Un adelanto de la que será la política energética del gobierno delineó ayer ante un importante grupo de empresarios, académicos, ejecutivos y dirigentes gremiales de la zona la ministra de Energía, Susana Jiménez Schuster. Esto, en el marco del primer encuentro de un ciclo denominado "El Sur del futuro, ideas para el Biobío", organizado por este medio.
En la actividad, la secretaria de Estado dijo que el objetivo central del Gobierno es duplicar el crecimiento económico de los últimos cuatro años, aumentar la tasa de inversión en tres puntos del PIB, incrementar la capacidad de creación de empleos y mejorar la calidad de vida principalmente de la clase media que es el 70% de la población. En este plan macro es que se enmarca el plan energético del gobierno entre los años 2018-2022.
En el encuentro, realizado en el Hotel El Araucano, la personera señaló que el sector está viviendo una transformación profunda en materia de eficiencia energética, generación desde los hogares y movilidad eléctrica, en paralelo con un proceso de transición hacia una matriz energética más centrada en las energías renovables no convencionales.
En este contexto, planteó que uno de los desafíos de la Región del Biobío, cuya matriz está básicamente compuesta por energía hídrica y carbón, es liderar ese proceso de transición, de movilización energética.
las Energías renovables
Jiménez precisó que uno de los objetivos de la cartera es la ampliación de energías renovables y seguras, con menores emisiones de carbono, porque hay un compromiso de reducción de gases de efecto invernadero.
En esta línea se estableció la Mesa de Descarbonización y se reforzará la electromovilidad para lo que, dijo, se requieren políticas públicas que permitan acelerar la introducción de esta modalidad en el transporte público y privado; se fortalecerá el autoconsumo, se apoyarán las inversiones ecosustentables, además de avanzar en la interconexión internacional con Argentina y Perú. Además, se facilitará el acceso a la energía eléctrica a toda la población para lo que se hará un catastro de hogares en todo el país y, finalmente, se declara a la leña como un combustible fósil lo que permitiría normar su comercialización y uso, al tiempo que se promoverán usos alternativos a ella.
Además, para conciliar ese escenario con deficiencias y nuevas demandas, con cuellos de botella en transmisión y altos costos que siguen afectando a los industriales, es que se establecerán mesas de diálogo público-privadas con todos los actores en cada una de las regiones que en un periodo de dos meses deberían permitir a a la autoridad levantar una agenda con medidas y plazos a cumplir más definidos.
ANÁLISIS REGIONAL
Tras participar en una conversación que se realizó luego de la exposición de la ministra, el académico e investigador del Departamento de Ingeniería Industrial de la Facultad de Ingeniería y director del Doctorado en Energías de la Universidad de Concepción, Jorge Jiménez, sostuvo que será tarea de la nueva administración precisar cuáles serán las acciones concretas que se tomarán para beneficiar a los distintos actores del desarrollo energético que está ocurriendo tanto a nivel país como de la región.
Añadió que todavía no hay claridad respecto de qué instrumentos se usarán para incentivar el uso de estas energías limpias y por otro lado, favorecer la actividad manufacturera que es tan intensiva en la Región, desde el punto de vista de, por ejemplo, de un acceso privilegiado a precios, no solo en electricidad sino también en combustibles.
El experto de la UdeC agregó que las necesidades que tiene el sector productivo ahora se arrastran desde hace muchos años y que será clave definir qué medidas, sobre todo en una agenda de corto plazo, se van a tomar para poder recuperar competitividad.
En relación al consumo de leña en las regiones del sur del país -otro tema abordado por la ministra Jiménez y que sin duda tiene aspectos culturales, socio económicos y ambientales- Jorge Jiménez planteó que no basta solo con fomentar el uso de leña seca para minimizar el impacto ambiental.
"No es una medida que vaya a descontaminar las zonas urbanas, si bien puede ser efectiva en zonas rurales donde no hay mucha concentración de viviendas y probablemente se siga utilizando como principal energético, pero en zonas urbanas, en el corazón de ciudades como Chillán, Chillán Viejo, Los Ángeles y otras comunas del Gran Concepción y otras zonas que tienen bastante densidad poblacional está siendo un problema", planteó.
En la conversación también participó el past-president de Irade y líder del Comité Asimet Biobío, Gustavo Alcázar, quien señaló que una medida central a la que se debe enfocar en este ámbito es a fomentar mayores niveles de eficiencia energética.
"Además, hay muchos actores en ese rubro, tanto grandes y pequeños, que producen leña, por lo tanto la regulación es compleja", precisó.
Alcázar también apuntó a la nueva norma técnica en materia de distribución energética, que encarecería las tarifas por el servicio, lo que representaría una amenaza a la competitividad de las empresas.
mETAS AMBICIOSAS
Uno de los asistentes al evento fue Glen Rybertt, gerente general de Papeles Biobío, del Grupo BO Paper, quien en relaciónal inicio del plan Ruta Energética, iniciativa de participación ciudadana que inclurá a los distintos actores del rubro y que fue lanzada ayer por la ministra en Concepción, dijo que "son metas ambiciosas las que planteó la ministra. Porque ejecutar estas mesas de diálogo en dos meses es bastante ambicioso".
En relación a sus principales puntos de preocupación, precisó que "hay reglamentos que están afectando a las empresas electrointensivas de la Región con alzas significativas en el costo del uso del sistema eléctrico. Estamos tratando de resolver eso y nos gustaría mucho poder hablar con las autoridades y poder expresarles nuestra preocupación".
El ejecutivo aseveró que lo que eventualmente pueden ahorrar por energía en el mediano y largo plazo hoy lo están perdiendo con creces en función de los encargos que hay que pagar, principalmente en transporte de la energía, servicios complementarios, interconexiones, etcétera.