"Hace tal vez un año leí en El Sur que la Municipalidad de Concepción solicitó que le traspasaran el edificio que era de la Contraloría General de la República, que quedó dañado por el terremoto de 2010. El municipio, al firmar el contrato, se comprometió a recuperarlo. Ha pasado el tiempo y esta construcción está más abandonada que nunca. Es refugio de antisociales, que han destruido todo y que incluso arman fogatas en el interior. ¿Cuál era la idea?", se pregunta la lectora Susana Espinoza.