Traspasan al nuevo gobierno regulación del transporte de Concepción y Tomé
Sorpresa causó la rápida resolución que tuvo la regulación del transporte entre Lota y Coronel, uno de los gremio más complejos del Gran Concepción y que cuentan con la mala fama de ofrecer un servicio deficiente, además de recurrentes problemas con los pasajeros y sobre todo con los estudiantes.
Excesos de velocidad y las carreras por captar antes que nadie a los pasajeros, además de las excesivas detenciones en los paraderos, se acabarán una vez que la Contraloría General de la República apruebe los contratos que cuatro de las seis empresas que circulan hasta la comuna minera firmaron hace algunos meses.
Aunque en Lota, Coronel y la provincia de Arauco el trabajo fue sencillo, el seremi de Transportes y Telecomunicaciones, César Arriagada Lira, detalló que lograr la regulación del transporte "es un tema tremendamente complejo en lo técnico y en lo administrativo".
Muestra de ello es la falta de acuerdos que deja pendiente el actual gobierno para el Gran Concepción y Tomé, en donde pese a que se hicieron todos los esfuerzos, como reconocen las partes involucradas, no se logró la última firma que pone fin a varios años de espera.
PENDIENTES
La actual regulación del Gran Concepción data de 2002 y debió ser renovada en 2005. Sin embargo, desde esa fecha los contratos de la licitación se han ido prorrogando por un año más sin que hasta ahora haya humo blanco para las nuevas condiciones del transporte local.
En Tomé todavía existe el libre mercado y son las propias líneas de buses las que fijan sus tarifas. Eso sí, los recorridos están definidos por la seremi de Transportes. Aún así, no existen mecanismos tecnológicos que permitan fiscalizar los recorridos, el tiempo en que se realizan éstos y otros aspectos que, entre otras cosas, mejoran la seguridad de los pasajeros y los conductores.
Arriagada aseguró que "avanzamos bastante", pero que "quizás me hubiese gustado dejar el tema terminado. Al menos cerramos un acuerdo bastante importante en el Gran Concepción. Quedan todavía pendientes algunos temas por resolver, pero lo importante es que están los recursos disponibles para llevar a cabo el perímetro de exclusión del Gran Concepción que permita tener una tarifa subsidiada, fiscalizar la operación y abrirse a temas que son totalmente necesarios para una ciudad moderna y en vías de desarrollo, como lo es la nuestra".
Pese a que los gremios de Tomé y el Gran Concepción aprueban la gestión del seremi Arriagada, coincidieron en que la única forma en que estos perímetros entreguen buenos resultados a la ciudadanía es con inversión en infraestructura vial que dé más importancia al transporte público.
Al respecto, Alejandro Riquelme Badilla, presidente de la Asociación de Dueños de Taxibuses del Gran Concepción, mencionó que "algunas de las condiciones que nos exigen tiene que ver con el cumplimiento de la frecuencia y en ese aspecto nos obligan a cumplir con un índice de regularidad, pero para cumplir eso necesitamos vías exclusivas que nos permitan saltarnos los puntos de congestión vehicular".
En la misma línea, Bernardo Montoya Figueroa, presidente de la Federación de Transportistas de Tomé, valoró los corredores existentes, pero también instó a que las nuevas autoridades consideren seguir ampliándolos, para que "ojalá algún día lleguen a Tomé, aunque por ahora nos conformamos con el que se está proyectando hasta Penco, con eso nosotros ya podemos asegurar un mejor servicio".
PRÓXIMO GOBIERNO
Aún en la incertidumbre de quién será el próximo seremi de Transportes y Telecomunicaciones para la Región del Biobío, los dirigentes gremiales celebraron que pese a que no se hayan logrado los últimos acuerdos, la negociación siga abierta para que a partir del 11 de marzo, día en que asuman las nuevas autoridades, se retomen las conversaciones.
"El seremi nos ofició, no hace mucho, cuáles eran los temas en los que estamos de acuerdo y en los que no. También nos indicó que la conversación sigue abierta para continuarla con el próximo gobierno. Así que estamos esperando ver cuál es el ánimo que viene para entrar a negociar otra vez", dijo Montoya.
En tanto, el presidente de la Asociación Gremial de Taxibuses de Concepción, Alejandro Riquelme, estimó que "queda poco para que lleguemos a un acuerdo". Sin atreverse a calcular una fecha, Riquelme manifestó que harán todo lo posible para que la regulación se concrete durante este año. Eso sí, siempre y cuando el próximo gobierno mantenga la senda que le traspasará la administración actual.
"Tenemos que seguir conversando con el gobierno que viene, la negociación quedó en un status quo en algunos acuerdos; por ejemplo, nos pidieron bajar la antigüedad de la flota, adecuar los uniformes, mejorar condiciones a algunos conductores y nosotros accedimos a todo eso. Tenemos que seguir conversando con el gobierno que llega, pero ojalá se mantengan los avances que logramos", dijo.
TRABAS EN SANTIAGO
El seremi César Arriagada aseguró que si las decisiones respecto de estos temas no se discutieran en Santiago, la regulación al transporte local ya estaría operando: "Muchos de los proyectos importantes de nuestra Región los deciden algunos técnicos que ni siquiera la han visitado y esa responsabilidad, la de aprobar los proyectos, la deberían tener las autoridades locales".
De paso, la autoridad de Transportes criticó la decisión de construir el Puente Chacabuco en vez del Ferroviario, "donde todos en la Región sabíamos que ese era el puente necesario. Nuestra Región siempre ha tenido una vocación exportadora y hoy tenemos un solo puente para trasladar la carga, que además tiene una restricción en horario punta".
A pesar de las críticas, Arriagada aseveró que el tema "no tiene que ver con culpabilidades, pero se podrían acelerar muchos procesos si las decisiones no se tomaran en Santiago. Este tema es necesario para destrabar y modernizar nuestra estructura estatal y política".