UdeC arrienda colegios para retornar a clases tras quiebre de mesa negociadora
El pasado viernes 22 de junio se quebró la mesa de negociación entre la mujeres autoconvocadas de la Universidad de Concepción (UdeC) y su Rectoría por diferencias en la fecha del retorno a clases como exigencia para continuar el diálogo. Esto provocó que la casa de estudios decidiera arrendar tres colegios del centro de Concepción para que los alumnos pudieran continuar con sus actividades académicas, las que fueron interrumpidas hace casi dos meses.
La información fue recibida por las estudiantes de la Facultad de Educación a través de un correo electrónico que les señalaba que las clases se iban a restablecer este lunes 25 de junio a partir de las 17 horas en los colegios La Providencia, San Agustín y Salesiano. Las otras carreras también regresarían a clases de forma gradual.
Esto provocó una serie de manifestaciones por parte de las estudiantes movilizadas, quienes cortaron los accesos a la universidad durante la mañana y en la tarde funaron el retorno a clases.
MANTENER BENEFICIOS
La Rectoría de la UdeC confirmó el arriendo de establecimientos y argumentó que se encuentran con una "necesidad imperiosa de restablecer las actividades académicas".
El plantel justificó la decisión en tres puntos: mantener la formación de calidad al no reducir las semanas del calendario de clases, no perder los cupos en los establecimientos de práctica y que ya están definidos, y finalmente dar continuidad a los beneficios estudiantiles.
El último es el punto más importante, porque en marzo las instituciones de Educación Superior beneficiadas con la gratuidad deben entregar un informe sobre sus estudiantes y con la pérdida de clases, arriesgan perder el beneficio.
La casa de estudios declaró que "en la UdeC existe un número importante de estudiantes con beneficios ministeriales (11 mil 711 con gratuidad). El retraso en la actividad académica, y por tanto el registro tardío de notas, arriesga el no cumplimiento de los informes que deben ser enviados al Ministerio de Educación para dar continuidad a dichos beneficios".
Agregaron que no entregarán, por el momento, el costo de estos arriendos y que la medida se extenderá hasta que se depongan las tomas.
Con molestia
Las estudiantes movilizadas reaccionaron molestas con esta medida. "Es una falta de respeto que se esté ocupando dinero que tiene la U para este tipo de situaciones y que después, en la mesa de negociación, se nos diga que la universidad no tiene plata, no tiene ingresos, que va a faltar dinero, que nosotras estamos apostando a mucho con este petitorio, cuando realmente tienen el dinero suficiente para arrendar liceos e invalidar la democracia estudiantil", indicó Patricia Mancilla, una de las alumnas negociadoras.
Sin embargo, a raíz de la funa no se pudieron iniciar las clases ayer en esos establecimientos.
Justamente vinculado con esta situación, el Colegio San Agustín envió un correo comunicando que no facilitarán sus dependencias debido a la falta de garantías de seguridad para su comunidad educativa. Será reemplazado por otro establecimiento escolar.
DISPOSICIÓN AL DIÁLOGO
Pese al quiebre de la mesa, ambas partes mostraron su disposición a retomar las conversaciones, pero sin la opción de bajar sus demandas.
El rector subrogante, Carlos Von Plessing, señaló que "queremos reafirmar que la mesa de negociación se dio por terminada ante la falta de acuerdo de las partes, respecto de la forma de continuar el trabajo pendiente. Las representantes de las mujeres autoconvocadas condicionaron la continuidad de las sesiones de la mesa a que se pospusiera nuevamente el regreso a clases".
Recalcó que existe interés por concretar la agenda de género comprometida y "nuestra voluntad de reanudar el diálogo en un ambiente de respeto". Eso sí, aclaró que eso implica la devolución de los espacios ocupados y que eso es totalmente compatible con la negociación.
Esta opinión dista a la de las estudiantes, quienes declararon que para ellas es insostenible tener que lidiar con una mesa de negociación y el final del semestre. "Aún existen compañeros y docentes acusados por acoso y abuso que no se ha procesado su desvinculación de las aulas. Por lo tanto, la universidad aún no es un lugar seguro", sentenció Valentina Hermosilla, otras de las estudiantes negociadoras.
Hasta el momento son 10 las facultades que se encuentran movilizadas y ya convocaron a un paro general para mañana miércoles 27 de junio. Desde el viernes 22 de junio que ambas partes no se han reunido.
Además, Patricia Mancilla agregó que "las movilizaciones y las medidas de presión van a seguir, eso se lo advertimos a las autoridades universitarias. Nosotras no vamos a parar hasta restablecer la mesa de negociación con la tomas arriba".