Hace un año se describía como una persona tímida y que prefería quedarse en la casa. No se sentía a gusto. Pero ahora, Alessia Injoque está feliz. Se le nota en la cara cuando cuenta cómo han sido estos ocho meses, desde que decidió contar su transición de género a través de los medios de comunicación.

Su historia, la de un ingeniero peruano de más de 30 años, casado, con un alto puesto en la cadena Cencosud que decidió cambiar su vida, se transformó además en la base de charlas motivacionales que ha dado en diversas ciudades de Chile. Fue esto lo que la trajo hace unos días a Concepción. Su historia fue una de las actividades de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer que se celebró en la Corte de Apelaciones. La actividad fue organizada por la Asociación Regional de Magistrados Concepción, Biobío y Arauco.

"El mensaje que quería transmitir es que a todos nos han contado historias cuando somos pequeños de lo que podemos o no hacer: eso no es para chicos, eso no es para chicas y vamos creciendo con estereotipos sobre cuál es nuestro futuro, y a veces no estamos en capacidad de darnos cuenta que muchas de esas historias no son ciertas y que lo que podemos hacer con nuestras vidas es mucho más flexible", describió.

-En esta elección tuvimos a un Piñera más conservador. En la elección anterior estaba promocionando el acuerdo de vida en pareja. En esta hubo un Piñera que se opuso a los niños trans, al matrimonio igualitario y por eso es difícil saber cómo va a evolucionar. Ojalá sea que solo estaba tratando de vender un discurso a un grupo de votantes. Tiendo a pensar que hay una posibilidad importante de que Piñera no quiera meterse en esos temas y deje que avancen en el Congreso, aunque sin darles prioridad. Ojalá que no se impida el avance de estas cosas.

-Es increíble, estoy muy feliz. Es una película que la mayoría de la gente trans, creo yo, siente propia.

-Sí, dos veces. Muchas de las cosas que pasan las pasé yo, como que cuestionen tu identidad. La gente pregunta "este no eres tú" y en algunos lugares se generan problemas incluso. El rechazo que tenía la familia de Orlando lo hemos sentido todas las personas trans e incluso hay casos mucho peores, como cuando se llevan a Marina en el auto y la dejan por ahí botada, en otros escenarios probablemente suceda.

Lo bueno de la película es que ha logrado generar empatía en la gente en Chile y logra cambiar corazones. Porque tú puedes cambiar algunas leyes, pero mientras no cambies corazones la cosa se mantiene rígida. La empatía es algo que mueve a la gente y creo que ahí Daniela Vega, Lelio y la película son un enorme aporte.

-Si bien hay una parte que es moda, creo que a la gente igual le queda la idea de que eso que pensaba de las personas trans no es tan así, porque ahí está Daniela, vive con orgullo y cuando se rompen estereotipos la gente va cambiando. Creo que este último año ha cambiado mucho Chile.

-Se hace difícil predecir que va a pasar. Por un lado, Piñera dijo que quedan fuera los niños, lo que es lamentable porque si bien es un tema complejo y hay que revisar la forma más adecuada de incluirlos, un niño trans es muy frágil, está expuesto a que le cuestionen permanentemente su identidad. Hay casos duros que son respaldados por un Estado que no les reconoce quienes son. Y en el caso de los adultos es preocupante que Piñera confunda identidad de género con disforia de género, porque patologiza el malestar por sentir que vives un género que no es tuyo. No hay nada patológico en ser tú mismo.

-Hay que darles herramientas a los padres para proteger a sus hijos. Creo que es errada la visión de que es el Estado el que decide qué es lo mejor para los hijos. Lo que debe hacer es dar herramientas a los padres para que en su situación, con sus hijos, puedan decidir qué es lo mejor para su familia.