Empatía es esencial en el debate por cirugía de cambio de sexo
Muchas son las opiniones que nacen respecto al tema de cambio de sexo. Algunos a favor, otros en contra, y aquellos que optan por no exponer su postura, pero finalmente ¿cuál es la discusión que hay detrás de esta operación?
Si bien es cierto que el debate ha sido amplio en Chile, es preciso concretar ciertos puntos para aprobar la Ley de Identidad de Género, es decir, que se incluya a todas las sociedades científicas que participan en el proceso de tratamiento de personas transgénero.
Desde la Sociedad Chilena de Cirugía Plástica, el doctor Kenneth Guler, cirujano plástico especialista en operaciones de cambio de sexo, explica que este es un tema que está sobre el tapete. "Es una actividad que nosotros como médicos debemos tener totalmente clara, debemos abordar el tema al 100% porque en estos momentos esta condición ya no se esconde, sino que las personas discuten su transexualidad dentro de las familias y por lo mismo están buscando soluciones", menciona.
Asimismo, la cirugía de cambio de sexo aborda múltiples variables, desde los cuidados que deben aplicar los pacientes en el post-operatorio, hasta la discusión social que el tema ha captado.
Desde la Sociedad de Cirugía Plástica recalcan varios puntos relevantes para aquellas personas que están pasando por un proceso de toma de decisión para cambiar de sexo y someterse a cirugía.
En primer lugar, los pacientes deben haber pasado por una evaluación psicológica, el segundo criterio es tener una edad suficiente, más de 18 años, para realizarse cirugías. Un tercer criterio se relaciona con haber cumplido al menos 12 meses de tratamientos hormonales acompañados de terapia psiquiátrica-psicológica y el cuarto, es haber vivido como mínimo 12 meses de forma continua en el género deseado.
Luego de haber pasado por esto, se puede comenzar con las intervenciones corporales que lograrán el fenotipo.
Es así como Kenneth plantea que "una vez que el paciente ya está operado debe ser controlado para ver como van evolucionando sus cicatrices; para tratar complicaciones tardías que, por lo general, se dan luego de la transformación genital; para observar el comportamiento de las distintas zonas tratadas. A los 6 meses se puede observar el resultado definitivo".
En mi experiencia, desde hace 6 meses he estado realizando al menos un procedimiento al mes. El último mes tuve tres casos. Sin duda que va en aumento. Por ejemplo, en Talcahuano, en el Hospital Higueras, existe un centro donde, según algunos pacientes habría una lista de espera de más de 80 personas.
De acuerdo a las cifras del Registro Civil, los casos han incrementado a cabalidad desde hace algunos años. En 2006 los casos de operaciones por cambio de sexo eran sólo nueve, donde cuatro fueron de masculino a femenino, y cinco de femenino a masculino.
Pero la situación cambió 10 años después, cuando en 2016 las cifras aumentaron de nueve casos a 59, donde 30 fueron de masculino a femenino y 29 de femenino a masculino.
Sin duda, especialmente en los adelantos técnicos, sobre todo la microcirugía en cirugía plástica, ya que nos permiten ofrecerles a los pacientes las mejores opciones reconstructivas para lograr mejores resultados estéticos y funcionales.
ESCENARIO LOCAL
Desde los pasillos del Hospital Higueras, el doctor Rodrigo Baeza, Jefe de la Unidad de Transexualidad de la institución de salud, comenta su experiencia sobre la cirugía de cambio de sexo.
Su relación con esta operación comenzó hace algunos años atrás en Valparaíso, en su formación de post-grado, con el doctor Macmillan, el primer médico que comenzó a aplicar la cirugía de cambio de sexo en Chile en la década de los '80.
Fue así como Baeza conoció la operación de transexualidad, participando en un concurso a nivel nacional, donde tres urólogos fueron seleccionados para especializarse en este rol. "Tuve capacitación quirúgica para realizar esta técnica y desde el 2012 comencé a realizar cirugías con mayor frecuencia. Antes eran más bien esporádicas", relata.
Desde ese entonces, entre 2012 y 2013, ha funcionado la unidad multidisciplinaria para tratar a pacientes trans con diferentes actores. "Esta unidad cuenta con endocrinólogos, ginecólogos, cirujanos, atención de salud mental. Con esto buscamos una atención multidisciplinaria de los pacientes para poder tener una visión más global de ellos", menciona.
A su vez, Baeza comenta que los pacientes en control hasta hoy en Higueras son alrededor de 90.
La verdad es que no. Hay requisitos para que ellos accedan a la cirugía. Hay una etapa de diagnóstico y una de tratamiento, pero para que el paciente logre la segunda, debe cumplir con los 12 meses de manejo hormonal, 12 meses viviendo con su género asignado, necesita dos pases de salud mental, además de la evaluación endocrinológica y mi evaluación como jefe de unidad.
PACIENTES ACOMPAÑADOS
Si bien es cierto que muchas veces las personas trans sufren discriminaciones, burlas y humillaciones, el doctor Baeza junto a su equipo dan cuenta del sufrimiento que implica este proceso y se ponen en su lugar.
La empatía logra un rol fundamental en esta unidad, donde Baeza recalca la importancia del acompañamiento psiquiátrico de los pacientes. "Las personas trans han sufrido mucho, han esperado mucho. Un gran número de ellos sufre cuadros de depresión y ansiedad, por lo tanto, necesitan ayuda. Y lo que ocurre después de la cirugía también es un gran cambio en su vida, pero también en su cuerpo, por lo que requieren acompañamiento en esta etapa", subraya.
Quizás muchas personas se preguntan cómo se realiza cada operación, pues no es igual la cirugía para cambiar de sexo masculino a femenino que viceversa.
De acuerdo a lo explicado por el experto "ambas son cirugías complejas pero las que se realizan a los trans femeninos son sólo de un tiempo, que dura aproximadamente 4 o 5 horas y se hospitalizan siete días. No así los trans masculinos, que es una técnica que requiere de dos tiempo quirúrgicos", detalla.
En el mismo sentido, Baeza recalca que en Chile no existe una evaluación de la incidencia de esta operación, es decir, si se operan más hombres o más mujeres. Sin embargo, el especialista comenta desde su experiencia que son más los hombres los que cambian su sexo a femenino que las mujeres que cambian su sexo a masculino.
Siguiendo con la línea del acompañamiento de los pacientes, el doctor menciona que la empatía fue un elemento fundamental al crear esta unidad. "En el fondo, esto es como ponerse una mochila grande porque, al menos al principio, tuvimos que defender mucho a estos pacientes en el hospital. Cuando comenzamos había un sesgo frente a lo desconocido e inquietudes sobre lo que le pasaba a este grupo de personas, pero aprendimos que son pacientes diferentes porque les ha tocado muy duro", destaca.
En el mismo sentido, Baeza realza las capacitaciones que se realizan en el Hospital Higueras a los funcionarios, para enfrentar el escenario de los pacientes trans. "Te marca en el cristal cómo ellos miran todo. A veces son pacientes más desconfiados, pero tiene que ver con su historia. Por eso nuestras capacitaciones se enfocan a aquellos funcionarios que son parte de la atención de pacientes, gente de ventanillas, de admisión, porque es muy importante el tema del trato social, el nombre social, y eso es un trabajo permanente de participación y tolerancia para el trato de las personas trans", subraya.
Que son ignorantes y no conocen la realidad. Hablan sin saber, y en el fondo son personas cero empáticas, nunca se han puesto en el lugar del otro. Si uno se interioriza en este tema y se informa, no debería existir ningún sesgo. Aquellos que ven esto con malos ojos, o no saben de lo que están hablando, o no tienen la empatía suficiente respecto a las personas que sufren.
Tal como lo especifica el doctor, no existe un factor común que haga decidir a las personas de cambiarse de sexo. "Hay de todo, desde pacientes de 18 a 45 años, desde abogados a carpinteros, arquitectos, pintores, no hay un común denominador, excepto las historias de vida. No hay un paciente trans que no haya sufrido. Todos han tenido una vida difícil o muy difícil, esas son las opciones", concluye.