Secciones

Cereceros estiman disminución de un 50% en sus ganancias

E-mail Compartir

Tras experimentar un repunte durante el 2016, los productores de cerezas de Quillón reportaron una reducción de un 50% en sus ganancias durante la actual temporada, lo que se debería al bajo precio con el que el fruto está siendo comercializado.

Obtener cerezas de calidad no es una tarea fácil. Esto, debido a que no solo depende de los cuidados otorgados por los productores, sino que también de factores imponderables como las variaciones de las temperatura, la lluvia y los vientos.

Esto se vio reflejado durante la temporada 2015, cuando agricultores de Quillón, comuna que concentra a buena parte de los productores de la región, se vieron golpeados por fuertes temporales, los que afectaron tanto a la floración como a la polinización de sus árboles, generando pérdidas de hasta un 90%.

A pesar de que durante el 2017 el clima fue mucho más favorable, los productores se enfrentaron a una nueva amenaza, la que estuvo representada por el precio. El valor fue fijado en $350 por parte de los compradores intermediarios, esto es $400 menos que el promedio registrado durante el 2016.

Lo anterior, según Juan Merino, quien es agricultor cerecero hace 20 años, le provocó disminuciones de hasta un 50% en sus ingresos, lo que le dejó un margen muy estrecho de ganancias.

A eso le sumó que "este año generé un 20% menos a causa de las lluvias que tuvimos a principios de noviembre. Eso, sumado al hecho de que los empresarios nos fijaron un precio bajísimo, nos tiene en una posición complicada", explicó el productor.

recorte de presupuesto

Juan y su familia producen unos 100 mil kilos de fruta. Para llegar a dicha cifra, el fruticultor necesita contratar a otros 20 recolectores, a quienes paga alrededor de $15 mil por jornada.

No obstante, para esta temporada, el agricultor debió prescindir de dichos servicios, situación que también afectó a Bernardo Sanhueza, quien se dedica a la producción de cerezas a menor escala.

3

A pesar de que las causas de la baja aún no están claras, el productor quillonino y representante de la mesa de coordinación del Indap, Ramón Quintana, explicó que se cree que la disminución fue causada por la baja demanda generada por las empresas intermediarias, lo que se debe a que éstas ya poseían un stock relativamente amplio cuando comenzaron las cosechas y las ventas en la zona.

Por lo mismo, el agricultor aseguró que esperan solicitar al Indap la creación de nuevas alternativas para la comercialización de sus frutos, debido a que los productores pequeños hoy no pueden negociar con las exportadoras, ya que estas solicitan volúmenes mayores a los 10 mil kilos.

Dicho fin, explica, podría ser alcanzado inyectando recursos al sector, y mejorando la calidad de los árboles y materiales utilizados en el proceso.