En el fútbol el tiempo pasa y los recuerdos quedan. Hechos que marcan la vida del hincha, esos que sufren con una derrota y que sonríen con un gol sinónimo de victoria.

En estas últimas décadas Naval sabe más de tristezas que de alegrías, sin embargo, en la retina del navalino hay planteles que suplen esa cuenta negativa, especialmente uno que consiguió un título y un ascenso, la última alegría en cancha de la escuadra del puerto.

Se trata del plantel de Naval 2008, campeón de Tercera División, uno que hoy se dará cita en el estadio El Morro para unirse al aniversario Nº74 del Ancla y de paso conmemorar una década del ascenso a Primera B. Los navalinos festejarán hoy con un duelo amistoso (18 horas) ante los cracks de Deportes Concepción.

"Reencontrarme con mis compañeros será bonito. Vivimos bastantes anécdotas y también penas para poder cumplir el objetivo", sostiene Enrique Salas, ex jugador navalino que dirá presente esta tarde en el puerto.

Salas, ahora preparador físico con presente en Valdivia y dirigiendo escuelas de fútbol, recuerda su paso por el Ancla con la satisfacción del objetivo cumplido. "La Tercera División no era la misma de ahora. Era un torneo de 48 equipos donde sólo sube uno. En ese momento habían varios equipos fuertes (Deportes Temuco, Iberia, Magallanes, Deportes Valdivia, Colchagua). La unión del equipo se marcó cuando fuimos Antofagasta. Enfrentamos a Unión Bellavista. Si perdíamos esa llave quedábamos eliminados y clasificamos", apunta el ex navalino.

El "Nº6" del Ancla agrega que "en un momento no teníamos ni uno y en el camarín tuvimos que tomar la decisión de si seguíamos o no. Varios estábamos al límite de la edad en Tercera División, decidimos seguir pese a los problemas y al final conseguimos el ascenso. Esa unión fue positiva, seguimos adelante porque nos dimos cuenta que la gente nos acompañaba. El plantel era bueno y gracias a Dios conseguimos el objetivo de ascender a Primera B".

PARTIDOS DEL RECUERDO

En la retina del hincha hay dos partidos que se recuerdan constantemente. La victoria del 14 de diciembre ante Iberia por 2-1 con agónico gol de Iván "Pichunga" Herrera todavía retumba en el estadio El Morro. "Partido a estadio lleno. Iberia venía con opciones y como uno de los equipos favoritos de la categoría. Nosotros dependíamos de otros resultados (Unión Temuco vs D. Temuco). Ese partido queda en la mente", relata Salas al rememorar esa victoria que le entregó al Ancla la primera opción de ascenso.

Siete días más tarde Naval consiguió el premio mayor en una calurosa tarde en el estadio Santiago Bueras de Maipú. El empate 1-1 ante Magallanes con un agónico penal de John Munizaga se sigue celebrando en el puerto.

"Ese momento uno lo recuerda siempre. Hay videos donde se muestra la alegría mía. Nosotros estábamos atentos a los que pasaba en San Fernando (Colchagua vs D. Temuco). Se dieron todos los resultados y conseguimos el título. Eso fue el pago del trabajo y esfuerzo de todo el año", culminó el ex navalino.