Moderado optimismo mantienen los industriales metalúrgicos de la Región
Recuperar las tasas de inversión como un eje clave que permita al país crecer y generar empleos es una de las principales tareas que se ha impuesto el gobierno del Presidente Sebastián Piñera y que el seremi de Economía, Mauricio Gutiérrez Bustos, detalló en una reunión desayuno organizada por el comité regional de la Asociación de Industrias Metalúrgicas y Metalmecánicas (Asimet), en el Club Concepción y a la que asistió el presidente nacional del gremio, Juan Carlos Martínez, empresarios y ejecutivos del sector.
"Queremos llegar al año 2020 a una tasa del 25% del PIB a nivel nacional y para eso necesitamos que ésta crezca entre un 6 y 7% anual en los próximos tres años. ¿Cómo hacerlo? Primero dando certezas; porque el inversionista no pone sus recursos en un país que no tiene claro hacia donde va", expuso el seremi en su presentación del "Plan de Desarrollo Regional".
Oficina de grandes
proyectos
Gutiérrez anunció la creación en el Ministerio de Economía de la Oficina de Grandes Proyectos que será una interfaz que articulará a los inversionistas, los gremios con los distintos ministerios respecto de estudios ambientales, permisos, de construcción etc. La idea es mejorar los tiempos de espera, "porque más vale un no rápido que esperar dos a tres años para tener un no. Estamos seguros que esta instancia va a destrabar todos los nudos con los diferentes ministerios y servicios asociados que intervienen en un estudio o declaración de impacto ambiental o en un permiso de construcción que en promedio demora 133 días en emitirse".
A los industriales les dijo que esta es una región con una industria pesada y manufacturera bastante grande, por lo que muchos de sus empleos y calidad de vida, dependen de cómo le va y cómo se gestionen estas empresas, que tienen que potenciarse a través de nuevas tecnologías, investigación y desarrollo, y supervigilando el mercado del acero para que no haya grandes distorsiones a nivel interno.
Los industriales en tanto reaccionaron con un optimismo moderado, puesto que hay ciertos factores que siguen contrayendo la actividad, según sostienen.
"Es muy tranquilizador ver esta presentación que nos da cuenta de que hay un plan de acción bastante concreto, preocupación por un crecimiento y todo lo que implica, pero hay otras medidas que es necesario abordar más rápido, porque nuestro sector está muy alicaído y es una rueda que cuesta echarla a andar", dijo Juan Carlos Martínez.
Estimó que el sector crecería apenas por sobre el 3% que alcanzaron en 2017, donde cree que lo que más les afectó fue el problema de la desconfianza y la ausencia de certezas "y eso se solucionó, por lo tanto, debiera haber más inversión.
El sector genera unos 150 mil empleos lejos todavía de los casi 200 mil del 2007.
Entre aquellos factores que más han incidido en la ralentización del sector están los altos costos de la energía. Al respecto, Martínez, admite que si bien los precios bajaron, hay empresas que son consumidores libres y que tienen contratos suscritos con antelación por a lo menos por dos años más y esa es una realidad que hay que abordar.
Así lo consignó también el presidente regional de Asimet, Gustavo Alcázar. Destacó que una de las buenas labores que hubo en la administración anterior fue bajar los costos de energía, pero eso no significa que hayan bajado lo suficiente. Hay una situación de rezago en que hay muchas compañías entre ellas las más grandes de la región cuyos contratos son de largo plazo lo que los mantiene amarrados todavía a pagar altos costos.
El dirigente gremial, dijo que incluso si se tuvo acceso a costos de energía en el mercado que fue gracias a una activa participación público- privada a través de la Mesa de Grandes Consumidores que se formó regionalmente, todavía esos precios son más altos que lo que se paga en Perú o en México, donde disponen de otras energías, principalmente gas.
A lo anterior Alcázar suma el hecho, sorpresivo, para los industriales que les llevó a pensar que producto de la interconexión de los dos sistemas eléctricos los costos serían menores. "De alguna manera los estamos teniendo, pero ahora resulta que las grandes compañías tienen que pagar los costos de transmisión, entonces en vez de ver ahorros en nuestras cuentas estamos viendo alzas y el tema es que claramente ese costo lo están pagando las empresas pero debería pagarlo todo el país. Evidentemente, desde el punto de vista político, es mucho más fácil cobrarle a las empresas que al consumidor residencial, pero al final del día si las empresas tienen un sobre costo y no pueden competir baja el empleo", precisó.
Con ello, desde el punto de vista regional en lo que es el crecimiento de la industria metalmecánica y de las industrias asociadas a Asimet, el diagnóstico es bastante sombrío todavía.
"Hay esperanzas de que hay una nueva administración que tiene nuevas ideas y que viene con un programa que se ve bastante auspicioso en términos que pudiera dinamizar la economía, pero no hay proyectos y estos no nacen de un día para otro", cerró el presidente regional de Asimet.