La acción de los octavos de final del Mundial de Rusia continuará hoy con uno de los favoritos al título, España, enfrentando en el Estadio Olímpico Luzhnikí, de Moscú, al conjunto anfitrión, y con el choque entre Croacia y Dinmarca, a disputarse en el Estadio de Nizhni Nóvgorod.

Fernando Hierro, el entrenador de los hispanos, aseguró que sus jugadores "van a dejar la vida" para avanzar a cuartos. "Tenemos claro el plan, sabemos lo que queremos, lo que es Rusia y sus condiciones. Tenemos una confianza plena en nuestro trabajo y en nostros. Estamos en buen estado físico y mental", agregó.

Sobre el estilo de juego de España, David Silva se defendió de quienes acusan poco dinamismo o intensidad, asegurando que "lo que nos ha llevado a los éxitos ha sido tener el balón. Luego cada partido te pide cosas diferentes y hay que saber leerlos como hemos hecho todo este tiempo. La filosofía que tenemos es la adecuada y es la que nos ha llevado a ganar".

Por el otro lado, el seleccionador ruso, Stanislav Cherchésov, aseguró que a pesar del favoritismo de los ibéricos, "como dicen en Rusia nada es imposible".

"España tiene grandísimos jugadores, si no es la mejor selección del mundo está cerca, pero a todas las selecciones se les puede hacer daño y lo vamos a intentar. Si juego intentaré ayudar a mi equipo y me centraré solo en eso", aportó Denís Chéryshev, una de las figuras de los locales.

las sorpresas

Quien se imponga en este cruce enfrentará al ganador de la llave entre Croacia y Dinamarca, equipos que dejaron muy buenas sensaciones en la fase grupal y que buscan ser la sorpresa del torneo.

"Guardamos mucho respeto por Dinamarca. Hace mucho tiempo que no pierde. Es un equipo ordenado que sabe qué hacer. Esperamos un partido muy duro, pero todo depende de nosotros", dijo Zlatko Dalic, el DT croata.

"Sabemos que Croacia es un buen equipo con buenos jugadores. El tipo de juego es diferente al nuestro. Tenemos que defender y saber atacar", avisó Age Hareide, el técnico de Dinamarca.