Cerro Cayumanque inicia su última fase de restauración
En total, 440 mil árboles o arbustos de 14 especies distintas plantadas en cerca de 300 hectáreas resumen el trabajo realizado para recuperar el Cerro Cayumanque, ubicado entre tres comunas de las regiones de Biobío y Ñuble, que fue afectado por el megaincendio de 2012.
Durante la jornada de ayer el seremi de Medio Ambiente, Mario Delannays, junto al alcalde de Florida, Jorge Roa, y beneficiarios del programa financiado por el Gobierno Regional, iniciaron la última etapa de reforestación. Restan por plantar cerca de 20 hectáreas para completar el programa que comenzó formalmente en 2014.
"El programa nos ha permitido -solo este año- reforestar más de 80 hectáreas, lo que es significativo para el objetivo trazado. Esto ha beneficiado a 50 sitios, que son propietarios que voluntariamente nos han brindado la opción de reforestar en sus terrenos", contó Delannays.
El alcalde de Florida recordó que el programa no sólo beneficia a su comuna, pues también involucra a Ránquil y a Quillón.
VOLUNTARIADO
Uno de los aspecto que destacó el seremi de Medio Ambiente es que el programa desarrollado para restaurar el ecosistema Cayumanque entusiasmó a más de 700 voluntarios, entre ellos, universitarios, escolares, scouts, familias y funcionarios públicos, entre otros.
Delannays expuso que con este apoyo se trabajó en 25 hectáreas, en 36 eventos distintos, dentro de 14 sitios de las tres comunas que comprende esta iniciativa. En total se plantaron 10 mil especies, aproximadamente.
La autoridad regional de Medio Ambiente destacó que a través de estas acciones se estrecharon lazos con los propietarios de sitios, haciendo convenios de mantención y cuidado de esta restauración, y también de fortalecimiento de la alianza público-privada.
Este trabajo conjunto permitió que la última etapa de reforestación se llevara a cabo en la parcela La Tuna, propiedad de Manuel Álvarez, quien perdió todo debido al incendio, pero gracias a la rápida gestión del municipio, Indap y el apoyo familiar logró recuperarse.
Ahora el programa le permitirá reforestar plantas nativas en alrededor de 4 hectáreas de su parcela.
La iniciativa tuvo una inversión superior a los $2.300 millones y permitió además trabajar la educación ambiental en 17 establecimientos educacionales, beneficiando a 1.800 estudiantes, profesores y apoderados.
También se lograron realizar talleres de prevención de incendios, de biodiversidad, restauración escolar, entre otros, haciendo de este programa algo más completo.