se genera en el órgano cuando la persona se enfrenta a emociones muy fuertes, positivas o negativas. El término de una relación amorosa, recibir un mal diagnóstico médico o la sorpresa de una buena noticia como ganar un premio o una propuesta de matrimonio, pueden generar este mal, que afecta, en su mayoría, a mujeres entre 50 y 75 años.
Los síntomas son iguales a los de un infarto: dolor opresivo en el pecho, aumento de las palpitaciones cardíacas y de la presión, así como sudoración excesiva. Las únicas diferencias para detectar la patología son que el especialista debe realizar un estudio y un seguimiento a las arterias coronarias hasta un mes después de sufrido el episodio y que el Síndrome del Corazón Roto se puede revertir hasta en un 100% con la medicación adecuada y con algún tratamiento complementario, como el yoga o el reiki, para aprender a manejar las emociones. También, con la derivación a un psicólogo o psiquiatra, si los problemas son muy profundos o recurrentes en el tiempo.
CORAZONES ROTOS
El nombre en japonés se refiere a unas especies de bolsas que se utilizan como carnadas para pescar, similares a la forma del corazón, las que se asemejan a una vasija en forma de balón. Es en ese país asiático donde se han registrado la mayor cantidad de casos.
En entrevista con este medio, Mónica Acevedo, jefa de la Unidad de Cardiología Preventiva y Rehabilitación Cardiovascular de la Red de Salud UC Christus, explica por qué se genera este mal, el tratamiento que requiere, técnicas de autocontrol para aprender a manejar las emociones fuertes y cómo cuidar el órgano.
-Es una miocardiopatía, es decir, compromete al miocardio, y su presentación química es indistinguible a un infarto. Sus principales síntomas son dolor opresivo del pecho de alta intensidad, dificultad en la respiración e incluso la manifestación de un edema pulmonar cuando el caso es muy grave, que es cuando el órgano se llena de líquido. Cuando un paciente llega a un servicio de urgencia, el especialista no tiene cómo diferenciar un Tako-tsubo de un infarto. El diagnóstico se hace cuando al paciente se le realiza un ecocardiograma o cuando se estudian sus arterias coronarias y se puede ver que estas están libres y destapadas. Con esos exámenes, el especialista podrá detectar que el corazón está abalonado en la punta, en la mitad o en la parte más proximal, más arriba del órgano, siendo este el lugar más frecuente.
-Es una enfermedad cardíaca que se produce generalmente después de vivir una emoción muy fuerte, como aquellas que te pueden elevar la presión o producir taquicardia, generalmente las que se asocian a un sentimiento o a una experiencia más bien negativa. También se pueden dar en el contexto de emociones que sean positivas, por ejemplo, si te ganaste un premio millonario que te va a solucionar la vida, la realización de un viaje o si te pidieron matrimonio.
-Diría que todos los especialistas que ven mi área, e incluso los de medicina interna, conocen este síndrome a pesar de lo "nuevo" que es. No importa que ellos piensen, en un principio, que es un infarto al miocardio agudo; lo fundamental es estudiar las arterias coronarias para llegar a un diagnóstico definitivo lo más rápido posible. Interrogar a los pacientes y conocer sus antecedentes médicos también es necesario para descartar el infarto.
TÉCNICAS Y TRATAMIENTO
La doctora Acevedo indica que todo este tipo de emociones causan una cardiopatía, mayormente en mujeres desde los 55 a los 75 años. "Igual se puede ver en todas las edades, pero es muy poco común que afecte a personas jóvenes menores de 30 años, hombres o mujeres. Otra explicación es que la sensibilidad de esas mujeres es mayor después de la menopausia, cuando ya no hay tanto estrógeno ni otras hormonas que afectan a la emocionalidad", complementa la especialista de la Red Salud UC Christus.
-Después de que se han estudiado las arterias coronarias mediante un ecocardiograma o una radiografía, el tratamiento es muy similar al entregado a los pacientes que sufrieron un infarto. Los pacientes afectados también deben permanecer en una unidad coronaria y tener soporte, si es que lo necesitan, como estar conectados a un ventilador mecánico. Básicamente los cuidados son los mismos. Ahora, el síndrome se diagnostica con un 100% de seguridad cuando, después de uno o tres meses, el especialista vuelve a hacerle una ecografía al paciente y se cerciora de que las arterias se hayan recuperado totalmente de esta falla cardíaca.
-Sí, lógico. Respirar profundo, saber que todo va a salir bien, considerar que el problema no es tan terrible y que puede tener una solución. Estas técnicas a veces pueden ser inmanejables al momento de sufrir un episodio agudo, porque en la mayoría de las personas la primera reacción ante una mala noticia es estallar en llanto o ponerse muy nervioso y desesperarse, lo que inmediatamente aumenta la presión y las palpitaciones del corazón. Por otro lado, hay tratamientos complementarios que sí se pueden utilizar como el yoga o el reiki, pero siempre se recomienda el uso de la medicina tradicional en vez de otras más alternativas. Ahora bien, si es una patología psiquiátrica o psicológica podemos hacer una derivación clínica a un especialista del área para que los pacientes aprendan a manejar sus emociones y requerir el apoyo que necesiten.