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Chupallas de Ninhue reciben Denominación de Origen

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La materia prima debe ser obtenida de trigo cultivado en las comunas de Quirihue, Trehuaco, Portezuelo, San Nicolás y Ninhue. Y no cualquier trigo tampoco, sino la paja de trigo de ocho variedades locales: Oregón, colorado, milquinientos, carrera, italiano, milufen, furfuya y cebolla. Esto, más el arte de las manos campesinas es lo que da forma a las chupallas de Ninhue, que esta semana obtuvieron el Sello de Origen, por parte del Instituto Nacional de Propiedad Industrial, Inapi.

Éstos sombreros han sido elaborados generación tras generación, a partir de la costura de largas trenzas (cuelchas). Su costura sin embargo, permite que se trate de un sombrero sin cortes ni enmendaduras en su confección, con costura de copa continua hasta el ala, por lo que a diferencia de otros sombreros de este tipo, este es lavable.

Esta especial forma de manufactura de caracteriza a los oficios tradicionales y a productos singulares de nuestro país fueron algunos de los atributos que permitieron a las chupallas de Ninhue, obtener este Sello de Origen, lo que oficialmente se concretó en una ceremonia realizada en el tradicional Museo Santuario Cuna de Prat en Ninhue, con la presencia del subsecretario de Agricultura, Alfonso Vargas y del jefe de gabinete del Instituto Nacional de Propiedad Industrial (Inapi), Cristóbal Jara, y que recibió Rafael Montecinos, presidente, de la Asociación de Artesanos de Ninhue, en representación de los artesanos y comerciantes.

Allí estuvieron también el director Ejecutivo de la Fundación para la Innovación Agraria (FIA) Álvaro Eyzaguirre, la alcaldesa de Ninhue, Carmen Blanco; la gobernadora de Ñuble, Paola Becker y el delegado Presidencial para la región de Ñuble, Martín Arrau, entre otras autoridades.

La Denominación de Origen (D.O.) identifica un producto como originario del país, región o de una localidad del territorio nacional, cuando la calidad, reputación u otra característica del mismo que sea imputable fundamentalmente a su origen geográfico, teniendo en consideración los factores naturales y humanos que inciden en la caracterización del producto.

La obtención de este reconocimiento será además, de gran utilidad para los chupalleros, ya que relevará su condición de producto único, de tradición, lo que le permitirá dar a conocer sus particularidades al público consumidor; además de poner en valor la identidad territorial y el oficio, de modo de ser reconocido, permitiendo la generación de soluciones sustentables e innovadoras, desde una perspectiva socioeconómica, ambiental y cultural.

Para la coordinadora de la iniciativa y docente de la Facultad de Ciencias Agronómicas de la Universidad de Chile, "la D.O. de las Chupallas de Ninhue, se puede interpretar como una valoración que hace el Estado de Chile, al trabajo y obra hecho por generaciones de chupalleros, colchanderas y campesinos del Valle del Itata, donde el conocimiento y saber de su gente, es un elemento fundamental para el desarrollo presente y futuro de su territorio. La valoración que se hace hoy afecta y empodera a cientos de campesinos y campesinas que toman en sus manos su destino".

Por su parte, el director Ejecutivo de FIA, Álvaro Eyzaguirre señaló que esta entrega es un reconocimiento largamente esperado por los artesanos de Ninhue y que durante el desarrollo del proyecto FIA se trabajó fuertemente, "a esto se suman las diversas acciones que se realizaron para optimizar el funcionamiento de cada uno de los eslabones que componen esta cadena, que va desde la producción de trigo hasta la elaboración de las famosas chupallas que coronan la estampa de los huasos corraleros. Esta iniciativa es un impulso más por proteger y perpetuar una tradición asociada a un territorio"

El subsecretario de Agricultura, Alfonso Vargas, junto con felicitar a los artesanos de Ninhue por la perseverancia que ha permitido obtener este reconocimiento, señaló que "con este sello se reconoce al sombrero huaso de la zona central, ícono de la identidad chilena y, por cierto, es también un justo reconocimiento a la labor del artesano chupallero, a su saber-hacer único, a la calidad de su trabajo y a la tradición histórica y geográfica en la que se enmarca".

Maximiliano Santa Cruz, director Nacional de Inapi, dijo que la obtención del Sello de Origen es "una buena herramienta para proteger a los productores de la competencia desleal, también protege al consumidor. Al igual que las marcas, las Denominaciones de Origen facilitan a los consumidores la decisión de compra, porque producen una diferenciación".

El Sello de Origen no sólo permite reconocer el valor que estos productos tienen para nuestro país, sino que también, y desde la perspectiva de quienes desempeñan estos oficios, les permitirá evitar la competencia desleal.